HILO DE SANGRE - KOOKTAE

五十七

El cuervo dorado de tres patas atacó directamente a la serpiente, el duro pico podría agrietar las más duras rocas así que buscó oportunidades de perforar la fría carne mientras sus alas y patas trataban de bloquear la mordedura de los afilados colmillos; el veneno del reptil inmovilizaba a sus víctimas y hacía más fácil usar la constricción, perdió al pajarillo porque Zheng Guo lo invocó hacia sus manos nuevamente, así que no estaba dispuesto a dejar ir una presa más grande y poderosa, calculó que su carne no sólo podría llenarlo por un largo tiempo, también lo ayudaría a volverse más poderoso; ambos pelearon durante mucho tiempo. El fénix invocó más pajarillos de fuego que dejó volar por diferentes rutas sin resultado, todos se convirtieron en una bola de fuego que observó perdido en sus pensamientos, quitando el cansancio y la furia, se sintió impotente; el lindo polluelo estaba en el Palacio Sur, caprichoso, con la boquita de patito y poniendo todo de cabeza mientras él debía seguir su ruta por Los Confines, la energía de todo el grupo estaba casi agotada y se sintió cada vez más enojado; lanzó la bola ardiente hacia las ramas donde las dos bestias seguían luchando.

─ ¡Deja de perder el tiempo! Si no cumples tu labor y me llevas al maldito ser que atacó KunLun, te daré de alimento al Tigre Blanco cuando salga de su ciclo de cultivo ─gritó sin importarle el reptil que se retorció dolorosamente, su cuerpo empezó a entrar en combustión y se lanzó al agua fangosa para salvar su vida.

El cuervo dorado de tres patas graznó temeroso, aunque el fuego común no podía quemarlo, el del Rey de las Aves lo haría cenizas en un parpadeo. Vio de reojo el lugar donde la serpiente desapareció antes de alzar vuelo, la presencia que buscaba era tan desagradable que estaba seguro que era un demonio reptil o algo por el estilo. Luego de volar por el tiempo de quema de un palito de incienso, se posó frente al fénix para indicarle que debían moverse.

─ ¿Viste si el pantano tiene fin? ─preguntó irguiéndose, mientras esperaba noticias había vuelto con los demás ayudando a curar heridas. Al oír que el lugar se extendía por varios li, nadie estuvo feliz.

Avanzaron sin decir palabra, perdieron la noción del tiempo por completo; los islotes de tierra firme fueron cada vez más escasos, el agua turbia, fangosa y sucia terminó de arruinar sus trajes, la sensación de peligro fue cada vez más intensa.

─Según me contó mi tío, ningún lugar en Los Confines es sereno, esto no me agrada, Su Alteza ─susurró Guan Ting caminando junto al fénix, su espada nunca fue guardada en su vaina.

─Lo sé, en cualquier momento podríamos ser atacados, por eso no debemos bajar la guardia.

Gracias al cuervo dorado, esquivaron las arenas movedizas ocasionales, cuando el agua les llegaba arriba de los muslos, pudieron divisar una silueta entre los troncos; la figura humanoide de cuclillas por los matorrales, tenía la cabeza gacha y los brazos extendidos hacia el agua. El sobrino del general Guan Yu se acercó con sigilo, al estar a sólo un chi del hombre notó que era una figura hueca, no le tomó importancia y regresó al grupo, en el camino se toparon con diversas efigies del mismo tipo, las poses extrañas e incómodas resaltaban sus miembros anormalmente largos y sus rostros parecían fantasmales. 

─Ahora entiendo el nombre del pantano.

Fue difícil notar que al pasarlas, las estatuas los siguieron lentamente, sin hacer ningún ruido, el agua lodosa les dio la bienvenida sin problema. La espesa neblina pobló el lugar, los cultivadores usuarios de fuego escoltaron a los demás con su poder, gracias a la lumbre, el Guardián Sur notó sombras a dos chi, extendió sus alas para disipar la densa niebla encontrando algunos habitantes del Di Yu flotando boca abajo.

─Eran subordinados del Primer Rey ─dijo uno de los maestros Inmortales analizando las ropas y las características de los muertos.

─ ¿La persona que buscamos es el Primer Juez del Inframundo?