magnetic × seventeen

5. El profesor Hong

Seungcheol abrió los ojos y lo primero que vio fue a Soonyoung comiendo de un tazón con los pies sobre su cama.

― Es la última vez que te acompañamos en una misión ― se quejó con la boca llena ― Sigo molesto con el director Hong por incluir a Jun en esto.

Se giró para ver a Acacia sentada en una cama donde Junhui reposaba con una vía insertada en su brazo. ― Los otros transportadores estaban fuera de rango y Chan todavía es muy joven para…

― Después de dejarme en Corea tenías que descansar, no me importa ― interrumpió Soonyoung apuntándolo con los palillos, la verdad, es que Jun todavía no estaba certificado para ayudar en las misiones, su poder requeria de mucha energía y concentración, sobre todo cuando se transportaba a grandes distancias y llevaba personas con él.

Cuando hizo el ultimo viaje se desmayó y Soonyoung lo tuvo que cargar a la enfermería. Así que estaba molesto y llamó a al chico que estaba sentado junto a Jeonghan. ― Acacia, tú y yo lo hubiéramos resuelto, siempre lo hacemos.

Al ver a su amigo, Seungcheol se sentó de golpe asustando a Soonyoung, por lo que tiró el tazón. Antes de que cayera con su contenido, se detuvo en el aire.

El chico junto a Jeonghan tenía la mano extendida con una expresión seria, en un ligero movimiento, el plato volvió a las manos de Soonyoung como si nada hubiera pasado.

Wow.

― Gracias Joshua ― dijo Soonyoung feliz y continuó comiendo.

― ¿Dónde estamos? ― preguntó Seungcheol, pero antes de que pudiera responder, entró un chico alto con lentes, seguido de uno más bajo y pálido, ambos comenzaron a repartir bebidas y envases con comida.

― ¿Es picante? ― preguntó Jun al más alto, cuando este asintió, el chino se sentó derecho en su cama y comenzó a comer.

― En la enfermería ― contestó Acacia abriendo una lata de soda de naranja, luego observó cómo los ojos de Seungcheol cayeron preocupados sobre su amigo ― Jeonghan está bien, solo está durmiendo.

El chico bajo le ofreció una soda y un plato con dos rebanadas de pizza, Seungcheol no podía creer lo hambriento que estaba. Devoró todo en un santiamén olvidando sus dudas.

Cuando terminó de comer se sintió mareado, creyó que vomitaría de nuevo, pero se contuvo para observarlos a todos, Joshua, el chico de lentes y el de baja estatura llevaban uniforme escolar, mientras que Soonyoung, Acacia y Jun usaban pijamas a juego.

― ¿Qué día es hoy? ― preguntó interrumpiendo la historia de Soonyoung sobre como una vez casi incendia la casa de su tía.

― Es el mismo día, solo que es de noche ― respondió Acacia, al ver que Seungcheol estaba más animado y atento se levantó de un salto y presentó a sus amigos ― Ya conociste a Jun y a Soonyoung ― dijo señalándolos ― Ellos son Joshua, Wonwoo y Jihoon.
Los tres saludaron con entusiasmo.

― Esta es la enfermería de nuestra academia ― continuó ― Estudiamos y vivimos aquí, no te preocupes una vez al mes volvemos a casa por cuatro días. Mientras tanto, aprendemos a controlar nuestros poderes y asistimos a clases, como en un instituto normal.

Seungcheol asintió intentando asimilar la información.

― En lo que te sientas bien, hablaremos con el profesor Hong ― hizo una pausa cuando escuchó a Jeonghan roncar ― Él también.

― Normalmente los primeros viajes con un transportador te dejan desorientado y agotado ― explicó Joshua. Seungcheol observó a Jun y este lo saludó, habían retirado la vía de su brazo.

― No te acostumbras aún después del décimo viaje, confía en mí ― dijo Soonyoung. ― A la próxima, el apoyo lo brindas tú Hyung ― agregó señalando a Joshua con los palillos, tenía las mejillas llenas de arroz.

― Después de esta misión nos dan de baja ― lo reprendió Joshua. ― O eso espero.

― Eso nos dijeron hace dos años, no lo podía creer cuando recibí la solicitud ― se quejó Acacia. ― Ni siquiera fui la mejor rastreadora de la clase.

― Y si nos enfocamos en el chico nuevo ― interrumpió Jun con la boca llena.

Seungcheol parecía que estaba a punto de vomitar, pero se rehusaba a dejar que pasara frente a tanta gente, pidió algo de agua.

― Lo está haciendo bien ― Jihoon al fin habló ― Aun no ha vomitado su pizza, es buena señal.

Al mencionar aquello Seungcheol se sintió mareado de nuevo y volvió a recostarse, a pesar del ruido el sueño lo venció.