23. El plan perfecto

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Jeonghan, Sumgil, Seungkwan y Seokmin se encontraban gritando con emoción en el cuarto de videojuegos.

― ¡SUMGIL ESTÁN TOCANDO LA PUERTA! ― exclamó Mingyu desde la cocina, a pesar del escándalo logró escucharlo, colocó el juego en pausa y pudo notar el desespero con el que el visitante golpeaba la puerta.

Cuando la abrió soltó un grito que hizo correr a Jeonghan.

Era Junhui y estaba herido.

― Soon...young ― dijo Jun intentando mantenerse de pie, Sumgil comenzó a llamar a su hermano y a sus amigos, el chico sujetó la manga de su suéter ― Llamen... a... Soonyoung ― repitió con un hilo de voz, tosió algo de sangre y se desmayó.

Jun despertó con una vía insertada en su brazo, a su lado estaba Mingyu con unos guantes de látex revisando la caída del suero.

― ¿Cuánto tiempo estuve inconsciente? ― dijo Jun sobresaltándose, estaba en la habitación de Mingyu y un escalofrío recorrió su cuerpo, Seokmin colocó una toalla húmeda sobre su frente.

― Media hora ― explicó Mingyu recostando al chico de nuevo en la cama ― Soonyoung viene en camino.

Después de unos minutos el piromaníaco hizo su entrada.

― Será mejor que estés muriendo Wen Junhui porque interrumpiste mi cita con Bona ― añadió con la chica a sus espaldas, esta hizo un par de reverencias apenada.

Pero, el buen humor de Soonyoung desapareció cuando Jun le contó todo lo que había pasado, consideraba que su amigo era valiente o quizás estúpido, usar su poder para recorrer el área mientras escapaba era realmente peligroso, pero lo consideró parte de su deber y decidió respetar la decisión del chico, mientras más información, mejor.

Dio gracias a Seungcheol por su pequeña estrategia.

Jun, Mingyu, Sumgil, Seokmin, Jeonghan, Bona y Seungkwan lo veían caminar de un lado a otro mientras murmuraba.

― ¡Muy bien! ― dijo el chico dándose un golpe en la palma ― Joshua no está, así que me corresponde a mi organizar el rescate. Nos quedan aproximadamente diez horas, antes de que Acacia y Joshua hagan su movimiento, debemos estar preparados.

La razón por la cual Jun insistía tanto en contactar a Soonyoung, es que los rastreadores y sus equipos de apoyo eran entrenados para situaciones como estas, sin embargo, esta vez era más complicada, ya que el telepata era uno de los rehenes.

― Llama a Vernon ― ordenó señalando a Mingyu ― Y a Chan, Jun tiene que recuperarse para realizar los viajes.

― Pero, Chan... ― dijo Jun, a lo que Soonyoung lo calló con una seña, Mingyu comenzó a realizarla llamada.

Soonyoung apretó el puente de la nariz entre sus dedos.

― No tenemos suficientes habilidades de ataque ― sentencio. ― Así que Chan puede buscar a Sakura, ella solía ser parte del equipo de apoyo de Ishigami. También necesitamos un telepata... ― añadió y luego chasqueó los dedos ― La colega de Sakura, Ririchiyo, ella va en la misma clase de Joshua.

Los chicos se movieron para armar el plan y comenzar a contactar al resto.

Bona observaba fijamente a su prometido, el rubor invadía su rostro.

Sumgil se inclinó para hablar con ella ― ¿Estás bien?

― Si, es solo que... jamás lo había visto así de mandón... y creo que... creo que me gusta ― admitió, haciendo reír a Sumgil.

Jun explicaba lo poco que recordaba sobre el sistema de detección antes de ser atrapados. ― Probablemente, sea sensible a las ondas especiales que transmiten los cerebros de los chicos con habilidades, eso quiere decir que un humano corriente tiene la oportunidad de pasar desapercibido.

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