—¿Me quieres dentro de ti?—con una sonrisa torcida, observa el desnudo cuerpo del chico de ojos color miel.
Un fuerte sonrojo se apoderó de su rostro. Él deseaba tanto ser penetrado, tanto que todo su cuerpo retorciéndose de deseo era prueba de ello. Quería ser follado.
Jadea. Y es que su agüero no tiene suficiente, porque anhela algo más grande que lo pueda llenar por completo, pero no se atreve a pedir en voz alta lo que su ser reclama con ansias.
Dos largos dedos se abren dentro de él en forma de tijeras, torturandolo aún más, obligando a su esfínter a relajarse, abriéndose por completo para recibir a aquel que no había hecho más que hacer de su cuerpo un santuario lleno de lujuria que jamás tenía suficiente. Porque Cyrus siempre quería más y más, pero no era su culpa sino de TJ.
Su columna se contrae involuntariamente, mientras que su agujero también se encuentra lo suficientemente dilatado como para poder ser penetrado.
Vuelve a jadear. Su respiración se mantiene errática, y sin poder evitarlo se siente muy avergonzado por sentirse tan vacío con aquellos grandes dedos dentro de él. Quería algo más grande.Thelonius, lo observa, sabe que Cyrus está en su límite, pero aún así juega con él, con su excitación. Ansioso por él.
Su pene estaba duro, él también quería penetrarlo. Y como no estaba dispuesto a privarse de algún deseo que tuviera, colocó las piernas de Cyrus sobre sus hombros, disfrutando de todo su rostro sonrojado. Todo su cuerpo estaba caliente, esperando por él, justo como lo haría una puta. Cyrus era una puta, por supuesto que sí, pero era sólo su puta y de nadie más.
—¿Me quieres dentro de ti?
Pregunta con burla, posicionando su pene en la húmeda entrada de Cyrus.
El chico de religión judía, cubre su rostro con su antebrazo, escondiendo su mirada del basquetbolista, y dijo lo que este ansiaba oír.
—...por fa-vor, penétrame.
Entonces quitó el antebrazo del rostro de Cyrus y sin más lo penetró de una sola estocada. Tan rudo como a él le gustaba. Arremetió contra aquel cálido agüero una y otra vez sin detenerse ni una sola vez, adoptando un ritmo continuó, por demás violento, hundiéndose en Cyrus de la forma que a él tanto le gustaba.
El ruido incesante que se producía por el choque de sus pieles, hizo que el chico judío, se perdiera por completo, llegando a su orgasmo, sobre su abdomen. Eran increíbles los orgasmos que experimentaba cuando Thelonius lo hacía suyo, no creía lo sensible que podía ser su próstata cuando de TJ se trataba, porque no importaba cuántas veces estimulará él mismo su próstata, el efecto jamás era el mismo.
Gimió profundo, sintiéndose realmente extasiado. Completo, absolutamente satisfecho, y sin poder evitarlo se dejó ir, poniendo sus ojos en blanco, mientras un rotundo placer lo envolvía de la cabeza a los pies.
Su cuerpo continuó siendo sacudido por quien lo tomaba con verdaderas ansias, como si buscara llegar más profundo dentro de él, ¿Podría llegar más allá de lo humanamente posible? La idea lo quebró, por supuesto que podía, pensó Cyrus con su último aliento, pues Thelonius lo había vuelto completamente suyo en cuerpo y alma y ya no había marcha atrás. No obstante, era escalofriante lo bien que se había tomado aquella verdad, porque él amaba ser de TJ. ¿ Pero TJ era de él? Tal vez no, pero tampoco era de alguien más y sólo eso bastaba para que continuará adoràndolo.El orgasmo de Thelonius lo tomó por sorpresa, al sentir como sus entrañas estaban llenas por su semen. Si no fuera por su condición de hombre, TJ ya le hubiera hecho un hijo.
Al principio creía que sólo se corría dentro de él porque podía hacerlo ya que no había riesgo alguno de embarazo, pero en realidad no era así, Thelonius se corría dentro de él porque de esa forma lo marcaba como de su propiedad. Porque él era del basquetbolista.
Entonces recordó las palabras de la rubia, porque a partir de estas se sintió especial para Thelonius.«¿TJ usa condones cuando está contigo?»
Amber se había reído mucho después de preguntar eso, alegando que su pregunta era estúpida porque Thelonius siempre los usaba, jamás se atrevía a tocar a alguien si no tenía protección, no importaba que tan caliente estuviera. Porque había tenido un tío que había muerto muy joven a causa de una enfermedad de transmisión sexual, y él se había traumado ante aquel hecho.
Lo cierto era que la primera vez que estuvieron juntos si uso, pero la segunda vez cuando lo arrastró hasta el baño del colegio no, es más ni hablar de las ocasiones siguientes, porque TJ no usaba protección con él pero eso era algo que Amber no sabía y Cyrus no diría.
……—¿Está más delgado, verdad?
Dijo, la rubia, observando una foto de Cyrus que Thelonius tenía en su celular. De hecho tenía varias fotos del chico, demasiadas, fotos del chico tanto con ropa como también sin ella.
También tenía videos, en su mayoría videos en los que Cyrus le practicaba una felación. Ella se excitaba cuando los veía. Los labios hinchados de Cyrus y sus mejillas rojas mientras intentaba contener alguna arcada, la ponían muy húmeda.—Está bien de peso—él controlaba aquel detalle constantemente debido a que su actividad sexual era muy activa. Él realmente lo cuidaba mucho, demasiado, de hecho se molestaba tanto cuando apareció con el más mínimo rasguño. Cyrus no debería ser tan descuidado.
—¿Este mes se hicieron los estudios?
Thelonius, acostumbraba a hacerse cada tanto los estudios de ETS para corroborar que todo estaba bien con él, claro que desde que se acostaba con Cyrus también hacía que este se los hiciera para mayor seguridad. Era una forma eficaz para saber además si Cyrus se acostaba con alguien más, porque sí él estaba sano, Cyrus también debía estarlo sino era así era porque lo estaba engañando, lo cierto era que desde que se dejó de acostarse con mujeres dejó de hacerse las pruebas porque sólo estaba con el chico de religión judía, entonces ya no tenía motivos para seguir haciéndose chequeos, en algún momento volvería a hacérselos, pero no por ahora.
—Ya no es tan necesario.
Amber le sonrió.
—¿Recuerdas cuándo lo conociste y fantaseaste con la idea de abusar sexualmente de él?
A Thelonius no le gustaba la idea de la violación en si, de hecho era algo que desaprobaba, pero cuando se trataba de Cyrus no lo veía mal, para nada. Era exquisita la idea de someterlo por completo.
—¿Aún te sigue excitando la idea?
—Sí.
Él no podía mentir.

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Muñeco de cristal
FanfictionPorque eso era Cyrus Goodman, un muñeco de cristal, con el cual a TJ le gustaba demasiado jugar...