Más que una semidiosa y bruja (S&B3)

Capítulo 10.

Capítulo 10. El dios mortal y los semidioses en una misión.

Apolo recitaba haikus sobre México. Todos terminaban en Y Apolo es genial.

Alex revisaba un mapa mientras intentaba hablar con el hombre que vendía tamales.

Andy intentaba silenciar al dios poniéndole caras malas.

—Perdona, futura esposa, ¿Acaso te ha dado estreñimiento?

—¡Por favor! ¿Es enserio?

—Perdón, si no quieres hablar de ello, te entiendo —Puso una mano en su pecho—. Ha de ser difícil.

Ella bufó y rodó los ojos para luego mirar a Alexander, quien le sonreía al hombre y asentía agradeciendo. Se volteo a ellos y para cualquier chica esa situación habría sido así...

Cuando corría, su camisa se levantaba un poco dejando ver un poco de abdomen, el viento le acariciaba el cabello casi rubio y sus ojos chispeaban. Era perfecto, era guapo... Era Alexander.

Según Andy era que Alex tenía un moco muy próximo a caer.

Llegó hasta ellos limpiándose la nariz y sin borrar su usual sonrisa de Soy un ser pacífico a la vista, pero ya verás si me molestas...

—Hay que ir en esa dirección —La señaló —. Para poder llegar al aeropuerto. Son... Varias cuadras. Seguro vamos a ver el aeropuerto cuando lleguemos.

—¿Ya nos vamos? —Se quejó Apolo—. Siquiera he ido a cantar con los mariachis. Qué mal.

—Apolo, demasiado estereotipo en cinco segundos —Le regañó Andy—. ¿Qué creías? ¿Que México era puro tamales, tacos y mariachis?

—Olvidaste los limoncitos —Murmura Alex mirando al cielo—. Los limones bebé.

—¡Exacto! —El dios sonríe y la luz refleja sus dientes—. ¿Me equivoco?

—Mejor vamos al aeropuerto, ahora.

(...)

Claro que el aeropuerto iba a ser fácil de ver, si tan solo no se hubiesen ido en dirección contraria.

Ahora perdieron su vuelo. Tenian que esperar hasta el otro día en la madrugada para abordar el más próximo.

Decidieron dormir en el aeropuerto. No iban a arriesgarse a perder otro vuelo.

Apolo se quejaba de que el piso era frío.

—Es muy duro...

—Es el piso, Apolo, el piso es duro en todas partes.

—Ya me duelen las nalgas. ¡No puedo!

La gente les miraba raro. Alguno masculló un Gringos.

Andrómeda saltó de su lugar, en posición de pelea.

—¡¿Quién dijo eso?! ¿Eh? No se que significa pero debe ser malo.

Un chico le miró y rió—. Pinche gringa loca, ¿Qué le pasa?

Alex tiró de ella hasta que se volvió a sentar.

—Debí tomar esas clases de español con Leo cuando Meredith me lo dijo.

—¿Meredith aprendió español? —Preguntan sorprendidos los chicos.

—Dije que tomó clases, no que aprendió de verdad —Rueda los ojos obvia—. Lo único que se decir es Hola. Por favor. Gracias. Leo es ardiente. Lo último no sé qué signifique, pero él decía que es más efectivo.

Alex fingió toser para que no le vean la sonrisa. Él, con lo poco que sabía de español, estaba seguro de que si Andrómeda se enteraba de qué significa, Leo estaría muerto.

—Oh, Leo es ardiente —Repitió Apolo acariciandose la barbilla—. Ajá.

Ni pregunten qué estaba planeando.

(...)

La chica era guapa, era latina. Sus amigos estaban dormidos y no le iban a molestar. No podía dejarla pasar sin más.

Apolo caminó como galán hacia ella, al final sacudió su cabello dorado y exclamó en voz sensual:

—Hola, Leo es ardiente.

La muchacha se quedó mirándolo con una sonrisa en los labios, y luego estalló en carcajadas. Apolo permaneció con su pose y una sonrisa que se volvía incómoda.

—¿Por qué los más guapos siempre son gays? —Se lamentó ella mientras se iba.

—¿Gay? —Él se exaltó —. ¡Pero si te estaba coqueteando, torpe! Las mexicanas son difíciles.

Alguien le dio una colleja que lo dejó medio atontado.

Andrómeda tenía las mejillas rojas y su mano temblaba, mantenía los ojos cerrados y una pequeña sonrisa falsa.

—No hagas tonterías, Apolo, no vinimos para eso.

—¡Futura esposa! Lo siento —Abrió los ojos como platos al verla.

—Por supuesto que lo vas a sentir —Susurró de forma lúgrube.

—¡Alex! —Chilló el dios—. ¡Alex! Andy quiere matarme.

Él permanecía con los ojos cerrados, peleando para no sonreír.

—¡Alex! —Fue el grito de dolor que se escuchó en casi todo el aeropuerto.

Hola!;)

¡2/3! ¡Ja! Si puedo.

Alex, que malote amigo lol

Y así, señoritas, señorito, fue como Apolo terminó castrado.

Ñaca ñaca :D

México, sho te conozco por tus limoncitos y los tacos que nunca probé xD por eso no dije nada más. Pero ya se que es muy hermoso, más no puedo detenerme a definir cada país como quisiera.

Les loveo con pasión.

Hasta pronto!;) |O sea, hoy, más tarde|