Capítulo 15. Andy es guapa... Creo.
Apolo tenía un moretón, un gran moretón en el ojo izquierdo. Lloriqueaba mientras bajaba por las escalerillas del avión.
—No puedo, no puedo —Decía.
—Te golpee la cara idiota, todavía puedes caminar.
Andy se puso unos lentes negros y un gorro. Alexander se dio aire con sus manos y le miró sorprendido.
—Hace calor... Y tú te pones gorro.
—No quiero broncearme ni nada —Cerro su chaqueta—. Odio los bronceados.
—Tu papá está bronceado —Dice Apolo.
—Tu existencia me es irrelevante —Mueve la mano—. No me molestes.
—Qué mala.
En el último escalón, Apolo se cayó.
—¡Papá! Ya odio esta vida mortal.
—Silencio, todos nos miran raro por tu culpa —Alex se quejó mientras lo ayudaba a levantarse—. Intenta ser normal.
—¿Normal? ¡Soy un dios! ¡Soy el dios más poderoso de todos! Controlo el sol, controlo...
—Controlas tu vejiga, oh cierto, eso tampoco —Andy le sujetó de una oreja—. Bajate de tu nube y camina.
Le soltó y comenzó a caminar a zancadas hacia donde había sombra.
Alex y Apolo se quedaron mirándola irse.
Pantalones enormes, zapatos desgastados, camiseta grande y para rematar la chaqueta de cuero negro. Tenía la pinta de una bravucona.
—Por el olimpo... Esa mujer es ardiente.
—Puaj Apolo.
—Y es mía —Le mira un tanto amenazante—. Mía, ¿Si? Yo la vi primero, yo la quise primero, es mía y sólo mía, no le mires, no le toques, no le hables.
A cada no, acercaba su rostro aún más al de Alex.
—Yo no...
—Me dirás que no es guapa —Entrecierra los ojos.
Ladeo la cabeza pensando...
—Meredith es la guapa, a mi parecer.
—¡Arrepientete, pecador!
Lo subió a uno de sus hombros y comenzó a correr como podía. Alex pesaba, sí que pesaba.
—¡Tu trasero gordo es demasiado!
—Al menos tengo trasero...
—¡Vas a lamentarlo!
Cayeron al suelo y comenzaron a forcejear como un par de niñas. Ni siquiera llegaban a niños, sino niñas. Niñas delicadas que temían...
—¡Me rompí una uña!
—¡Tiraste de mi cabello! Malo.
Alguien sorbió las últimas gotas de su jugo tras ellos, Andy lanzó su vaso sin mirar y éste terminó en el basurero. Negó con la cabeza.
—¡Qué par de nenitas! Ya me da vergüenza ir con ustedes.
—¿Vergüenza nosotros? ¡Tú te vistes como vagabundo!
Apolo abrió los ojos como platos y le tapó la boca a Alex.
—Él no quiso decir eso...
Los ojos de Andrómeda se encendieron tras las gafas, casi brillaban. Posiblemente las derretiría.
—Esperen aquí. Necesito orinar.
Se fue al baño mientras Alex tenía la cara más blanca que un papel. Apolo le dio palmaditas en la cabeza.
—Oh amigo, se te cumple el sueño... Vas a morir.
—Se me escapó sin querer.
Esperaron la muerte de Alex en silencio, con la cabeza gacha.
—¿Cómo crees que te mate? —Pregunto Apolo casualmente—. Yo estaría feliz con un simple estrangulamiento, tendría sus manos sobre mi todo el tiempo posible.
—Ya callate, Apolo, creo que ya viene.
La puerta del baño se abrió.
Una chica de piernas largas y blancas salió. Era alta, su cabello brillaba a la luz, llevaba falda y una camisa negra, sus labios eran rosados y gruesos.
Los chicos comenzaron a babear.
—Oh, tal vez Andy sale luego.
La chica lanzó ropa fea al basurero y ellos aguantaron la respiración.
—No es ella.
Caminó hacia ellos, balanceandose sobre sus tacos, se podía ver un tatuaje de una serpiente que subía por su muslo.
—No es.
Al fin llegó ante ellos.
—¿A que no soy guapa? Eh, aquí está tu vagabundo, Alex —Sonríe.
—Eres el ser más bello que mis ojos han visto —Balbucea Apolo tomandole las manos—. Me inspiras para hacer un haiku...
Hizo una mueca.
—Yo... Andy... Eres guapa... Creo.
Se soltó de Apolo y puso las manos en las caderas.
—Un creo es inaceptable. Ahora se mueven, par de idiotas.
Y se fue, ellos no podía dejar de ver ese tatuaje que subía...
—Yo quiero ver ese tatuaje —Murmura Apolo.
—Seguiría ese tatuaje hasta el fin... De... Todo.
Se miraron por un momento, hasta que el rubio explotó.
—¡ES MÍA!
—¡No jodas! Qué posesivo.
Holi!;)
Llego tarde porque... Porque ya que si xD
3/5
Hasta pronto!;)
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Más que una semidiosa y bruja (S&B3)
Fanfiction-Todos la necesitan a ella- Meredith desaparece y Andrómeda no puede con todo lo que está pasando. Aún así, en un estado deplorable, los dioses le dan una misión. Encontrar un arma mortal y recuperar a su hermana, a toda costa. Mientras Andy r...