Capítulo 25

6.4K 746 197
                                    

El Gran Comedor se encontraba completamente en silencio con todas las miradas puestas en el estrado. El tiempo había pasado con una tranquilidad preocupante para los alumnos, la graduación estaba cada día más cercana y deseaban que ese momento llegara, ese había sido uno de los años más difíciles. Habían pasado varios meses sin momentos importantes excepto el nacimiento del prematuro Cedric Diggory Black, un dulce bebé que mantenían hipnotizados a sus padres y a las parejas de estos. Se podría decir que la vida en el castillo había mejorado considerablemente.

-¿Qué quiere la bola de sebo esa ahora?- pregunto un malhumorado Malfoy- tengo sueño.

El rubio se encontraba recostado sobre su pareja en un intento de mantener los ojos abiertos, su embarazo le cansaba demasiado, provocando que buscará la atención de su compañero en todo momento.

-Seguro que es otro discurso sobre el amor y eso- contesto Bellatrix- estoy deseando que pierda el puesto de ministro.

-Tu y todos- secundo Rabastan.

Al contrario que el primer día, los alumnos se encontraban mezclados entre ellos en las mesas, con amenas conversaciones y respeto entre todos, en parte por miedo a que algún omega volviera a pedir ayuda a Snape.

-Queridos alumnos- comenzó el alfa sobre el estrado- vuestro tiempo aquí esta por terminar, por fin acabareis con esta etapa de vuestra vida y os convertiréis en increíbles trabajadores y dulces madres...

-Ojalá te caiga un rayo- susurro Peter al entender que acababa de decir que un omega solo servía de incubadora.

-El tiempo pasa rápido- continuo el ministro- y pronto todo se asentará. Por eso quiero ayudaros en este último empujón a vuestra vida adulta. Me he dado cuenta de mis fallos, en parte os he obligado a entablar lazos los unos a los otros, me he equivocado al buscar el amor por vosotros, por eso pienso solucionarlo.

Durante unos segundos el silencio reino en la sala, nadie se esperaba esa contestación por parte de ese alfa.

-Y que mejor forma de ayudaros que permitiéndoos ser libres de nuevo. Todos los omegas marcados pasarán por El Desligue y aquellos que tengan poco tiempo de embarazo serán sometidos a un aborto. Aquellos cuyos embarazos han llegado a termino o queda poco no os preocupéis, también habrá una solución para vosotros, vuestros hijos serán dados en adopción a familias que no han podido tener hijos y se realizará una adopción de sangre, así no tendréis ningún vínculo con esos niños.

El ministro termino su discurso con una fragante sonrisa y abandono el lugar ante a atónita mirada de unos alumnos incapaces de moverse o hablar. Varios minutos pasaron hasta que consiguieron reaccionar, la primera fue Rita que, aprovechando la ausencia de profesores se acercó al estrado y con su varita amplifico su voz.

-¿Hola?- preguntó tímida por primera vez consiguiendo que los demás volvieran en sí- ¿me escucháis bien?

Varias cabezas asintieron mientras que otros se dedicaban solo a mirar.

-Perfecto- continuó- se que esto no nos implica a la mayoría directamente, pero todos sabemos lo que significa. Ese hombre busca nuestra muerte, ya sea por El Desligue, por los abortos o quitándonos a nuestros bebés el sufrimiento de un omega es tal que no tardará mucho en morir de dolor. Nuestros compañeros necesitan ayuda.

Rita miró a sus silenciosos compañeros, Regulus y Arthur abrazaban fuertemente a sus bebés escondidos tras sus parejas, y los embarazados lloraban acariciando su barriga, muchos de ellos no permitían ni a su pareja acercarse, como en el caso de Lucius que se escondía entre los brazos de Bellatrix. La rubia descubrió que incluso Severus mantenía su cabeza baja acariciando disimuladamente su cuello, todos se encontraban vencidos.

-¿Qué quieres que hagamos?- pregunto Peter entre sollozos- no hemos conseguido evitar ninguno de los planes del ministro, ¿qué te hace pensar qué esto sí ?

La rubia dudo unos minutos sin saber que decir.

-Déjalo Rita- habló por primera vez Severus- ya no hay nada que hacer.

-¡No!- grito la rubia- solo tenemos que aguantar hasta las elecciones, entonces será destituido de su puesto...

-No lo será- interrumpió el pelinegro- lo primero que se realizarán serán Los Desligues ya que son los más fáciles y con menos secuelas de realizar, y mientras mayor sea el amor entre la pareja, antes perecerá el omega, no sobreviviré lo suficiente si mi marca desaparece y por lo tanto mi abuelo no cumplirá su parte del trato.

A su lado Sirius apretó los puños, Severus acababa de admitir ante todos que en su corazón albergaba amor por él, pero sabía que, si eso era cierto, antes de la graduación lo habría perdido.

-Ya no hay nada que hacer- finalizó el omega y salió del lugar.



El ministro cruzó las puertas abiertas por el malherido elfo con la cabeza en alto y una gran sonrisa.

-¿Por qué tan pronto?- preguntó un hombre de aspecto serio y elegante ropa.

El ministro miró a las parejas de las importantes casas allí reunidas, incluso su mujer se encontraba allí.

-Todos los omegas van a dar luz pronto y la segunda tanda no salió bien.

-Excepto por Malfoy- dijo su mujer con furia.

-Malfoy tendrá el bastardo de un hombre lobo- contesto- no creo que quieras ese problema encima.

La seria mujer asintió, al menos todavía quedaba el hijo de Digorry, según había escuchado era realmente adorable.

El ministro sonrió más ampliamente, durante años las parejas allí reunidas habían buscado hijos sin éxito, cansados había recurrido a este peligroso plan, adoptar un niño no les convenía, todos los orfanatos tenían niños lo suficientemente mayores para recordar a sus anteriores padres, ellos querían que sus hijos fueran completamente suyos, sin terceros que les influenciaran.

-Hay suficientes niños para elegir- dijo- incluso podremos tener 2 si ese es el caso.

-¿Y los que no sean elegidos?- pregunto otra mujer con prominente nariz.

-Lo que les pase ya no será de nuestra incumbencia.

Tras ellos el serio elfo les miraba con odio, su amo era un verdadero monstruo. 

Alfas VS Omegas (Harry Potter)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora