Regalo

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Capítulo dedicado a todas las personas que esperaban por esta pareja :)

Diego POV

Las azafatas revisaban fila por fila en el avión asegurándose de que todo estuviera en su lugar, los cargadores terminaban de cerrar las puertas con el equipaje dentro y el foco para abrocharse el cinturón tintineaba frente a mis ojos, todo estaba listo para regresar a San Francisco, debería sentirme tranquilo ahora que no corría peligro de encontrármelo en cada esquina de la ciudad, pero irremediablemente mi estúpido omega siempre me provocaba un hueco en el estómago ante esa perspectiva.

Suspiré agitando la cabeza, negándome a pensar más en él, mientras nos mantuviéramos alejados todo estaría bien, mi omega lo olvidaría en unas semanas y su aroma ya no me perseguiría hasta en mis sueños.

El vuelo fue tranquilo, por suerte no hubo turbulencias por las ventiscas de la temporada y pudimos aterrizar de inmediato, Nikolas me recibió como si lleváramos años sin vernos con un cartel de bienvenida y juntos llevamos mis maletas hasta su auto.

Llevábamos apenas un semestre siendo compañeros, él era mayor que yo por un año y era de los pocos que había decidido quedarse en las residencias para estudiantes durante su segundo año, su familia vivía a las afueras de la ciudad, estudiaba comunicación y tenía un enamoramiento casi enfermizo con Eduardo, el único rostro familiar que encontré al llegar a la Universidad.

Ellos se habían conocido en el recorrido de inducción, Niko había caído rendido por los ojos verdes de Lalo, pero terminó con el corazón roto esa misma noche cuando descubrió que tenía novia, dos años después él seguía creyendo que eran destinados y Lalo seguía con su relación. A veces sentía que era mi culpa que no pudiera superarlo, ya que los primeros meses de mi primer semestre me pegué a Lalo en cada fiesta de fraternidad donde nos encontrábamos, por miedo a los alfas de mayor edad y nos volvimos amigos cercanos de nuevo. Con Niko siendo mi compañero y Lalo siendo uno de mis mejores amigos, inevitablemente terminamos saliendo juntos más de una vez.

Él decía que no le importaba, que disfrutaba verlo de lejos mientras esperaba a que se diera cuenta que estaban destinados a estar juntos y Lalo fingía que Niko no daba vueltas a su alrededor cada que nos reuníamos, su relación me recordaba un poco a Emilio y Joaquín en la preparatoria, excepto claro que Nikolas no era ni la mitad de fiel de lo que era Joaquín aun sin ser pareja de Eduardo.

Cuando Lalo nos dejaba para reunirse con su novia, él hacía lo mismo buscando a alguien para divertirse por unos días, mientras yo terminaba hablando por mensaje con Azul o Joaquín, era más fácil ponernos al día cada cierto tiempo, que calmar la rabia de mi omega cada que intentaba entablar una conversación con un alfa. El único que parecía agradarle era Louis, el joven estudiante de medicina que solía invitarme a salir cada que tenía oportunidad.

El mismo al que aun no le respondía el mensaje de Navidad.

Después de que Andrés me interrumpió en mitad de la acera, olvide que estaba haciendo y a la mañana siguiente la confianza con que había escrito una respuesta se había evaporado, dejándome con ese maldito hueco que su aroma provocaba.

Ahora había pasado demasiado tiempo y temía que se sintiera forzada una felicitación al final de la temporada.

― ¿Cómo te fue con tus amigos? ―exclamó Niko mientras salíamos del aeropuerto rumbo a la autopista que nos llevaría a la Universidad.

―Bien, pude ponerme al día con todos y la cena fue mejor de lo que esperaba. ―musité encogiéndome de hombros, había disfrutado regresar a casa, por unos días se sintió como si nunca nos hubiéramos separado por todo el país y siguiéramos siendo el grupo de adolescentes que iban juntos a la feria.

Eras túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora