Capítulo 18; The hearts wants what it want.

535 14 0
                                    

Parpadeo repetidas veces antes de abrir los ojos completamente. Siento un peso sobre mi cuerpo que hace que tenga demasiado calor a pesar de que está comenzando hacer un poco de frio. Acaricio el brazo que rodea mi cintura e intento girarme hacia el otro lado sin tener que desenredar mis piernas de las de él. Seguimos completamente desnudos, y el roce de su piel con la mía, a primera hora de la mañana, hace que un escalofrío me recorra toda mi espina dorsal. Sonrío al instante cuando consigo por fin colocarme en frente de Niall. Tiene los ojos completamente abiertos, como si no hubiese dormido en toda la noche con tal de observarme. Mi mirada baja hasta sus labios, bastante rosados se encuentran esta mañana. Tan tentadores a besarlos. Niall se acerca, teniendo su boca a centímetros de mi. Tengo ganas de besarle pero no sé por qué pienso que tengo que pedirle permiso. Irónico cuando acabamos de pasar una noche realmente apasionada. Él toma la iniciativa, acercándose tanto a mis labios para conseguir besarlos por fin. Su mano izquierda acaricia mi mejilla. Se incorpora sin dejar de besarme, haciendo que mi cabeza se levante ligeramente de la almohada, colocándose encima de mí, como anoche, sin aplastarme del todo. Me está volviendo loca ya que estando aun desnudos y en estas condiciones, hacen que mi cabeza trabaje deprisa y mis hormonas se revolucionen. Me está viniendo un calentón tremendo y no quiero que pare. Niall deja mis labios. Suspiro. Casi jadeo. Oh, Niall, ¿cómo de rápido me has atrapado? Sus labios pasan por mi cuello, succionando ahí. Gimo. Su mano derecha baja hasta mi cintura, y me acaricia, pasando por mi espalda baja. Me levanta ligeramente del colchón, apretándome contra él, sintiéndole. Oh. Gimo cerrando los ojos. Cuando los abro veo su sonrisa satisfactoria. Disfruta viéndome en este estado. Me incorporo, dejándolo confundido y giro, quedándome yo encima de él, empujándolo contra el colchón. No hemos mencionado ninguna palabra, pero esto vale más que mil de ellas. Me abalanzo sobre él, devorándole los labios. Me separo unos centímetros y le miro a los ojos. Nos quedamos unos minutos en esa posición. Tiene el ceño fruncido, preguntándose cuál será mi siguiente paso. Y siento que estoy completamente segura de mis acciones, tanto que bajo hasta su polla, dándole pequeños besos en el camino. Levanto la cabeza, mirando su expresión. Tan sorprendido, confuso, y ardiente. Sus ojos arden de placer. Agacho la cabeza y le beso ahí, justo ahí.

-April, necesito que me de… OH DIOS MÍO, LO SIENTO, LO SIENTO. –Sophie entra en mi habitación, irrumpiendo. Justo en ese momento. Ese maldito momento. Dios que vergüenza.

-Oh, madre mía. –Digo en español.

Me bajo de encima de Niall y bajo de la cama, cogiendo la primera camiseta que veo, la suya y mis bragas.

-Vístete. –Le digo cuando veo que se ha quedado en shock.

Hace lo que le digo y yo salgo de la habitación. Mi hermana no se encuentra fuera de esta así que voy a su habitación y la veo sentada en su cama, con las manos en su cara. Tapándose.

-Ni una palabra a mamá. –Le digo.

-Lo siento, lo siento, de verdad, si lo hubiese sabido no… -La interrumpo.

-¿Para qué está la puerta? Para llamar antes de entrar, ¿no? ¡Sino no tendríamos puertas! –Grito. -¿Por qué para qué tenerlas si vas a pasar sin decir nada? Joder, Sophie, que vergüenza.

-Yo también estoy avergonzada. –Sus manos siguen en su cara.

Me acerco a ella, sentándome a su lado y le aparto sus manos, dejándolas caer en su regazo.

-No le dirás nada a mamá, ¿no?

-No, por supuesto que no. Dios, ni siquiera sabría cómo empezar. -¿Por qué está nerviosa? Ella no estaba en mi situación.

Ríe y quedo totalmente confundida.

-Es que… -Intenta hablar tras su larga carcajada. –No puedo creer que tú estuvieras…-La vuelvo a interrumpir.

Déjate llevar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora