Sé que debería de estar pasándomelo bien el último día en el que Niall está a mi lado, pero es que no tengo el ánimo para eso, por mucho que quiera, no puedo. Estoy sentada en el sofá, a mi lado esta Louis, riéndose de cómo su novia se pelea con Niall porque va perdiendo jugando al tenis en la Wii. Yo tengo un trozo de pizza, aun no lo he acabado y llevo más de quince minutos con él en la mano. Me han dejado tres trozos mas, con la intención de que comiera, pero es que no tengo apetito ni para mi comida favorita. Veo como Becky deja el mando indignada y se sienta en medio de Louis y de mi. Louis se levanta y releva a su novia. Ella se acerca más a mí.
-¿Estás bien? –Pregunta segura, con firmeza. Como si me estuviera diciendo que le contara aquí y ahora el por qué estoy en esas condiciones.
No sé qué responderla, pero decido por mentirla.
-No me mientas. –Habla cuando yo había abierto la boca para responder, cosa que me hace volver a cerrarla.
-Estoy… ¿cómo quieres que este, Becky? –Suspiro.
-Pues feliz, riendo y pasando una tarde realmente buena con tus amigos, y tu novio. –Se señala a si misma y a los chicos, los cuales ríen como tontos.
-¿Así de fácil? –Frunzo el ceño.
-Así de fácil. –Responde.
-¿Y mañana qué? ¿Me levanto a las siete de la mañana para ir al instituto, volviendo a la rutina, como si no hubiera pasado nada? ¿Sin Niall? –Susurro temiendo que Niall nos escuchara aun sabiendo que no podría entenderlo todo.
-Mañana te levantas a las siete de la mañana, te miras al espejo y te sonríes, te diriges al instituto con el maravilloso recuerdo del gran fin de semana que has pasado con Niall y teniendo en mente que lo vas a ver muy pronto, ¿entendido? Porque no puedes estar amargada, no así. Él ya te ha demostrado lo mucho que quiere verte y que haría todo lo posible para venir cada fin de semana pero es un hecho que no puede cumplirse. Sois, somos adolescentes, no podemos hacer todo lo que quisiéramos hacer porque no. Pero no hagas de todo esto un mundo porque os queréis, y esto puede funcionar solo si estáis dispuestos. –Coge una bocanada de aire y lo espira. –Porque yo no creo en eso de que las relaciones a distancia no existen. Si que existen, maldita sea. Pueden existir, otra cosa es que la pareja quiera seguir. Lo de la distancia lo veo como una excusa. Y se acabo. Ahora levanta el culo del sillón y ponte a jugar con tu novio, hazme el favor.
Y sé que tiene razón pero no he querido verlo de ese modo. Siempre soy así, me hundo en la mierda. Pienso en la negatividad absoluta y soy terca. Nadie puede hacerme cambiar de opinión. Menos Becky.
-Te quiero, ¿lo sabías? –La abrazo con fuerza y me devuelve el abrazo con mas intensidad.
-Yo también te quiero, April.
La sonrío, me levanto del sofá y le arrebato el mando a Louis. Este me sonríe pero se hace el ofendido. Se va a sentar con Becky y empiezo a jugar con Niall. Louis iba perdiendo y rio interiormente. Al final Niall me gana, evidentemente ya que con el marcador que me ha dejado Louis era imposible. Dejo el mando encima de la mesa y me abalanzo sobre Niall, besándolo.
-Uoh. –Suspira. -¿A qué viene esto? –Paso mis brazos alrededor de su cuello y sonrío.
-A que te quiero muchísimo. –Le vuelvo a besar.
Llevamos prácticamente casi toda la tarde jugando a la Wii. Menos ahora, que decidimos ver una película y estamos viendo 50 sombras de Grey. Las chuches y la bebida las había traído Becky y bueno, yo hice palomitas. La película, claramente, la elegimos nosotras, y al principio ellos se negaban rotundamente, ya que ese tipo de películas no la querían ver, al menos no hoy. Pero al final les está gustando mucho, porque no veo ningún signo de aburrimiento en sus caras. Tengo que reconocer que, ahora que estamos viendo una escena sexual, no ha sido buena idea verla todos juntos, ya que, joder, me estoy poniendo caliente y lo único que quiero ahora es tener un poco de privacidad con Niall.
Son las ocho de la tarde y Niall tiene el vuelo a las doce. Cogió el vuelo mas tarde para pasar el mayor tiempo posible conmigo y se lo agradezco enormemente.
La película acaba de terminar y Becky y Louis se levantan del sofá.
-Bueno, parejita, nosotros nos vamos. –Becky recoge sus cosas y Niall y yo nos levantamos para despedirlos en la puerta. –Encantada de conocerte, Niall. –Se acerca a él y le da dos besos.
Louis se choca la mano con Niall y se dan un suave abrazo. Típico de machos. Yo abrazo a Louis y me dirijo a Becky.
-Mañana te paso recoger. –Dice mientras me abraza. –Espero que estés bien cuando se vaya. –Susurra en mi oído. –Sino lo estas, llámame y vengo.
Yo asiento y le doy un beso en la mejilla. Abro la puerta y ellos salen. Vuelvo abrazarla y se suben al coche de Louis. Cierro la puerta cuando arrancan y desaparecen de mi vista.
-Son muy divertidos. –Anuncia Niall, abrazándome por la espalda.
Giro y le beso. Él prolonga el beso dándome a entender que no quiere acabarlo todavía, que no quiere irse aun. Me separo de él y respiro. Vuelvo a chocar mis labios con los suyos.
-Tengo ganas de hacer el amor. –Susurro en sus labios.
Él vuelve a besarme, dándome a entender que él también.
Las despedidas son lo peor del mundo, mas pensando que no sabes cuando volverás a ver a esa persona. Bueno, pues yo me encuentro en una y juro que es la peor sensación. Despedirme de Niall.
Me está abrazando, sus brazos rodeándome la cintura, los míos su cuello. Sintiendo, por última vez en equis tiempo, su perfume. Embriagándome. No quiero que esto se acabe. Pero la última llamada al vuelo con destino a Londres, en el cual Niall viaja, jode todos mis planes.
Nos separamos lentamente y le beso. Un simple beso. Tan rápido y corto pero tan intenso a la vez. Diciendo todo y a la vez nada.
-See you soon, babe. –Susurra en mis labios, y se separa completamente de mi.
Dejándome sola.
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Este capítulo tiene un chiste personal.
Simplemente comento.
