Desde otra perspectiva

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Lila Hargreeves mejor conocida como número 7 bajaba tranquilamente por la mansión, Reginald se habido hace dos días a una conferencia en Suiza y ahora estaban solos, incluso se había llevado a ese simio Pogo con el lo que en su perspectiva era extraño, Pogo jamás salia de la mansión, pero gracias a eso ahora tenían la casa libre para hacer lo que desearan.... Y lo que ella deseaba era matar a sus hermanos, los muy desgraciados otra vez habían salido de patrullaje solos y habían vuelto a hacer de las suyas, esta bien que ahora que estaban solos buscaban hacer cualquier cosa que los hiciera quedar como héroes seria lo mejor... Pero Lila no consideraba que provocar asaltos, incendios o accidentes de trafico para luego jugar a ser héroes fuera la mejor opción.

- Oye copia, que haces tan solita.

- Buenos días a ti también Angela.

Angela también conocida como número 5 era una joven de tes aperlada cabello castaño que caía en suaves ondas y profundos ojos cafés, era hermosa y ella sacaba provecho de esa situación para cualquier cosa.

- No respondiste Copia ¿No te dijimos que no saliera de tu habitación?

- Eso no es asunto tuyo Angela, además yo puedo ir a donde se me de la gana.

- Te atreviste a contestar me!!!- Lila ya veía venir lo que ella haría cuando noto que sacaba su cuchillo, muy bien si a esas iban, Angela estaba por cortarse cuando una voz de hombre la detuvo.

- Angela basta.

Ambas miraron al otro lado de las escaleras donde Alejandro estaba apoyado y mirando sin interés, rápidamente Angela guardo el cuchillo y le dio un puchero al otro.

- Pero Aleeeee, la copia me estaba molestandoooo!!!

- No te rebajes a su nivel princesa mejor vámonos... No debes estar con ordinarios.

Lila miro como ambos se alejaban de ella y como Angela le daba una mirada de superioridad mientras se iban, como la odiaba, desde que tenía memoria todos sus hermanos la trataban mal solo porque su poder era el copiar otros, era genial la verdad pero lo malo era que solo podía copiar un poder a la vez.

- Estúpida perra berrinchuda!!

- No deberías hablar así de ella Lila.

Se giro para ver a Carla salir de la biblioteca cargando diversos libros en sus brazos.

- Es que... Ella... Dios es como una niña mimada y berrinchuda!!!

- Que esperabas de la favorita de Hargreeves.

A si, desde que llegaron Hargreeves les había dado un numero a cada uno y los denominaba del más fuerte al más débil, el favorito era Christopher seguido de las pesadillas andantes Angela y Jessica, esas dos sabían como conseguir lo que querían después iba Alejandro, Carla y Fermín y para sorpresa de ella a pesar de ser la Núm. 7 Hargreeves la consideraba débil gracias a que solo podía tener un poder a la vez y por consecuencia era la hija menos querida y el resto se aprovechaba de eso... Exceptuando a Carla, que era imparcial en todo lo que ocurría.

-  Nunca has querido callarle la boca?

- No, yo si respeto mi vida.

- Vamos Carla, eres lo opuesto a ella, seguro que le ganarías.

- ¿Se te olvida que ella tiene en sus manos a Jessica y a Alejandro? Christopher sera el líder pero ella maneja toda la situación por aquí.

- Bueno podríamos tener a Fermín de nuestro lado.

Carla miro a Lila sin expresión.

- ¿Y quien dice que yo estoy de tu lado?

- Yo lo digo.

- Lila...

- Vamos Carla, ¿no estas cansada de quedar a la sombra de ellos? ¿Sabes lo que están haciendo para aumentar su fama?¿Crees que es justo?

Carla miro a su hermana un momento, la verdad es que ella siendo una persona en busca de paz detestaba toda la violencia que sus hermanos desataban con tal de destacar, y Hargreeves no era de ayuda, era igual de codicioso que ellos.

- Supongo que... Estaré de tu lado.

- Perfecto! En ese caso vayamos por unas donas.

- Que... Pero...

- Vamos Carla, por esta noche seamos ordinarias!!.

Mientras ellas salían de la mansión unas sombras las veían detrás de la ventana.

Alejandro y Angela se encontraban abrazados mirando como ellas se iban alejando cuando un gato atigrado apareció de la nada, Angela lo miro interrogante.

- ¿Y bien? ¿Dijeron algo?

El gato fue transformándose poco a poco en una joven de cabellos cortos cara redonda y ojos grandes y brillantes, negó con la cabeza y se acerco a los otros.

- Solo Lila y sus disparates de ser mejor que tú Angie, nada del otro mundo.

Ella asintió y se volvió a su pareja.

- Entonces eso confirma que Lila no sabe nada del archivo de esa mujer.

- No lo descartaremos aún, Lila es una gran espía y podría descubrir todo en cualquier momento, hasta entonces seguiremos como si nada.

- ¿No deberíamos hablar con ella? Después de todo necesitamos a todos para llevar acabo el plan.

- No Jessica, Lila no es precisamente la favorita de Hargreeves así que podemos usarla de chivo expiatorio.

Jessica se movió incomoda, no le gustaba hacerle eso a Lila pero no podía oponerse tampoco, no si no quería problemas con Christopher, Angela noto la duda en su amiga y sonrió.

- Tranquila nena, no dejaremos que algo le pase a tu queridísima Lila, te lo aseguro.

Y así los tres se dirigieron con el resto para revisar el plan, aun tenían el maletín escondido y debían empezar a entrenar con él, ¡Oh como se iban a divertir!.

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La historia que no fueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora