Mi Querido Levi-san || [Ereri] 🕊️

Cap.5: Celo de Alfa.

Estaba sentado en el sofá, insultándome a mí mismo, esperando que Levi-san no despertara hasta mañana, me sentía la peor persona del mundo, egoísta por tomarlo, bueno, la verdad, no sé qué mierda paso, pero esa es la idea más probable.

No sé qué hora era, tal vez la de almuerzo, estuve toda la mañana ordenando, ni un solo vidrio o papel en el suelo, todo estaba como si no hubiera pasado nada a excepción de las cosas remodeladas como floreros, vasos, tazas y cuencos.

El momento más nervioso que tuve en mi vida, fue cuando le di un baño, porque tenía que hacerlo, me sentía culpable de lo demacrado y sudado que estaba, sabía que odiaba estar sucio.

Y mientras reparaba la cama y ordenaba su habitación, lo deje dormir en la mía.

Sigo preguntándome lo mismo todo el tiempo: ¿Tuvimos sexo?

Me repetía esa pregunta en la cabeza, rogaba para que estuviera bien y no me matara, aunque no me importaba si fuera el quien me asesinara.

Sin notarlo me dormí en un sofá.

***

Desperté, en unas pocas horas estaría en total oscuridad, corriendo fui a mi habitación, Heichou seguía dormido.

Al acercarme, note que tenía unas ojeras enormes, por lo menos había puesto ungüento a sus moretones y marcas, esperando que fuera suficiente para que su cuerpo estuviera sano.

Me siento horrible... yo le hice esto.

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Narro yo

Narra Eren y/o Levi

Eren esperaba que le tetera hirviera para prepararse un café, paso su mano por su cabello hasta llegar al cuello y suspirar, solo le quedaba esperar a que Levi despertara, y aclarar las cosas.

—Eren—.

Sintió como la piel se le erizaba al sentir unas manos enrollarse por su abdomen y un cuerpo pegarse al suyo por detrás.

Eren se giró sorprendido, y miro detenidamente al de cabello azabache.

Levi también se sorprendió por el movimiento brusco, pero no le dio importancia porque volvió a los brazos del menor con un cálido abrazo.

Los pensamientos de Eren se nublaron, Levi a vista de Eren era muy hermoso, desde sus largas pestañas y cabello negro azabache, hasta su piel pálida, fino rostro y cuerpo, y sin notarlo, el moreno correspondió el abrazo y entrelazando sus dedos en los cabellos de Levi.

Que está pasando justo ahora, se dijo a si mismo Eren.

Cuando estaba a punto de separarse, observó que el pelinegro lo miraba con unos ojos que jamás había visto, le hizo sonrojarse, como si el azabache estuviese feliz de sentir las caricias Eren, como si fuera la persona más especial de su vida, además de que estaba sonriéndole.

—Levi... san...— quedo hipnotizado y asustado.

No sabía cómo iba a reaccionar Levi con el acontecimiento que se temía que había hecho.

Levi se separó un poco del moreno para mirar detalladamente su cuerpo, se preguntaba si de verdad era real, era jodidamente alto, esbelto, masculino y con su abdomen bien marcado, además de su término en v allí abajo, daban ganas de solo quitar sus pantalones.