Mi Querido Levi-san || [Ereri] 🕊️

Cap.8: Perdida.

Los jóvenes estaban besuqueándose, tal vez con demasiado entusiasmo, sobre todo por parte del moreno.

—D-Duele...— se quejó al sentir las manos que le sostenían la cintura hacer mucha presión en esta.

—Lo lamento— se detuvo al instante, tal vez demasiado exagerado.

Levi suspiro, no sabía que hacer o que decisión tomar.

—Eres un idiota Eren... un jodido... imbécil...— recibía los pequeños besos que recorrían su cuello.

—Lo se.... puede repetírmelo cuantas veces haga falta—.

Levi rodo sus ojos, aunque se lo repitiera todas las veces del mundo no sería suficiente.

—Idiota... mocoso de mierda...— murmuro incoherencias, sentía como sus moretones eran besados, se veía doloroso y se sentía doloroso, hundió sus dedos en los brazos de Eren por cada beso.

—Lo lamento...— hundió su cara en el cuello de Levi y dio un largo suspiro —Te dañe demasiado, no merezco tu perdón—.

Levi tenía un aroma dulce, acogedor y al castaño le daban ganas de llorar, nunca pensó estar en una situación así, le había hecho mucho daño a la única persona que tenía, a la única persona que... amaba.

—He estado peor, me han hecho mucho más daño que esto...—.

—¡Pero yo no! — grito Eren enfadado consigo mismo.

Levi sintió el abrazo mucho las apretado.

—Yo nunca te había hecho daño.... no quería hacerlo, herí tus sentimientos y tu cuerpo—.

Levi entrelazo sus dedos por la melena castaña de Eren y así comenzando a acariciarla, a pesar de todo amaba a ese chico moreno y estúpido, no quería perderlo.

—Cálmate...— Eren asintió — Calma... estoy bien— sonrió Levi.

Bien... Bien molido, maldita sea, mi vientre duele y mi culo arde... maldito pene titán.

Quiero perdonarlo... quiero hacerlo...

***

2 semanas después

Me he esforzado mucho en recuperar la confianza de Levi-san, también me esfuerzo por recuperar los recuerdos que perdí por estar borracho.

Levi-san intenta abrirse ante mí, pero algo le frena... tal vez porque se siente ridículo, ya que el hombre a quien se entregó, aun no aparecía.

Pero... seguía siendo yo, Eren Jaeger... estoy deseoso de recordar y ser el hombre que se merece.

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—¿Se siente bien, Levi-san? — pregunto el moreno.

—Si vas... a estar preguntando eso... cad..cada... en.... ¡Ya cállate! — le grito, ya que se sentía tan bien que las palabras se le revolvían.

—Bien, bien...— hundió un poco más sus dedos en la piel de Levi, esparciendo el aceite sobre toda su espalda con movimientos suaves y precisos.

Levi-san se ha recuperado, pero sus dolores musculares siguen presentes en ocasiones, yo hice esto... le hice todo esto... tanto daño.