𝘁𝘂́ 𝗰𝘂𝗹𝗽𝗮. (𝖼𝗁𝗋𝗂𝗌 𝖾𝗏𝖺𝗇𝗌 𝗒 𝗍𝗎)

capítulo siete: el plan.

unos cinco días pasaron desde la última vez qué vi a Chris fuera del trabajo. hablamos un poco y intentamos contarnos cosas para conocernos mejor.

la verdad él era algo reservado, yo fui la que habló más de mi, el solo parecía prestar atención a todo lo que decía y preguntar más, creo que también lo hacía para que no preguntara mucho sobre él, aunque por poco lo consiguió, le dije que quería saber de él y me contó muy pocas cosas.
también dijo que quería hablar conmigo de algo importante, así que me esperaba hoy en su despacho de trabajo.

— ¿cómo estás con tu enamorado? — scar habló, tomando un sorbo de su taza de café.

era la hora de un break así que aproveché para ir a hablar un poco con scar.

— estuvimos hablando un poco, la verdad me dejó hablar más a mi y él solo parecía escuchar — rodé los ojos y tomé un sorbo de mi café.

— chris es difícil de entender, pero tranquila en algún momento lo conocerás bien — hice una mueca — oye.... — la miré y moví un poco mi cabeza — ¿le contaste a sebastian de esto? — negué levemente, y sentí unas manos en mis hombros.

— ¿me tienes que contar algo, ______? — la voz de seb se hizo presente detrás de mi, estire mi cabeza hacia atrás, viéndolo desde abajo, acción que hizo que soltara una pequeña carcajada — soy todo oídos.

estaba por abrir mi boca pero la voz femenina de agatha llamó mi atención, ella se encontraba en la puerta, con un movimiento de cabeza me hizo entender que algo pasaba.
suspiré y tomé lo restante de mi café, me levanté y toqué el hombro de sebastian.

— será para la próxima — sonreí y di una palmadita en su hombro, caminando y siguiendo a agatha por los pasillos.

una vez que ella me dejó en la puerta de Chris, yo golpeé suavemente, escuchando su voz diciéndome que pasé.
eso hice y lo vi, firmando unos papeles sobre su escritorio. me miró y me dio una pequeña sonrisa, apuntando con la mano la silla enfrente de él, asentí y me senté, mirándolo.

— me mandó a llamar, ¿necesitaba algo? — crucé mis piernas y coloqué las palmas de mis manos en mi rodilla, esperando a que el hable.

— sí, la necesito — firmó por última hoja y las hizo a un lado, golpeando nerviosamente la punta de la lapicera contra la mesa, lo miré confundida. — la necesito más que nunca, señorita Wells.

mordí mi mejilla por dentro, esperando impaciente que hablé, al ver eso el suspirando siguió hablando.

— mi hermana le contó sobre ti a mis padres — al decir eso, mi corazón comenzó a latir rápidamente, mis manos comenzaron a sudar una vez de escuchar sus próximas palabras — ¿tienes vestidos formales? hoy nos invitaron a cenar.

— ♡ —

— ¡nos invitaron a cenar, scar! — la miré, nerviosa rebuscando en mi armario un vestido "perfecto" para esta ocasión.

— ______, cálmate — ella suspiro y se levantó de mi cama. — ¿por qué no usas uno los vestidos que te trajo, Chris?

— eso — dice él fuera de mi habitación. — te quedarían perfectos.

— ¡chris, fuera! — lancé una almohada a la puerta haciendo un ruido y el solo gruño detrás de esta.

suspiré y miré unos dos vestidos tendidos en mi cama, uno era color vino; tenía un escote en forma de v que llegaría hasta un poco más abajo de mis pechos, era largo hasta dos tres dedos arriba de la rodilla y la parte de abajo del vestido tenía detalles de tela qué formaban unas flores rojas con pequeñas partículas de brillos.
él otro era color negro, era sencillo; me ajustaría al cuerpo perfectamente. los únicos detalles que persivi fueron los brillos negros que apenas se notaban en todo el vestido y el brolado del mismo color que iría de hombro a hombro, dejándolos un poco descubiertos.

— ¿cuál te gusta más? — miré a mi amiga, la cuál sonreía al darse cuenta de que me decidí por usar uno de los vestidos. ella los miró y apuntó al segundo vestido; el negro.

asentí leve y lo agarré, me metí a la ducha pegandome un baño rápido, luego de que salí me séqué, colocándome el vestido y secando mi pelo, para luego peinarlo y planchar lo.
me maquille, con un brillo labial para los labios, un poco de rímel para las pestañas y un poco de rubor.

me miré al espejo, suspirando y pensando en todo lo que pasará esta noche. me preparé mentalmente y salí del baño, abriendo la puerta de mi habitación para luego encontrarme con scar y chris en el sofá, mirando el televisor.

carraspeo para llamar su atención y los dos me miran, puedo ver cómo scar sonríe mirándome de arriba a abajo y chris hace lo mismo, solo que su mirada parece recorrer mi cuerpo de otra forma.

— solo faltan mis zapatos y ya estaríamos — chris asiente y entro de nuevo a mi habitación, poniéndome unos zapatos de tacón aguja, negros, para que combinarán.

salgo con una pequeña cartera dónde guardé mi celular y un poco de dinero, por si las dudas.

Chris se levantó del sofá, alisando un poco su traje y estiro su mano hacia mi.

— es hora de irnos, señorita wells — reí leve y agarré su mano, miré a scar y me despedí.

ella se quedaría en mi casa hoy, así que le dejé la copia de las llaves y bajamos al último piso por el ascensor.
una vez fuera, subimos a su auto y el me miró.

— bien, tenemos que tener un plan — lo miré, confundida — también un par de reglas.

— mierda, Evans — me miró frunciendo el ceño levemente — siempre quieres tener todo bajo tu control, ¿no?

— no me gusta no estar preparado antes, _______.

suspiré y asentí, diciéndole que prosiga.

— cómo sabrás mi empresa es muy conocida, al cabo de que la prensa se entere empezarán a sacar rumores y toda clase de cosas, ya no vivirás normal, ______.

— entiendo.

— si la prensa llega a vernos juntos, tenemos que empezar a actuar cómo una pareja enamorada. con esto quiero llegar a un trato — mirándolo un poco confundida, el suspiro — debemos poner reglas entre nosotros, ______.

aún confusa él me explico, me dijo que no haría nada de lo que no quisiera. pero necesitaba queantengamos un contacto en público, cómo roces, toques y hasta besos.
no pude contestar, en ese momento era mucho para asimilar, pero el me dijo que me daría tiempo de pensarlo.
con eso ya dicho, comenzamos rumbo a la casa de sus padres, los cuáles ya para mi serían mis "suegros".