enfermedad

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Odio despertar más enfermo que de costumbre, me duelen los huesos, sudo como si hubiese salido de bañarme hace dos segundos, tengo escalofríos, fiebre, pero lo que más me duele es la cabeza. 

Cuando apenas iniciaba el VIH mi pierna temblaba mucho y lo que hacía Anne era amarrármela a un palo para que se quedara quieta, suena gracioso pero eso provocaba esta horrible enfermedad. 

Después de que ese sujeto me dejara en la cama sangrando y en Shock me vestí y me fui a mi casa, no le creí, no lo hice ya que nadie se imagina que puede llegar a pasar por este tipo de situaciones.

Los meses siguientes me sentía normal, no había cambios, hasta que acompañé a Anne al centro comercial hacer unas compras y me desmayé, no sé cómo llegué al hospital pero lo que recuerdo fue al doctor llevando a mamá al pasillo y luego verla ingresar con los ojos hinchados por tanto llorar. 

Cuando los dolores de cabeza se intensificaban en el pasado lo que me servía para aliviar el dolor era fumar marihuana, ni siquiera la medicina podía lograr eso.

Llegué a ser adicto a esta dando como consecuencia la peor golpiza de mi vida por deberle dinero al sujeto que me la vendía, pero no quería dejarla hasta el día en que vi a mi hermano Edward con esta en sus manos, me dijo que la había encontrado bajo mi cama y preguntó que era. Dicen que los hermanos pequeños siguen el ejemplo de los hermanos mayores y odiaba pensar que mis hermanos podrían seguir mis pasos.

Al inicio fue duro dejarlo pero después con ayuda de mi familia logré hacerlo. 

Intenté suicidarme 3 veces. 

La primera fue una semana después de salir del hospital, fui a caminar de noche y me quedé parado en medio de un puente peatonal, veía los autos pasar bajo mis pies y escuchaba una voz en mi cabeza que me decía que debía saltar, pero entonces pensé en mis hermanos sufriendo y me alejé rápidamente de allí. 

La segunda fue 3 meses después, veía a mis "amigos" en fiestas y luciendo felices en fotos y videos en las redes sociales, mientras yo sentía que moría dentro de las cuatro paredes de mi habitación, no volví a la universidad y nunca nadie se preocupó por mí a excepción de Liam, me corté los brazos y estuve a punto de morir desangrado si no hubiese sido por mamá que llegó a tiempo. 

Me internaron en un centro psiquiátrico para que dejara de intentar suicidarme, conocí a diferentes personas con problemas de depresión y ansiedad, también estuve junto a mujeres que habían perdido a sus hijos por desaparición o por abortos no deseados. Conocí a muchas personas con pasados dolorosos y eso me hacía pensar que mi situación no era tan mala después de todo. 

La tercera fue un año después de salir de rehabilitación, sentía que era una carga para mamá ya que no estudiaba ni trabajaba, la pasaba en casa, intentaba ayudar con el aseo pero me empezaban los dolores de cabeza y mareos así que no podía hacer nada, me sentía inútil. Le rogué a mamá para poder viajar algún país donde fuera legal la Eutanasia pero como lo esperaba se negó. 

Estaba en mi habitación y había una barandilla en el techo la cual usaba antes para hacer ejercicio, amarré una soga y cuando estaba a punto de quitar la silla para ahorcarme entraron Gemma y Edward a la habitación, Gemma tenía 8 años y Edward 5 años en ese entonces a lo que gritaron para llamar la atención de mamá y cuando ella llegó me bajó y lloró mientras me abrazaba, nunca antes la había visto y escuchado llorar así y pude ver la cara de temor y tristeza de mis hermanos, a su corta edad los estaba haciendo sufrir, estaba siendo egoísta. Así que después de eso elegí vivir día a día regalándoles mi vida a ellos. 

Empecé a investigar por internet y pude ver que hay personas con Sida las cuales han tomado sus medicinas y han podido vivir hasta los 71 años, mi meta es llegar hasta esa edad y quien sabe, quizá viva más tiempo. 

SIDA (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora