Euforia, pasión, lujuria eso es lo que sienten uno por el otro, un tipo de juego que solo ellos conocen con especificaciones.
Aleska Petrov, una abogada de mucho prestigio y una de las mejores en su rubro, un encuentro con viejos amigos hace que c...
Mientras salía de la discoteca intente buscar a Nadia pero no la encontré, envié un mensaje y salí hacia la oficina. Cuando me llamaron me dijeron que alguien estaba adentro de la empresa con armas, alguien estaba utilizando a mis trabajadores como rehenes y eso era un gran problema
Nunca nos había pasado algo así nunca pero sobre mi cadáver va a pasar eso.
Salí corriendo lo mas rápido posible desde donde estaba hacia la agencia, en mi cabeza podía imaginarme quien seria ese imbécil. Espero que el o ella tenga un buen abogado porque se van a presentar cargos encima del idiota.
Corte camino y llegue lo más rápido posible, mientras caminaba hacia la agencia quede atrapada por una cerca que habían puesto los federales para rodear el lugar.
-¿Quién es usted?- me preguntó un oficial.
-Soy la dueña de la agencia- el hombre asintió con la cabeza y hizo un gesto con su cabeza que me indicaba que lo siguiera.
-Según se habló con el atacante dijo que tenía a unas secretarías con el, al guardia de seguridad y al abogado Morales-mientras caminaba detrás de el pude ver todo lo que intentaban hacer los policías.
-¿Saben que secretaria es? -a veces en estas situaciones los mismos cómplices son la gente de adentro.
-Si, nos dijeron que era una tal Smith ¿La conoce?-tenia que ser Smith.
-Claro, conozco a todos mis empleados -tarde unos segundos en darme cuenta de algo-,¡espere! yo a Smith la había despedido hace un par de días no se que hace ahí adentro.
-De acuerdo -se volteo y dijo algo en su radio-,en unos momentos les voy a dar información espere por allá con los demás.
-¿Les?-dije confundida.
-Si, su padre está ahí- dijo y se fue.
Efectivamente mi padre estaba ahí junto un par de abogados también mientras me acercaba a ellos podía ver el caos a mi alrededor. Todos estaban alterados, las secretarías atrás de los policías más apuestos, personas que prácticamente se quedaron sin uñas, era como si todo se cayera a pedazos pero soy Aleska Petrov y caer no es una opción para mi.
-¿Sabes quien esta ahí? -me pregunto mi padre.
-Algún cliente insatisfecho o algún cómplice -en mi mente solo rondaba el apellido Smith.
-¿Que?¿de que hablas?-dijo bebiendo su café.
-Lo que trato de decirte es que yo despedí a Smith hace un par de días y no se que ella hace ahí hace unos días que la despedí mande a recoger sus cosas en una caja. Solo no tiene sentido.
-Déjame hacer unas llamadas-y sin más se fue.
Donde estaba parada podía tener un pequeño panorama de todo lo que estaba pasando, el grupo del oeste estaba intentando entrar al edificio pero eran muchos, el capitán estaba "negociando" con el atacante y los demás esperábamos respuestas.
El tiempo pasaba demasiado lento y los policías ya tenían todo planeado.
Según los planos del edificio hay 2 formas de entrar al lugar que solo pocas personas conocían y eso era un punto a favor. Unos policías se quedaron el lugares estratégicos mientras que otros dos policías entraban al lugar vestidos de civiles, en la ropa que ellos tienen puesta se encuentra un micrófono muy pequeño así escuchamos todo lo que pasa.
Al hacerse pasar por rehenes no serian sospechosos por lo cual seria otro punto a favor, los que estaban adentro del edificio iban a sacar rehenes a escondidas. Tratarían de sacar a todas las personas posibles hasta que den una señal para que los demás entren.
-¿Entendieron todo? -dijo el capitán del escuadrón.
-¡Si señor! -respondieron todos.
Al ver como el plan empezaba me ponía nerviosa, todos estaban atentos en como entraban y vigilaban todo lo que pasa. Eran policías si pero ¿y si algo malo pasa? Eso era lo que rondaba en mi cabeza.
¿Se trataba de negocios? creo que no pero si de algo estoy segura es que se trataba de venganza.
La tensión se sentía en la atmósfera y esa sensación era mortífera, todos tenían lo pelos de punta al igual que yo pero tengo que mantenerme neutral, yo no podía alterarme porque si llegaba todo se iría al carajo.
Los policías encubierto estaban adentro y ya podíamos escuchar que pasaba adentro, había una discusión entre los atacantes porque eran los únicos que hablaban.
-Esto podría salir mal -dijo una voz femenina temblorosa.
-Mírame... todo va a salir bien-dejo de hablar-solo confía en mí.
Entre ellos se conocían y eso decía que esto estaba planeado pero muy mal.
Segundos ,minutos ,horas pasaban y por fin podía ver como algunos rehenes salían del lugar, cada vez eran más. Estaban esperando el momento perfecto.
-¿Ahora? -preguntaron por la radio.
-No.......-sacaron al último rehén -¡AHORA!
Y el caos se desató, todo el equipo preparado entró y fue como ver una manada contra dos animales pequeños, los gritos de los policías asustaría a cualquiera y eso paso en el lugar. El lugar estaba lleno de gritos, rehenes, secretarias y policías gritando. Caos en si
En unos minutos los atacantes ya estaban afuera, era lo que imaginaba Smith y un hombre parecido a ella, se podría decir que sería probablemente su familiar.
-¿Están todos bien?-les pregunté a mis trabajadores que estaban siendo revisados en una ambulancia.
-Si, no nos hicieron daño sino que querían papeles confidenciales -dijo mi secretaria.
-Si alguno de ustedes necesita ayuda ya sea psicológicamente o físicamente háganmelo saber ¿de acuerdo? -todos asintieron y salí de ahí.
Tuve que firmar muchos papeles y hacerme cargo de cosas que no quería lidiar ahora.
-¿Hay algo que necesite saber? -me dirigí al capitán.
-Si, los atacantes son hermanos y hablamos con las victimas, dijeron que van a presentar cargos ¿usted lo hará?
-De acuerdo y si, voy a presentar cargos.
-Si me disculpa -dijo cuando lo llamaban.
Y ahí tenían a "los Smith" siendo arrestados, tenían las manos en la espalda mientras eran acompañados por dos policías cada uno. Les di la espalda y podía escuchar las barbaridades que decía Smith, según ella yo era injusta cuando la había despedido ¡Ja!
-Solo llévensela ¿si? -y los policías se alejaron.
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¡Hola! Espero que estén teniendo un buen día o noche, bueno eso.
