Pasos prohibidos

El legado Petrov

Aleska Petrov *Doble capítulo de Aleska*

Estaba en el parte trasera del auto comiendo mientras mi madre escuchaba música.

-¿Enserio vamos al parque? -estaba emocionada casi nunca salíamos mama y yo solas, la primera vez que mis hermanos no nos acompañan.

-¿No me crees? -dijo fingiendo estar triste.

-¡Claro que te creo! -alce mi voz, mi madre me sonrió por el espejo.

Antes de estar en el auto mi mama me había retirado de la escuela para pasar el día juntas, mi papa estaba trabajando mientras que mis hermanos estaban en sus escuelas, al tener distintas edades nos mandaron a distintas escuelas.

Mama me había comprado un helado antes de entrar al auto.

-El chocolate es mi favorito -dije terminando mi helado.

-Lo se querida -dijo y dio la vuelta hacia el parque.

Nunca olvide ese día y nunca lo hare, aquel día donde ella me dejo sola en un parque. Mis hermanos lloraron su ausencia mientras que yo seguía sin soltar una lagrima.

Mi padre se preocupo por mi pero yo soy una copia femenina de el, nunca necesite a nadie, yo siempre hice todo sola y sin la ayuda de nadie. Cosa que muchos admiran de mi.

Cuando mis hermanos y yo decidimos a que nos queríamos dedicar nos separamos, cada uno se fue por su rumbo, Dmitry nunca volvió a casa pero nosotros si volvimos.

Dmitry nunca decía que era un Petrov, mi hermano prefería decir el apellido de nuestra abuela paterna según el "era mas común". Tenia la idea de hacerse desde cero, sin fama familiar ni nada de nuestro legado. El legado Petrov era muy conocido en varios paises y  mas en Europa, esa su razón de ocultarse, no voy a mentir si use ese truco pero no permanentemente.

Hace muchos años que no veo a Dmitry, el y yo nos entendíamos mas pero con Lukian la cosa era diferente. Lukian siempre estuvo escondido en su mundo mientras que nosotros peleábamos o jugábamos con los caballos, cada verano íbamos a verlos.

Estaba yendo al aeropuerto por Dmitry, mi hermano siempre necesito muchas cosas así que por eso mismo traje mi camaro negro.

Reconocí a mi hermano en un par de segundos, dice "no querer el apellido Petrov" pero camina como uno y actúa como uno. No hablamos y nos abrazamos como tendríamos que hacer hace años.

- ¿Cómo estas? -le dije con una sonrisa.

-Muy bien -dijo presumiendo de su italiano.

-Yo aprendí italiano antes de que pensaras en irte idiota -dije empujándolo despacio.

Lo encamine hacia mi auto y desde ahí nos fuimos a la casa de Lukian.

-Sabes que padre querrá verte ¿verdad? -dije mirándolo de reojo

-Era sabido -su acento en ruso era horrible.

-¡Cielos! Si que tu ruso apesta -dije riendo.

-Cállate -miro a sus pies -¿sabes porque volvió?

-De verdad que no lo se -frene en el semáforo rojo- pero se que no se trata de algo bueno.

Llevábamos discutiendo con Lukian sobre que hacer con Jokov, el se niega a tratarla como una embustera, una mala madre y mentirosa que es.

-Yo no voy a tratarla bien y es lo ultimo que digo -nuestras discusiones siempre eran en ruso.