Cᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 12
La perla del ejército 2
⋅•⋅⊰∙∘☽༓☾∘∙⊱⋅•⋅Cuando Sana llegó no había nadie, ella jamás pensó ver ese lugar tan solo, no estaban los pájaros ni su madre. Preocupada por qué algo le hubiera pasado salió corriendo pero en el camino unas voces la detuvieron.
-¿Está segura señorita Sukui? No quiero incomodarla, con que me ayude a escapar será suficiente.
¿Quién era? ¿Por qué le hablaba con tanta confianza a su madre?
Al asomarse las vio. Era una mujer bastante hermosa de ojos claros y tez pálida, sus hermosos cabellos castaños y largos. Con ellas iba una niña muy parecida a su madre, la menor tenía la única diferencia de que su cabello era mucho más oscuro, color noche.-por favor no te preocupes por eso, Hiroshi.---Sukui le sonrió levemente --- Tú y Mei pueden quedarse el tiempo que necesiten. --- la niña parecía haber tomado mucha confianza con Sukui, tomándola de la manga de su manto.
-¿Madre?-- Sana salió de su escondite. ---¿Quienes son ellas?
-¿Sana? ¿Qué haces aquí? No habías venido por estos lados desde casi cuatro años --- siguió caminando, en ningún momento detuvo sus pies. Al pasar a un lado de ella, uso su mano libre para tomarla del antebrazo y hacerla caminar a su lado.
-¿Quiénes son ellas?--- Sana las seguía inspeccionado, ¿Por qué su madre se veía tan tranquila con ellas? Hace unas horas más temprano en la mañana la había visto casi muerta, espantando a todo lo que se le acercara.
-¿...como es posible que tu hija se vea mayor que tú?--- soltó al aire. Hiroshi pensó que eran parecidas, por eso Mei tenía 8 años, por qué Hiroshi la tuvo al cumplir sus 17.
Pero Sukui aparentaba una joven de no más de 20 años, y esa tal Sana ya era una mujer adulta, mayor de 40. ¿Cómo era eso posible?
-¿Hmm? ---Sukui canturreo, aún no había explicado aquella confusión --- te explicaré eso después, en este momento tenemos otro asunto que resolver.
-¿Por qué usted, madre, tiene que darle explicaciones? ¡¿Quien es ella?!---Sana había sacado todo el mal carácter de su padre, siendo un poco más explosiva.
-Sana, no te sobrepases. --- la miro de reojo--- ella es Hiroshi, ha pedido mi ayuda. Y me parece interesante invertir mi infinito tiempo en algo, ¿O prefieres que me siga marchitando en ese lugar?--- le pregunto lo último con un tono un poco burlesco.
Sana abrió la boca sorprendida, ese tipo de tonos jamás los llegó a escuchar de su madre, pensaba que Daiki también había sacado su sarcasmo de su padre. Pero su padre no era sarcástico. Indra era grosero y directo, sin pelos en la lengua ni filtros. Sukui era sorprendente sarcástica.
Para cuándo Sana se dio cuenta ya estaban entrando al hogar que las vio crecer a ambas.
-siéntete como en casa, Hiroshi y Mei. ---ambas pasaron a sentarse en los cojines que rodeaban una mesa baja, siendo esa la sala de estar. ---dime Sana, ¿Por qué viniste?
-¡Hombres del ejército llegaron al pueblo, no quieren irse! --- había olvidado por un momento el porque había ido hasta allá--- pensé que podía pedirle ayuda. ¿Podría por favor llegar a un acuerdo con ellos? Si no ponen de su parte, y no se logra. Queremos que los saque a la fuerza. ---Sana hizo una reverencia. Siempre había tenido un extremo respeto por su madre.
Y ahora que eran casi completas desconocidas, no podía evitar tratarla de aquella forma.
-pero que conveniente, ¿No lo crees, Hiroshi?--- Sukui se rio con sarcasmo. ---¿Gustas tomar té con nosotras, Sana?--- Sukui tomó su canasta de té y se sentó en un cojín.
-... Si--- se acercó de a poco, desde la mañana ese día había estado de locos.
Sukui se mostraba extrañamente habladora, Sana jamás la había escuchado de esa forma, cuando hablaba con su padre ella siempre se mostraba entusiasta, pero siempre se mantenía contestando a lo que Indra decía o preguntado cosas para seguir la conversación, esto era tan extraño, era como ver a otra persona.
- bueno...--- Sukui dio por terminada la hora del té, carraspeo un poco y las observó a ambas--- esos hombres del ejercito muy probablemente son los que te están buscando, Hiroshi.--- ella asintió--- entonces, ¿Qué es lo que quieres que yo haga por ti? esos hombres no se irán por las buenas, tendré que sacarlos a patadas, ¿quieres que los mate o solo los ahuyento?--- Sukui le pregunto muy seriamente y su hija suspiro.
eso si era algo familiar para Sana, su madre siempre fue muy extremista al igual que su padre, ninguno sabia tener algún balance en sus acciones.
-bueno... yo....---miro a su hija, la niña comía feliz un pan alejada de ellas, jugando con los pájaros mascota de Sukui.--- si solo lo ahuyentas él seguirá buscándonos--- apretó sus manos en puños--- ¿le puedo pedir que los mate?--- la miro intensamente.
-ese pedido me gusta más--- se levanto --- quédate aquí con tu hija--- le pidió y giro hacia Sana--- manda algunos hombres aquí, pueden encontrar con facilidad el lugar y las dañaran.--- Sana asintió--- entonces nos vamos Hiroshi, cuando vuelva podrán irse a vivir sus vidas tranquilas--- le sonrió a la joven mujer quien comenzó a lagrimear--- ¿Por qué lloras?--- le pregunto sorprendida.
-es solo que... la amabilidad de la señorita Sukui me ha conmovido--- limpio su rostro y Sukui rodo los ojos algo divertida.
con eso Sukui y Sana bajaron de la montaña hacia la aldea. Sukui se encargaría de aquellos hombres que molestaban la paz del lugar.
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𝑳𝒂 𝑺𝒂𝒍𝒗𝒂𝒄𝒊𝒐𝒏 " 救い【𝗖𝗹𝗮𝗻 𝗨𝗰𝗵𝗶𝗵𝗮 】/ Re Publicando
FanfictionLos ninjas actuales le deben todo a sus ancestros. Ancestros como el sabio de los 6 caminos, pero especialmente a sus dos hijos. Otsusuki Ashura e Indra. Ambos eran los padres de los más grandes clanes del mundo ninja. Gracias a ellos, el universo...