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Mientras unas querían ser Heather, Many Kim deseaba ser Park Jiyeon.
—¿Que si vas en serio con Park Jiyeon? ¿En realidad ella es tan importante para ti? —volvió a preguntar la pelinegra, ahora impaciente. Necesitaba sacar eso que la estaba destruyendo antes de que el valor se desapareciera de su cuerpo—Necesito saber si eres feliz con ella.
—¿Y porque no sería feliz con ella? —inquirió confundido y a la vez soltando un suspiro de alivio. Entendía ahora esa pregunta y agradecía que Many se preocupará por su felicidad, por un momento se había preocupado— Ella me gustó durante un largo tiempo, y ahora que estoy con ella ¿De verdad crees que no iría en serio con ella?
—Eso siempre has dicho con todas. —ataja la pelinegra disgustada, su mirada estudia las reacciones de Jackson buscando un detonante para decir lo que se ha guardado durante años, aquello que la liberaría. Sus sentimientos por él. —Recuerdas cuando íbamos a en la escuela media y que cambiaste tu correo electrónico por el nombre de Yejin Ah, o cuando te empezó a gustar la chica de la cafetería de la escuela y le dejaste rosas todos los días durante cuatro meses. Así puedo nombrarte a cada una de ellas.
Jackson soltó una carcajada suave recordando esos momentos tan random. No sentía ni vergüenza, ni mucho menos molestia por recordar eso, al contrario, le daba hasta nostalgia. Many en otro momento se hubiera reído, pero justo ahora estaba odiando la falta de seriedad.
—Park Jiyeon es diferente a todas ellas. — aseguro el rubio ahora serio, confiado y firme. Many mordió su labio con temor y apretó las manos que estaban en su regazo—El tiempo se detiene cuando estoy con ella y las horas pasan rápido cuando estamos juntos. Jiyeon es un alma sensible, pura y delicada. Cada día la conozco más y más y confirmo las razones por las cuales me enamore de ella, me encanta todo de ella. Cuando la veía pasar o nos cruzábamos en los pasillos del salón, mi corazón latía como loco. Siempre era intensa la forma en la que me empezó a gustar porque creía que era inalcanzable para mí, pero ahora que es mi novia, quiero ser el mejor chico para ella. Es un esfuerzo que hago día tras día.
—Entonces...—alargo con duda— ¿Solo tienes ojos para ella?
—Pero por supuesto que sí. — alego con una sonrisa radiante y soltando una tenue risilla — Gracias por preocuparte por mi relación, significa mucho para mí.
—No me lo agradezcas, Jackson.
Jackson se paró y rodeó la isla para darle un abrazo a Many, está estaba aturdida, pero se encontraba tan cuerda como para corresponder ese abrazo mortal.
