¡Digo que me parece muy buena idea Lili! ¿A qué quieres jugar ahora? -le mostré mi sonrisa más sexy y está la correspondió-
¡No sé unnie! A lo que tú gustes, estoy algo cansada de este juego -diciendo esto se levantó de la cama quitó todas las cosas que teníamos y se acostó quedando con los ojos cerrados, yo me levanté para tomar el chocolate derretido y los frutos rojos me subí en sus piernas quedando ahorcadas sobre ella, ella de inmediato abrió los ojos- ¿Qué haces unnie?
¿No querías jugar a otra cosa pequeña Lili? ¿O es que acaso te da miedo jugar conmigo?
-Trago en seco y solo me miraba, su mirada era súper profunda y sus ojos se habían oscurecido-
¡Jamás, jamás jugaría contigo! Al menos no de mala manera unnie. -Eso lo entendí ella se refiere a mis sentimientos y eso me causaba bastante ternura y una seguridad enorme-
¡Ven siéntate! -como traía las cosas en la mano las dejé aún costado de nosotras y la ayudé a sentarse aún yo estando encima de ella- Voy a dividir las fresas, cerezas, frambuesas y zarzamoras en dos partes iguales, cada una tendrá la oportunidad de hacer una pregunta, decir un secreto, algún miedo o una fobia, ¿Te parece? ¡Será nuestro juego de la sinceridad! Y ya después voy a ser toda tuya -tome su nuca y la acerqué a mí para besarla ella me tomaba de mis glúteos y comenzaba a hacer pequeños movimientos frotándome en su parte y creo que su pequeño amigo comenzaba a despertar, así que detuve el beso, me bajé de ella y me senté en la cama en posición de indio-
¡Si, si está bien, pero Jisoo a mí solo me gustan las fresas y cerezas! -tramposa Manoban, tramposa-
¡Bueno entonces siendo así toma, la mitad de fresas y cerezas para ti y la mitad para mí! Te diré las reglas:
1 cada que quieras saber algo me debes de dar una fruta,
2 se debe de contestar con completa sinceridad nada de mentiras, como dicen las desenfrenadas ¡Mátame con la verdad pero no me mientas! Amo esa serie jajaja
3 puedes pedir también algo a cambio de una fruta
4 debes de comerte la fruta, no la puedes acumular o si gustas sí, pero no la puedes usar contra mí
5 puedes darme la fruta de la forma que quieras
Y esas son las pequeñas reglas lisa
-Lisa me besó y me dio una fresa, tomo mi nuca y volvió a besarme pero estaba vez el beso era más intenso, su lengua pedía entrar en mi boca y su deseo fue concedido, diosss esta niña besa increíble, me vuelve loca con un simple beso, con los cuales me da a entender que me quiere de verdad, nos separamos y la muy tramposo sonrió descaradamente por lo que iba a hacer-
¡Abre la boca unnie! –mas que una petición era una orden jisoo abrió su boca y yo le metí una fresa- ¡Come unnie! –me hizo caso de nuevo, cuando se la termino le di otra, ella me miraba con cara de incógnita- ¡Abre otra vez! –así lo hizo, me daba ternura que me miraba con incredulidad pero no decía nada, estaba por darle otra cuando al fin reaccionó-
¡Lisa...! Ya es mi turno, te dije que es una fruta por cada cosa que quieras saber o quieras, tramposa –como la última fresa estaba jugosa, un poco del líquido cayo en mi labio, lisa me tomó de la nuca lamió él jugo de esta y después volví a conectar nuestros labios-
¡Es que tus besos valen por 5 fresas unnie! -Le di otras 5 fresas, y le sonreí, ya quería que este maldito juego terminará tenía ganas de estar con ella, aunque no sexualmente del todo, sino recostarme con ellas abrazarla, mimarla y cosas así-
¿Qué...? ¡Lisa...! Me las vas a pagar, toma, -le di una cereza- ¿Cuál es tu mayor miedo? –hice mi pregunta y mientras ella pensaba su respuesta yo me estaba comiendo las malditas fresas que me dio-
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Coincidencias del Destino (LISOO)
Hayran KurguLas coincidencias de la vida suelen cruzar los caminos y destinos de las personas, algunas veces para bien o para mal todo depende de la situación en que suelen pasar... Esta es una historia que va a llenarte de emociones a cada instante, aunque no...