Tú y yo a pesar del tiempo [ Sin Editar] (COMPLETA)

Capítulo 16

Álex :

Daba gracias a los cielos por sentirme relativamente bien luego de todo lo que había bebido en la fiesta ya que Lucas y yo teníamos nuestro primer día trabajando para la organización de Yonny. Debíamos vender algo de droga, nada muy complicado pero estábamos a prueba, así que no podían haber fallos.

Tranquilos yo me aseguraré de que puedan cumplir sus órdenes sin contratiempos.

Las palabras del oficial Phillips me calmaban mucho, nos había asegurado despejar la zona por dónde estaríamos y además informarnos si había algún policía. Eso facilitaba mucho nuestro trabajo, si éramos eficientes no tardaríamos en ascender.

_ Esto me recuerda a los viejos tiempos._ Mencioné mientras caminabamos, obviamente Lucas estaba conmigo ya que esto es cosa de ambos.

_ Tienes razón, hacía tiempo no venía por estas calles._ Comentó pensativo.

_ Parece lejano ese tiempo en el que nos escapabamos de todos lados._ Agregué con una sonrisa.

_ Eras un lento Álex, no se como no nos atrapaban._ Se burló Lucas.

_ ¿¡Pero que dices!? si era yo quien tenía que ayudarte a saltar los muros. _ Lo molesté. Si era cierto que una vez tuve que ayudarlo pero había sido porque tenía el tobillo lástimado.

_ Sigues con eso._ Me reprochó._ Ni te lo voy a discutir porque sino, no acabamos hoy.

_ Gallina._ Reí.

_ Alejandro de la Vega, ¿me estás retando?

_ ¿Y que harás al respecto?

_ Una carrera el primero al llegar al otro lado de ese reformatorio gana.

_ Hecho.

Y así corrimos hacia aquel lugar donde había estado durante un largo tiempo. Nos escabullimos como solíamos hacerlo, logramos llegar al otro lado juntos como hacíamos siempre y luego realizamos la dichosa entrega.

(...)

En la noche decidí visitar la tumba de mi madre. Leo había descubierto donde estaba sepultada y sería de las tantas cosas que nunca pude agradecerle.

_ Te echo tanto de menos mamá._ Dije pasando mis dedos por la inscripción. _ Siento no venir más seguido, pero ahora que estoy más cerca y tengo una vida ligeramente estable prometo hacerlo.

Y es que ahora vivía en la considerada parte segura de la ciudad. A este lado estaban muchas de las familias ricas y las buenas universidad como la mía. Al escaparme luego de que mi madre falleciera había acabado al otro lado de la cuidad.

Sentía mis ojos arder por la nostalgia de todos los recuerdos mi madre, Leo, el imbécil de mi padre. Froté mis ojos, no quería llorar de nuevo.

_ Te amo mamá._ Susurré y decidí que debería irme, era algo tarde.

Iba llegando a mi auto cuando sentí mi móvil.

_ Hola._ Respondí

_ Necesito verte._ La voz de Sof salió algo baja y la escuchaba sollozar, asumí que algo no iba bien .

_¿Dónde estás?._ Pregunté

_ En la calle frente a mi casa._ Contestó.

_ No te muevas de ahí. Llegó en cinco minutos._ Corte la llamada y me subí al auto.

No estaba muy lejos de a casa de mi mejor amiga y con mi manera algo alocada de conducir llegué muy rápido. Sof estaba sentada al borde de la calle con la cabeza entre las rodillas. Frené delante de ella y pensé en bajarme pero ella subió al auto.