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Capítulo 19. Entre Gotas De Lluvia

Había pasado una semana y media desde todo aquello, y el pobre chico de cabellera verde aún seguía sin despertar el tercer quirk, le era casi imposible, no entendía como debía de activarlo, que debía de hacer, y su entrenamiento exhaustivo no le ayudaba en nada.

Otro hecho extraño había empezado a ocurrir en todo el mundo y era que llovía, había empezado hace un par de días, y ya estaba causando estragos en todo el mundo, al parecer este fenómeno natural era causado por el extraño fenómeno ocurrido, las muertes de animales  e incluso personas crecían conforme pasaban los días, él pecoso se encontraba parado bajo la lluvia le habían permitido salir un poco, estaba siendo claramente vigilado, pues no le dejarían salir solo así de fácil, obviamente debía de haber alguien observándolo.

Ahí estaba viendo como las plantas morían, por alguna razón le causaba tristeza ver como como la naturaleza sufría, agonizaba lentamente era extraño para él por que era como si pudiera sentir el sufrimiento de la tierra misma, cosa extraña que empezó a sentir hace un par de días, no le había contado de esto a nadie, oyó pisadas, pensó que era aquella persona que estaba encargada de cuidarle, pero al voltear pudo visualizar a su querido hermano mayor.

Corrió hasta donde este se encontraba, y le abrazo, lo abrazo con desespero, como si llevara años sin poder verlo, y no quería soltarlo pero tenía que dejarlo, lo miro unos segundos y su querido hermano mayor le regalo una brillante sonrisa una sincera, él también había extraño al pequeño pecoso de ojos esmeralda.

Izuku - Te extrañe como no tienes idea hermano...

Keigo - También te extrañe pequeño - lo abrazo, el sentía que el necesitaba de aquel abrazo -

Izuku- Hermano... ¿Puedo contarte algo?  - lo tomo de la mano y caminaron un poco más lejos de la persona que estaba ahí vigilandolo, noto como este los dejo alejarse un poco más sin seguirlos -

Keigo - Claro - sintió como si le fuese a dar una especie de mala noticia o algo así -

Izuku - Se lo que ha venido ocurriendo, me exigen que despierte el tercer quirk, me dicen que si lo hago me dejaran estar contigo de nuevo, pero.... Tengo miedo... Mucho miedo... Yo... Desde hace un par de días siento como la tierra sufre... - pequeñas lágrimas salían de aquellos ojos verdes, y su voz se entre cortaba -

Keigo - ¿Como que sientes que la tierra sufre? - estaba más que sorprendido, sentía que algo andaba mal con aquello -

Izuku - E-es difícil de explicar hermano, pero... Solo puedo sentirlo, no se si tenga que ver con el tercer quirk, no se los he dicho a ellos, por que tengo miedo... - su cuerpo se sintió débil al grado de que cae inconsciente -

Keigo quiso en esos instantes tomarlo e irse lejos con él, pero inmediatamente en cuanto Izuku se desmayo, el agente encargado se acercó tomándo en brazos al menor, Keigo noto de inmediato como de la nada ya estaba rodeado de agentes que habían ido a recoger al pecoso, sabía que no era un buen momento para huir o hacer algo imprudente, todo lo que podía hacer ahora mismo era esperar a la oportunidad correcta.

Un cenizo había observado todo aquello, desde a lo lejos, agradecía que Momo le hiciera aquellas lentillas para espionaje avanzado, le había costado bastante a la azabache y quiso preguntar para que las requería pero decidió no preguntar y solo hacerlo, como si algo le dijera que no debía de cuestionar las acciones de su compañero de clases, también había hecho para él un micrófono diminuto y un receptor para el mismo.

Por lo que gracias a todo ese equipo, pudo escuchar la corta conversación de Keigo y Izuku, tenía un mal presentimiento, y a diferencia de Keigo el no quería esperar tanto para recuperar a su amigo, pero... Tenía que esperar un poco más, tener un plan, no quería fallar o aún peor terminar muerto en el intento de rescate.

Keigo se fue, se regañaba internamente por todo aquello, se culpaba por haber metido a Izuku en todo eso, él incluso pensó en que si pudiera regresar el tiempo, sólo le pediría a Izuku que se quedara con él, así evitar tomar aquella mala decisión, evitar hacer esa llamada, evitarse todo lo que estaba pasando, pero lamentablemente no podía, no tenía dicha habilidad y no conocía a alguien que la tuviera.

Al paso de unas horas Izuku despertó, débil, cansado, pudo notar como estaba conectado a aquella máquina, aquella que se encargaba de monitorear todo, incluso su estado de ánimo, había empezado a detestar esa máquina, odiaba usar aquellos aparatos, aquel collarín que daba todos sus datos, aquellos aparatos que estaban puestos cerca de sus orejas, pero no podía quitárselos, por que en cuanto lo hiciera sabia que sonaría aquella alarma, lo intento una vez, pero desde esa ocasión supo que pasaba si se los quitaba, sonaría una alarma, aquel molesto sonido, que daba aviso, de inmediato todo era sellado, de inmediato iban a verle, y pudo notar en aquella y única ocasión como ese collarín también ocultaba un número en su cuello, pudo verlo gracias a un monitor que estaba ahí, uno que estaba conectado a una cámara que le mantenía vigilado, pudo ver aquella marca "00", fue cuando lo supo, que él era el primer chico con el que experimentaban, lo que desconocía el pecoso es que anteriormente existió el sujeto experimental "0", un error del que nadie habla, un error que ahora les estaba causando muchos problemas, uno que estaba matando todo lentamente, mientras observa como el caos se crea por sí solo.

Aquel chico de tono de piel oscuro, observaba aquella guarida, o mejor dicho la entrada  de dicho lugar, en donde tenían al joven pecoso cautivo, sabía de su existencia, sabía que sería un problema que este estuviese vivo, por lo que ya había pensado en matarlo, pues no quería que este despertase su quirk.

Es por eso, que en aquella noche bajo la lluvia, aquel chico de ojos oscuros entró a aquel lugar, matando a todos aquellos que le estorbaran en su camino para llegar al pecoso, una masacre había comenzado.

Mientras que una llamada en plena madrugada alertó a un joven alado...

X - Keigo...por favor escucha con atención, necesito que vengas rápido y protejas a Izuku, él es nuestra última salvación, para la humanidad, para la tierra, para todos y una última cosa más, tienes que ir a este lugar xxxxx.... ¡Keigo,tienes que salvarlo!

No le dio tiempo a decir nada, la llamada no fue cortada, escucho como del otro lado se oía un grito sonoro, un grito de agonía y sufrimiento, y él mismo fue quien corto la llamada, algo malo había pasado, marcó de inmediato al chico de quirk explosivo, sabía que necesitaría su ayuda, este atendió a su llamada, y escapo en medio de la noche de los dormitorios, pero no estaba solo, pues Yaomomo, Kaminari, Kirishima, Tamaki, Ochako y Todoroki habían salido con él, no le iban a dejar solo, él no les contó nada de lo que pasaba, simplemente le siguieron, le habían cachado tratando de salir de ahí, y terminaron metidos tal vez en un gran problema...