Actualidad.
—¿Cómo les fue? —preguntó mamá al vernos llegar al apartamento.
—Mejor de lo que cualquiera hubiera pensado —le responde mi hermano caminando hacia ella.
Se encuentra en la cocina preparando el almuerzo, como no estamos dentro de ningún tipo de clase extra salimos antes de tiempo, por ahora.
Me cruzo de brazos y me dirijo también a observar a mamá.
—No tuvimos que usar ninguna excusa o mentira hoy... —es lo que digo en voz baja.
—Me alegra oír eso —dice cortando lo que supongo son unos vegetales— tienen que familiarizarse al nuevo ambiente, hacer amigos nuevos y —hace una pequeña pausa para luego suspirar— continuar...
Miro hacia mis pies mientras me balanceo sobre ellos, no respondo al respecto. No hago comentario, no lo quiero.
—No me interesa hacer amigos y mucho menos ser amable.
Levanto la mirada luego de decir eso y la observo, me mira con el ceño fruncido y lo único que hago es encogerme de hombros.
—Pero puedes intentarlo...
Enarco una ceja. Abro mi boca para responder, pero Lev se me adelanta.
—Mamá, aunque no lo creas, Zoa fue más social de lo que muestra —frunzo el ceño con molestia al oír eso y lo miro—, entabló una conversación y por lo que vi ya hay personas interesadas en ella.
—Claro, como si me gustara ser el centro de atención...
—Lo eras —contraataca.
Entrecierro los ojos conteniendo las ganas de querer golpearlo.
—Si es así, tú también lo eras, es como si tuviéramos un cartel que dijera "mírennos" —digo señalándonos—. Mamá, no sabes lo irritante que fue presentarse a personas más de mil veces.
—Hija, no exageres, no debe de ser tan malo...
—Yo si disfruté de esa atención.
Ruedo los ojos.
—Obvio que la disfrutaste, no es como algo que no te gustara, y ya una persona te echó el ojo, así que prepárate —le golpeo el hombro.
—Pues no soy el único.
—Pero a mí no me interesa.
—Eso no significa que vayas a hacer algo por interés.
—Significa eso, y para aclararte más —nos señalo— no porque seamos mellizos significa que piense lo mismo que tú, aquí si tengo los pies en la tierra.
—Entonces termina de aterrizar, porque aún te veo varada.
—No te atrevas...
—¡Dejen de pelear! —Dice mamá sobresaltándonos a ambos—. No se alteren que es el primer día apenas, si alguien se interesa en ustedes déjenlos que se interesen, pero no les den falsas ilusiones.
—¿Qué tipo de consejo es ese, Irina? —pregunto exaltada.
—Mamá quiere que nos divirtamos y apoyo esa decisión.
—Cállate.
Él solo ríe y yo niego.
Divertirse, vivir la vida...
No creo poder, no con todo lo que paso y menos sin ella. Pero puedo mentir, fingir, actuar.
Desear que todo sea real, desear que todo no sea real...
ESTÁS LEYENDO
Alerta Roja
Teen Fiction«La venganza y la cordura a veces van de la mano». Una muerte, un nuevo destino. Zoa junto a su incompleta familia se mudan al otro lado del mundo luego de la muerte de una de las personas más importantes en su vida, la realidad es que tras eso todo...