11. Me haces falta

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Al día siguiente.

Era un día normal como de costumbre, estaba en el instituto, junto a mi casillero poniendo todos los libros que me tocaban hoy en mi mochila, poniendo cosas que no necesitaba. Sentí que alguien se puso a mi lado y me miraba, lo miré era Reggie, suspire y seguí a lo mío. Luego cerré la puerta del casillero, el agarro mi mano, lo miré tenía ojeras, los ojos rojos e hinchados.

-Mantle cuídate esa alergia. - me separe de el y me fui hasta la clase que me tocaba, llegue y me senté al lado de Fangs. Atendí a la clase, bueno más bien estaba en mi mundo, dibujando en mi hoja de la libreta, hasta que el profesor se para enfrente mío y me mira, mira mi dibujo.
Dejo de dibujar y siento la mirada de Reggie, lo miro y el me mira atento. El chico que está a mi lado izquierdo me pasa una carta, la comienzo a leer y pongo mi cara entre mis manos. Suspiro levemente mirando la carta, toca el timbre y salgo de la clase con mis cosas, llego al baño, me lavo la cara y suspiro nerviosa, algo mareada. Salgo del baño, y me dirijo al salón donde estaban todos los chicos, miré a Chuck y el se reía, me mira y se sigue riendo. Cierro los ojos y me agarro un poco del sofá, noto que los chicos me miran.

-Juls estás bien?- dice Verónica mirándome, a lo que yo asiento. Empiezo a ver todo negro y me desmayo. Escucho a Verónica gritar, a alguien levantándome un poco, dándome toques en la cara. Hasta que dejo de escuchar cosas y no siento nada.

Narra Reggie.
Al ver que Juls se tambaleó me levanté a cogerla ya que estaba en el suelo desmayada, en un abrir y cerrar de ojos, ella estaba en el suelo, me levante, empece a tocarle la cara.

-Nena! Amor! -grito desesperado, le tocó la cara, la cojo en brazos. El señor director viene corriendo y me acompaña a mi y a Juls a enfermería. Me echan de la sala, veo a Archie llegar, junto a Betty, Jughead, Verónica, Tonni, sweet pea, Fangs y Cheryl. - esta dentro, la están revisando, o no se que mierdas. - susurro nervioso, Betty me mira.

-Reggie, cogí la mochila de Juls y en el suelo había una carta que tenía Juls en la mano..-me la da, la cojo y comienzo a leerla.

-porque mierdas Chuck hizo eso?- digo enfadado, me voy de allí en busca de Chuck, llego a la sala y lo agarro del cuello, sweet pea y Fangs vienen detrás intentando calmarme. - Eres como un grano en el culo Chuck, siempre molestando. Y jodiendo la vida de los demás, y jodiendo la mía o la de Juls, porque mierdas escribes una cosa que no es verdad. Puede que sea El Capitan del equipo pero nadie, nadie me conoce como soy realmente. Yo no te he hecho nada ni Julissa, ojalá te vayas a la mierda. Hijo de..-le aprieto más el cuello, el me empuja, me aparto de el- Que por tu culpa perdí a la persona que más había amado! Ella me enseño a amar realmente y tú haces una cosa así! Que mierdas intentabas! Dímelo!!!- grito enfadado, el me mira- no intentabas nada, lo sé. Eres estupido, perdiste por ambos lados. Ella sabe que fuiste tu. Y yo también lo sé.- como mis cosas y me voy de allí, voy donde estaba Juls. Al ver que no estaba, le pregunto a Betty, ella me dice que vinieron a buscarla su padre y que estaba despierta.

Durante lo que quedaba de día, me quede en el instituto. En las clases, y luego en el entreno. Por último, salí del entreno y fui al pop, a por dos batidos de chocolate, luego caminé a casa de Archie. Toque el timbre y espere.

Narra Julissa.

Escuche como sonó el timbre, también escuché a mi padre hablar con esa persona. Yo estaba en mi cuarto, de espaldas a la puerta de mi habitación, sentada en el escritorio, dibujando y con un poco de mi música. Sentí como pusieron un vaso del pop en mi mesa, quite mi auricular de la oreja y me giré, encontrándome a Reggie. Lo miro y miro el batido, lo cojo y bebo.

-pensé que necesitabas compañía, después de lo de hoy. Y que necesitabas tu batido favorito- susurra y me mira, se sienta en la otra silla, lo miro. - estás mejor? - susurra suave, a lo que yo asiento levemente.

-Reg..-lo miro y suspiro- discúlpame..- susurro leve, bajo la mirada. El me mira y niega, levanta mi cabeza, me besa suave los labios.

-No hay nada que perdonar. Estabas en tu derecho. Pero solo fue una mentira de mierda de Chuck..-susurra mirándome, luego da leves caricias en mi nariz. - además, no pegas tan fuerte..- dice bromeando, lo miro y me rio levemente, el acerca mi silla a la de el- pegas flojo..-acaricio sus mejillas y su pelo. El cierra los ojos y pone su cabeza en mi hombro. -te he echado muchísimo de menos..pero muchísimo..-susurra suave y me abraza a él, lo miro y el me mira a mi besándome lentamente atrayéndome a él. Acaricio sus mejillas lentamente, atrayéndole más a mi.

-también te echado muchísimo de menos..- susurro suave sobre sus labios, acaricio su pelo. Miro sus ojeras, las acaricio, beso su nariz rojiza. - tienes cara de no haber dormido..-susurro levemente mirándole, apoyo mi frente en la suya.

-No podía dormir, sabiendo que te había perdido..Julissa odio cuando me hablas de forma fría..tu me haz enseñado a amar..-susurra suave- si lo he estado pasando mal, imagínate cuando te pierda de verdad..-susurra con la voz entre cortada- he cambiado..bueno lo corrijo, me haz cambiado. Antes era el popular, el capitán más egocéntrico..pero tú. Me haz cambiado..y no tenerte ha sido lo peor que me ha podido pasar, cada enfado que me he cogido y que tú no estés ahí para calmarme con una simple caricia, sonrisa o un simple mensaje..-susurra levemente- me siento vulnerable si no estás..-susurra suave y apoya su cabeza en mi hombro, acaricio su nuca, el pone sus manos en mi cintura. -No me dejes nunca..- susurra suave. - yo no lo haré, lo prometo- levanta su cabeza y me mira a los ojos. Lo miro detenidamente, y acaricio sus mejillas.

-piensas que te dejaría...?- susurro suave, acariciando sus mejillas y niego- nunca..-susurro y lo beso lentamente.
Me atrae más a él, me sube a su cintura, nos besamos lentamente. El se levanta conmigo en su cintura, enredo mis piernas en ella lo beso con ternura. El cierra la puerta con seguro, me tumba con suavidad en la cama y comienza a besarme con lentitud y cariño. Ha quitarnos la ropa con cuidado.
Esta noche nos unimos, siendo una misma persona, llena de amor verdadero y para siempre.
Reggie, era el chico del que me enamoré ese primer día de clases, ese chico que me ha salvado muchas veces cuando era pequeña de una posible bronca de mi hermano, ese chico que me da su chaqueta para que no pase frío, ese chico que me cuida y me ama tal y como soy, con mis imperfecciones y cicatrices. Era el chico perfecto, el chico perfecto para mi.

𝙸𝚗𝚏𝚒𝚗𝚒𝚝𝚢 𝚕𝚘𝚟𝚎 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora