Una nueva vengadora

Capítulo 7

Había anochecido totalmente cuando aún seguían caminando por el bosque.

El lobo de denso pelaje caminaba lentamente, sobre ella, Natasha cada vez se relajaba más mecida por el ritmo suave que llevaban.

Se denotaba en el aire un ambiente tranquilo y suave, solo se escuchaba el crujir de las hojas bajo las patas del animal y las profundas respiraciones de ambas mujeres, de vez en cuando también se podía oír el ulular de algún búho que las acompañaba en su viaje, aún así, ninguna había roto el silencio con palabras.

Poco a poco, comenzó a vislumbrarse la luz de la ciudad a lo lejos, acompañada de los ruidos nocturnos urbanos.

Las calles se encontraban desiertas a estas horas, excepto por algún adolescente que salía de las discotecas abiertas para vomitar todo el alcohol que había consumido.

Durante el trayecto, Natasha terminó por recostarse sobre el lomo de Wanda, enterrando inconscientemente los dedos en su suave pelaje, y quedándose mirando el cielo estrellado en una noche muy despejada. Estar tumbada sobre la loba le recordaba a una mecedora por su lento caminar, y el rítmico bombear de su corazón parecía una nana para dormir.

Mientras contaba todas las estrellas que eran visibles aquella noche se fue adormecimiento ligeramente hasta que la loba paró después de adentrarse profundamente en la ciudad.

- Cuál es el problema? - Preguntó con voz suave.

- Hemos llegado, debería simplemente cruzar la puerta principal?

La pelirroja simplemente se incorporó y bajo de un salto haciendo que sus pisadas resonaran, sin hablarle, empezó a caminar al rededor del edificio hasta encontrarse con una puerta diferente.

- Tenemos puerta propia. - Mencionó como explicación pese a que Wanda no había preguntado.

Se acercó hasta la avanzada tecnología de la puerta y aproximó su ojo hacia un sensor mientras ponía la palma de su mano en otro, mientras la máquina analizaba los escaneos obtenidos habló:

- Steve tiene una obsesión por la seguridad, obligó a Tony a ponerlo.

Las compuertas se abrieron a la vez que una voz robótica habló:

- Buena noches señorita Romanoff, la forma de vida desconocida que se encuentra detrás de usted es un acompañante o debo activar el protocolo de alarma? - preguntó la interfaz mientras Wanda volvía a refunfuñar.

- Está conmigo, Viernes avisa a los Vengadores de que he llegado y de mi acompañante, hazles saber que viene de forma pacífica.

Cuando comenzó a caminar dentro del edificio se dio cuenta de que solo el eco de sus pasos resonaba en las paredes, al girarse se dio cuenta que Wanda se había quedado parada en la entrada y a pesar de que no le dijo nada supo que estaba asustada.

- Oye no soy buena dando charlas de ánimo - le dijo un tanto incómoda - pero todo irá bien.

Aunque las palabras de Natasha fueron pésimas hicieron que la loba caminara, cuando ambas estuvieron dentro la compuerta se cerró, asustando a la de ojos marrones que erizó todo su pelaje. Cuando la vio la pelirroja solo rio.

En el recibidor había varias puertas que no sabía a donde conducían, solo siguió a su compañera y se dirigieron al ascensor.

El ascensor tardó varios minutos en bajar que pasaron en silencio mientras veían el contador de números descender.

- Estos son los momentos en los que me alegro de que Tony haya instalado un innecesario ascensor gigante.

Subió primero la loba, apretujándose contra el fondo para dejarle sitio, en el ascensor no había botones, solo una pantalla que debía ser parte del interfaz.