La última vez que vi a Dash, fue ese domingo, o sea hace seis días, en el restaurante donde fuimos a almorzar me informó que se tenía que ir a un viaje de negocios, para implementar más las energías solares y eólicas en Detroit.
Yo estuve muy ocupada en el trabajo con los contratos de nuevos escritores en la editorial, ya que oficialmente iban a hacer mis compañeros de trabajo, y los tenía que asesorar para que hicieran su trabajo bien hecho y tuvieran editores apoyándolos en el proceso.
Por otro lado estaba Caleb, que tiene un nuevo novio que su nombre es Stephan, un inglés, que lleva aquí en Estados Unidos cuatro años.
Y a Valeria, la contrataron en Victoria Secret's, durante la semana de la moda, para que maquillara a las modelos, junto a su equipo.
***
Hoy viernes, Stephan me invitó a un desfile de Victoria Secret's.
Después del trabajo, me cambié por algo más formal, botines negros, pantalón blanco con bota de campana, un body negro con una chaqueta de cuero negra, con una coleta alta y un poco de maquillaje.
Llamé un taxi le di la dirección y me encontré con Stephan, es la única persona que conozco que se ve bien con amarillo y pantalón de rayas blancas.
-Luces increíble Lucy.
-Lo mismo digo de ti Stephan.
Nos abrazamos y nos dirigimos a nuestros asientos.
-Me encanta el aspecto que tiene los colores de los reflectores, Lucy.
-Acostumbras a venir a estos desfiles Stephan.
-Sí, me encanta la moda y quiero saber las nuevas tendencias de la moda, aunque hay unas que no me encantan.
Una chica en el escenario dice que esperemos que disfrutemos de todos los diseños.
Y empiezan todas las modelos a salir.
Más tarde, me suena el celular.
-Hola, dulce Lucy.
-Hola, Dash, estoy en un desfile de moda. –digo en susurros.
-No, pensé que fueras una chica de ese estilo.
-No lo soy pero podemos hablar cuando termine, que la gente de mi alrededor me aconseja terminar la llamada.
-Acabe de llegar a mi apartamento aquí en Nueva York, después de ese viaje tan largo lo único que me falta es verte.
-Eres un romántico, pero cuando salga te llamó.
-Está bien, tendré paciencia aunque no quiera.
-Okey, adiós.
-Adiós.
Qué pena con la gente, siento algo de vergüenza pero valió la pena esa llamada.
Stephan me susurra al oído.
-¿Quién era, para que no rechazaras la llamada?
-Era Dash.
-Bien hecho por contestarle.
Al rato...
Ya estoy en el ascensor directo al apartamento de Dash, estoy muy emocionada porque hace una semana no lo veo.
Cuando el ascensor para, salgo corriendo sin importar que mis botines tienen un tacón pero no tan alto, llegue a la puerta de su apto, tocó la puerta muchas veces.
Dash abre la puerta, me abraza, inhalo su perfume.
Dash suelta el abrazo y entramos al apto, nos sentamos en el mueble largo de la sala, me quitó los botines, me recuesto junto a él.
-¿Tocaste demasiadas veces la puerta?
-Lo sé, es que te quería ver.
-Yo también.
-Si resultó bien lo de Detroit.
-Sí, el consejo acepto mi propuesta de usar este tipo de energías renovables, solo faltan unos detalles pero mi equipo se encargará de eso.
-Me alegro tanto por ti, hace unas semanas que nos conocemos y te quiero.
-Yo también, creó que tal vez fuimos un poco rápidos.
-Lo sé y a mí me encanta correr.
No pudimos evitar reír con mi comentario.
-Sabes ya nos conocemos mucho pero hay solo una cosa que no sabes de mí, incluso yo no lo recuerdo casi.
-Suena algo muy serio, pero cuando estés segura me lo puedes contar, todo a su tiempo, aunque al principio 'corrimos' al conocernos, pero esta vez sí tiene que ser con algo de paciencia, o no lo sé, tú dime. –cuando dijo corrimos, uso las manos para hacer las comillas.
-Sí, es un tema muy delicado, pero solo quería que supieras que ese algo del pasado, no me deja tranquila, lo único bueno es que hace mucho no tengo pesadillas porque eso es lo peor de esa situación.
-Ven, vamos a mi habitación.
Nos levantamos y Dash se agachó un poco y me dijo que me subiera.
Rodeé mis manos su cuello y subí a él, y cuando se puso de pie, lo rodeé con mis piernas y subimos las escaleras.
Llegamos a su habitación, me dejó en su cama doble y prendió la luz, cruce de piernas y él se sentó igual al frente mío.
-¿Quiero que seas mi novia?
-Dije que me gustaba correr, pero para mí ese paso, es importante.
-Lo entiendo y creó sabes cosas, que no le he dicho ni a mis padres ni a mi mejor amigo Ian, que por cierto él sabe la mayor parte de mis secretos y cosas.
Lo pensé mucho, mientras yo pensaba, Dash se fue a su cuarto de la ropa.
Evalué todas mis opciones.
Los pros y contras.
Él tener a alguien que te amé y te apoye a pesar de tu pasado y de quién eres, porque lo único que le importa es tu bienestar y que seas feliz a su lado.
Tal vez Dash era la persona indicada para mí, pero sigo pensándolo y no se me ocurre que decirle.
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Enamorada de un millonario [EDM #1]
RomanceLucy cuando tenía 16 años le ocurrió algo, un día en la playa, no recuerda bien lo que pasó. Un día ella conoce a Dash y se enamora de él, tal vez él le ayude a enfrentar esa parte de su pasado. Actualmente trabaja de asistente en una editorial en N...