𝐎𝐛𝐥𝐢𝐠𝐚𝐝𝐚 𝐀 𝐂𝐚𝐬𝐚𝐫𝐦𝐞 - 𝐅𝐫𝐞𝐝 𝐖𝐞𝐚𝐬𝐥𝐞𝐲 [+18]

56. inseguridades.

 
—no voy a dejar de besarte.— advirtió Fred.— vamos, al menos responde o voy a parar...— Sam se giró quedando a horcajadas de él.

—¿Me estas amenazando, Fred?— su mano derecha bajo por su torso.— pues entonces yo tampoco haré nada.— Fred soltó un suspiro quejumbroso cuando ella se movió encima.— que mala...

—mjm...

—ya... Hazlo.

—¿Hago qué?

—montarme, montame.— acarició sus caderas y suspiro.— es lo que quiero que hagas.

—me gritaste en la ducha, ¿Crees que te voy a complacer?— soltó una risa traviesa mientras negaba. Bajo hasta su oído y lo lamió para morderlo ligeramente.— estás muy equivocado Fred.— el pelirrojo bufo dando la vuelta para tenerla abajo.

—¿Ah no? Pues si tú no me montas, yo te follare.— bajo hasta su cuello paseando sus dientes para otorgar sensaciones que la hicieran delirar. Sam no se aguanto, comenzó a bajar sus dedos hasta su entrada guiada por el placer. Paseo sus dedos para mojarlos y meterlos en ella misma dando un jadeo. Quería un orgasmo ahora ya, y no demoró en comenzar a aumentar la velocidad.

—ah... Fred.— mordió su labio y él le dio una mirada furiosa al darse cuenta. Apartó su mano y se elevó tirando la toalla.

—por más que me guste ver cómo te tocas... Prefiero yo tocarte a ti.— San obtuvo lo que quería, a un Fred desesperado que la miraba con ojos oscuros de deseo. Agarró las sábanas impaciente por sentirlo embestirla de una vez.

—¡Ya métela de una vez!— gruño. Fred obedeció introduciendo su miembro cuidadosamente.— más fuerte...— se quejó.

—amor, recuerda que tenemos al bebé... Debemos ser cuidadosos.— beso sus labios y llegó hasta el fondo de ella soltando un gruñido.— tú disfruta, yo te haré sentir bien linda. Sam gimió cerrando sus ojos y dejando que su cabeza descansara en las almohadas.

Esto se sentía distinto a solo tener sexo. No es que nunca lo hicieran con amor, si no que siempre lo hacían con agresividad y rapidez... Esto se sentía cargado de pasión. Estaban siendo delicados y apreciaban cada segundo volviéndolo más íntimo.

—¡Oh Sam!— aumento ligeramente el ritmo y acarició su cabello.— abre los ojos... Mírame.— pidió sin parar mientras jadeaba.— Merlín, te amo tanto...— Sam mordió su labio ante el exquisito ritmo perfecto que llevaba Fred.— ay... ¡Oh! Te ves tan linda bajo mío.— la beso nuevamente ahogando sus gemidos.

—¡Mmm Freddie!— lo abrazo con brazos y piernas amando tenerlo encima. No dejo de besarlo hasta que necesito hablar.— más... Más rápido, por favor.— él volvió a besarla metiendo su lengua en su boca para comenzar a entrar más y más rápido.— ¡Ah, ah no pares! ¡Oh... No pares!— mordió su labio y apretó sus paredes con intención.

—¡Mmm! ¡Si sigues haciendo eso me voy a correr!— gruño. Sam acaricio su pecho y lo bajo para besarlo profundamente, sintiendo como aceleraba las embestidas haciendo que se escucharan los chasquidos de la habitación.

—¡Justo ahí! Sigue ahí.— Fred lo tomo como un aviso y pronto la vio corriéndose, fue la imagen perfecta para que él se corriera también.

—oh mierda... Ah...— jadeo con satisfacción para salirse y acostarse a su lado, al hacerlo la abrazo sonriendo.— no me vuelvas a ignorar cariño.— jadeo cerca de ella, con cansancio.

—pues no me vuelvas a gritar.— respondió con el mismo tono. Acarició su pecho totalmente encantada con su figura.

—lo hice sin querer, pero no te puedes estar bañando en la mañana con agua helada linda. Tenemos que cuidarte a ti y al bebé, entonces no debes resfriar o enfermar.— pego sus labios a su frente.— solo te quiero cuidar, sin embargo prometo no volver a gritarte...