Ahora y Siempre (Levi x Lectora)

Puedes Sentir Mi Corazón...

-Oye, despierta, dormilona- era la voz de mi papá, me movió pues yo no abría los ojos, tenía demasiado sueño y la cama estaba deliciosa – ¿qué pasa, porqué me despiertas así?- traté de tallarme los ojos y cuando los abrí por completo vi a mi padre usando su uniforme -vamos a desayunar, yo tengo que trabajar pero tú mamá se quedará todo el fin de semana contigo desempacando- dijo sonriéndome -anda, levántate y cámbiate rápido, el desayuno se va a enfriar- me dijo y salió de mi habitación, entonces me percaté del sonido que provenía del piso de abajo, al parecer mi mamá estaba de muy buen humor porque se escuchaba su voz al unísono con la de Brian Molko, estaba escuchando “Ashtray Heart” de Placebo.

Me cambié e hice mi cama lo más rápido que mi soñoliento cerebro me permitió, mi celular cayó al suelo y  la pantalla se iluminó, ¡Lo había olvidado! Había muchos mensajes de Sasha y uno de Porco, abrí el de él y solo decía “linda noche, te quiero”… “te quiero” esa frase para mí ya no aplicaba desde que lo vi   con Pieck, “hola, me quedé dormida, ten bonito día” escribí, no sabía si contestar de forma genérica o solo contestar con eso -¡______, el desayuno se va a enfriar, baja ya!- escuché a mi madre, el celular tenía poca batería así que lo envíe y conecte mi teléfono para que se cargara, en cuanto a Sasha, ya la llamaría más tarde. Cuando bajé a desayunar mi padre ya estaba preparándose para ir al trabajo – tardaste mucho, dormilona- me dijo colocándose su chaleco antibalas – perdón, papá- dije sentándome en la pequeña mesa redonda de la cocina -bueno, ya me voy, las veo en la noche- besó a mi mamá y la abrazó con fuerza, aunque ya estaba acostumbrada a sus muestras de cariño, me era un poco incómodo y prefería mirar a otro lado – te amo, cuídate mucho- escuché a mi madre, ellos eran así, nunca los había visto pelear, al contrario, se llevaban tan bien que sus únicas peleas eran por el control remoto o por cuál marca de cerveza comprarían, siempre he pensado que tienen mucha suerte porque todos los chicos que conozco solo hablan sobre las peleas que tienen sus padres y no sobre alguna estupidez que éstos hayan hecho alguna vez, pero también pienso en que mis padres se demuestran su amor cada día debido al trabajo de mi padre, ser parte de las fuerzas especiales nunca es fácil y desde que el padre de Levi había partido, ellos fueron muy consientes del peligro.

- Adiós, dormilona- mi papá me sacó de mis pensamientos cuando sentí su mano revolverme el cabello – adiós, cuídate mucho, papá- me hizo una señal con la mano y se fue -oye _____, ayer Kuchel me dijo que Levi se ofreció a ayudarnos con la casa, no sé si él te comentó algo pero llegará a las 9:30- dijo pasándome la azucarera -no me dijo nada- respondí mientras me hacía la tonta endulzando mi café -el punto es que, Kuchel y yo saldremos algunas horas, iremos al supermercado para llenar la despensa, tu papá solo compró esto para desayunar, y también aprovecharé para comprar algunas cosas para decorar las paredes, ésta casa es mucho más grande que la anterior, creo que podremos acomodar un estudio para tu papá, uno para mí y tú por fin podrás tener todas tus cosas en tu habitación, tu escritorio, tus libreros, todo ¿ Qué te parece?- me dijo mientras bebía de su café -pues creo que es una buena idea, pero ¿Porqué me dejaron la habitación más grande, mamá?-  no era una queja, de verdad era grande y linda, pero pensaba que se habían excedido con darme la habitación más grande de la casa – hija, cuando visitamos las casas, tu papá solo pensaba en darte un espacio grande y bonito, la otra casa estaba bien, pero ahora que podía darnos una casa como está no quiso escatimar y fue cuando Kuchel nos dijo que la casa de al lado estaba en venta y que era como tu papá la buscaba y cuando vio tu habitación le gustó tanto que fuera tan grande… solo quiere, queremos que estés más cómoda- mi madre dejó su taza de café y me sonrió – mi niña, eres lo que más queremos, ahora tenemos mejores oportunidades, con el ascenso de tu padre y el mío estaremos mejor, por eso te pedimos que aplicaras a la universidad donde Levi estudia, sabemos que podemos confiar en ti- me dijo con una lágrima cayendo por su mejilla y yo la abracé.