Luke ya debería estar acostumbrado a despertar mareado y sin saber exactamente dónde se encuentra y con quién. Hace más de dos meses que ha estado viviendo de esa manera.
No importa si es con algún chico o alguna chica, lo que el busca es poder calamar ese dolor que permanece en si pecho día y noche, aquel dolor que aún no sabe bien si existe por la ausencia de aquella mujer que lo dejó por otro o por aquel que lo ahora vive de manera feliz sin él.
Sea cuál sea el motivo de ese dolor, no le gusta, sufrir por un amor es algo que no quiere pasar nunca más. Es por eso que solo busca aventuras de una noche.
Pero al parecer el universo conspira en su contra, al despertar se encontró con la persona que creyó no volver a ver fuera de un "horario" laboral.
- ¿Pero qué mierda? - Cuestiona colocando una de sus manos en su cabeza, esperando a que aquel dolor y mareo desaparezcan por aquel movimiento repentino que ejecutó al momento de sentarse en aquella cama.
- ¡Vaya hasta que te dignas a despertar! - Michael menciona con notable sarcasmo.
Luke sigue sin creer que Michael, aquel chico que conoció en su época de secundaria este frente a él.
- ¿Michael?
- ¡No, que va! ¡Yo no soy Michael! - Menciona el ex teñido de manera sarcástica. - ¡Soy tu ángel de la guardia protegiendote de que no hagas una idiotez!
Luke seguía procesando la información, pues, no es la primera vez que ve a Michael en sus sueños o que su mete alcoholizada le juega una mala broma y lo proyecta en todos lados. Pero aquellos sueños o "encuentros" en aquellos bares, ambos empiezan a besar y terminan compartiendo una cama, abrazados y demostrandose ese amor incondicional que ambos tenían para darse.
- ¿Eso fue sarcasmo? - Cuestiona confundido.
- ¡Claro que fue sarcasmo rubio idiota!
Michael con su poca paciencia saliendo a flote, le lanzó la ropa limpia que traía en sus manos.
- Ve a darte una ducha, después ven a desayunar, alcohólico idiota.
- Pero...
- Pero nada y más vale que sea rápido, tengo cosas más importantes que hacer que cuidar de un loco por el alcohol y sustancias ilegales.
Michael salió de su habitación y Luke sin pensarlo dos veces se puso de pie de aquella cama.
Con pasos torpes se dirigió al baño, dispuesto a darse una relajante ducha e intentar recordad que ocurrió la noche anterior.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Luke llevaba meses sintiéndose solo, abandonado y sin ganas de seguir con su vida. Cada noche de cada maldito día, salía a pasear por ahí, y se adentraba a los bares de la zona en la cual se encontraba.
Todo porque necesita con desesperación el amor de alguien, no le importa si es solo una noche y si solo busca sexo casual, él solo quiere sentirse querido por lo menos un segundo de su vida.
