03. Eyes To The Skies

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Los días para Michael se han vuelto largos, entre los últimos detalles de la gira, hasta las ideas que tiene para las canciones que debe tener el álbum.

Después de aquella reunión, a la cual, Luke nunca llegó, les informaron que deben tener listo su segundo álbum de estudio en menos de un año.

Cosa que no les agrado, puesto que en dos semanas inician con los últimos conciertos de su gira, que ya tenían iniciada. Y ahora deben elaborar un album en medio de este caos.

Hoy, al igual que ayer lleva sentado por horas en la sala, tiene hojas por todos lados, por más que intenta concentrarse no puede, los recuerdos los atormentan cada vez que quiere escribir algo.

El teñido cerro los ojos, necesita relajarse un poco, y dejar de pensar en Luke.

— Debe ser una jodida broma. - La puerta fue tocado dos veces.

Michael se puso de pie y abrió la puerta.

— ¿Qué? - Cuestiona asiendose a un lado para dejar pasar a Crystal.

— Tan lindo como siempre.

Michael cerró la puerta, acomodo los papeles que tenía regados y los llevo a su habitación.

— ¿Estabas ocupado? - Cuestiona Crystal apenada desde la pequeña sala .

— En realidad no. - Michael regresó con su visita a la sala. - Toma asiento.

Crystal obedeció.

— Gracias. - Dejo su bolsa en la mesita que adorna el lugar. - ¿Si sabes a qué vine, cierto?

— En realidad no.

Crystal negó de manera divertida.

— Quiero saber cómo sigues. - Menciona con una linda sonrisa.

— ¿Quieres la verdad o la mentira?

— La verdad.

— Lo extraño mucho... - Sonríe de manera triste. - Y eso me duele tanto.

Crystal lo observó molesta.

— ¡Michael por Dios! - Se puso de pie. - Vales más, Luke es el que debería llorar por ti, no al revés.

— ¿Y qué pretendes que haga? Yo lo amo... - Menciona cansado.

Volvió a tomar asiento junto al teñido.

— No sabes lo que es el amor Clifford, aún eres jóven, aún son jóvenes. - Menciona tomando la mano de Michael.

— Estoy cien por ciento seguro que lo amo... De eso no tengo duda.

— Tal vez no es amor, sino dependencia a él. - Michael la observa a los ojos. - Piénsalo, has convivido con el por años.

Michael permaneció en silencio por unos segundos.

— Yo sé que lo que te diré sonara duró, pero mientras tú lloras, Luke se está acostando con alguien más.

— ¿Y que pretendes que haga? - Habla dolido. - Sabes que me cuesta socializar con otras personas. Yo no puedo salir y revolcarme con el primero que vea.

— No te estoy pidiendo que hagas eso idiota. - La mujer le pegó un pequeño golpe en la cabeza.

— ¿A no? - Cuestiona confundido.

— No, yo no quiero que te conviertas en el típico fuckboy rompecorazones que no cree en el amor porque el amor de su vida le rompió el corazón.  - Hace una mueca de desagrado. - Lo que yo quiero es que sigas siendo tu mismo y le demuestres a Luke que puedes ser feliz sin él.

Letting GoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora