CAPÍTULO 63: LIKE I'M GONNA LOSE YOU

539 40 3
                                    

No sabía en qué momento había ocurrido, Camila había perdido absolutamente la noción de sí misma, del tiempo y de cualquier cosa que no fuera lo que estaba sintiendo en ese momento.

Shawn se había precipitado a lo más profundo de sus pensamientos y ahora no era más que un lejano punto borroso en algún lugar recóndito de la memoria. En aquel momento, ni siquiera existía.

Lo que sí existía era el tacto de esa piel que tanto había anhelado. Lauren y ella se encontraban en la habitación de la cantante, bañadas por la semioscuridad y enredadas en un torbellino de húmeda lujuria que nublaba todos sus pensamientos y sentidos. Las manos de Camila simplemente no podía parar, acariciaban y arañaban cada centímetro del cuerpo de la otra, cegada por un deseo que había despertado después de tanto tiempo y que había regresado con tanta fuerza que no podía ser controlado por ninguna intención consciente. En aquel momento, nadie podría decir quien llevaba la iniciativa porque aquella escena había sido tan deseada por ambas que se hallaban igual de hambrientas y necesitadas.

Lauren la besaba como si quisiera bebérsela y en cuestión de segundos, despojó a Camila de su camiseta y su top deportivo.

Jadeando, aún de pie en la habitación, Lauren gimoteó desesperada cuando se agachó a saborear de sus pechos, dando a cada uno la atención necesaria, encontrando un resquicio de calma en aquel tsunami.

-Dios... eres tan deliciosa-susurró la arquitecta con un hilo de voz.

Camila sujetó fimemente su cabeza disfrutando del contacto, de la erección de sus pezones como respuesta, una metáfora de todo su cuerpo.

Lauren tardó solo dos segundos en desabrochar los pantalones de Camila e introducir la mano bajo su ropa interior, sintiendo la humedad al instante y besándola con más efusividad ante el estremecimiento irremediable de la cantante.

-Joder-maldijo Camila y emitió un gemido que se amortiguó en la boca de la arquitecta.

La cantante sintió como sus piernas se aflojaban y tiró de Lauren junto a ella, cayendo las dos en la cama.

Lauren se deshizo de su ropa rápidamente, sin dejar de mirarse a los ojos, con el deseo encendido e implacable.

Camila sentía que se quedaba sin aire, estaba intoxicada y mareada, sintiendo cómo Lauren perdía la cordura y temblaba como una hoja sobre ella. La excitación era ineludible, pero también la emoción de aquel momento tan esperado. No podían fingir que aquello no sobrepasaba su propia sed. Era como cumplir un sueño que creían perdido.

-Te amo-susurró Lauren y Camila aprovechó su debilidad para sujetarla y volver las tornas, colocándose sobre ella.

-¿Te estás viniendo abajo?-Se burló Camila-. Pensaba que ibas a recordarme que eres una tigresa en la cama.

Lauren rio aún jadeando.

-Quiero que sea perfecto-explicó-. Por eso estoy tan nerviosa.

-Yo también lo estoy-admitió Camila-. Pero estoy demasiado caliente para pensar en eso.

Lauren hizo una mueca burlona volviendo a besarla y fue cuestión de un instante que la llama se encendiera de nuevo.

Aprovechando la postura, Camila mordisqueó su cuello con lujuria, dejando un rastro de saliva hasta sus pechos, recorriendo con hambre la piel de su abdomen... deseaba tanto a esa mujer que sentía que no podía tener suficiente.

No había tiempo que perder, ni tampoco era momento de juegos, la excitación estaba a tal nivel que Camila necesitó romper la última barrera y saborear la humedad de Lauren, enterrando sus dedos y su lengua en lo más profundo, escuchando los gemidos que emitía Lauren, complemente perdida.

Little Havana (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora