Little Havana (Camren)

CAPÍTULO 37: START OVER

(Flasback 1 año antes)

Sinu había preparado emparedados y Lauren había disfrutado comiendo con deleite, es que le encantaba la comida que se preparaba en la casa de los Cabello y si por ella fuera lo nombraría el mejor lugar para comer en Miami.

Pero no todo era la comida. La charla distendida con Alejandro sobre cualquier tema social, las risas de Sofía, lo cómoda que le hacían sentir en aquella enorme casa...y Camila. ¿Cómo podía eludir su presencia? Desde que meses atrás había regresado a Miami con los sueños rotos Lauren había hecho lo imposible por repararlos. Su cercanía había traído consuelo para las dos, para el futuro de Camila y para el alma de Lauren, que respiraba de su paz.

Lauren no olvidaba que Camila aún mantenía en pie esa extraña relación a distancia con Nicole, de quien le había asegurado que apenas sabía nada pero que, sin formalizar nada, seguía siendo algo así como un interés romántico mutuo que mantenía viva una relación amistosa a distancia que pasaba los límites de la amistad cuando estaban juntas. Un lio, pero así era.

Los celos no estaban justificados, más cuando Lauren consolidaba su noviazgo con Melanie cada día más. En cambio era imposible que ese malestar no apareciera, sobre todo en momentos como aquel donde las miradas robaban todo el protagonismo y sus ojos se escabullían furtivos en los momentos menos esperados. Un roce de manos, esa forma de morderse el labio inferior y el modo en que, sin darse cuenta o no, Camila movía las caderas al caminar. La provocación estaba servida.

.....

Al día siguiente Camila recibió una noticia inesperada, Nicole había vuelto después de ocho meses en Europa y en cuanto había pisado suelo estadounidense había contactado con ella para verse.

Camila ni siquiera había pensado en una excusa, estaba claro que a pesar del alejamiento y de todos los cambios en su vida, debía encontrarse con Nicole, nunca habían dado por terminada su relación a pesar de que la distancia y la falta de contacto hubieran dejado claro el mensaje.

Nicole no había sido una novia atenta, en los momentos de pánico y dolor que había atravesado Camila el consuelo que le ofrecía la modelo brillaba por su ausencia. Ni lo tenía ni lo esperaba pero es que la de ellas siempre fue una relación particular en la que cada cual tenía su vida. Nicole parecía tener muy claro este punto ya que para ella, el tiempo que pasaba trabajando era algo en lo que ponía el cien por cien de su energía y en esos momentos todo contacto con el mundo exterior quedaba totalmente anulado.

Camila se vio atraída en un principio por su modo de ver las cosas, pero definitivamente no quería un tipo de conexión romántica con nadie bajo esos acuerdos. Servir de pareja solamente cuando coincidían en un mismo espacio-tiempo y ser unas completas desconocidas cuando su trabajo las alejaba.

—Aún no me creo que estemos aquí, juntas por fin—sonrió la guapísima chica mientras se recostaba en la cama de la bonita habitación de hotel en la que se iba a hospedar durante su breve estancia en Miami.

Camila la miró, dudosa, de pie frente a la cama sin saber qué hacer. Tenían que hablar, estaba claro, pero algo en la energía de Nicole le decía que no estaba precisamente preocupada por su futuro como pareja. Desde que se habían encontrado la chica había mostrado interés en intimar y no precisamente en su lado sensible.