Amor acosador [Jin (BTS) y Tu]

De sueños y guerra

TaeHyung

De camino a casa, mi corazón seguía revoloteando. Con la mano continue dandome pequeños golpes sobre el pecho.

- Por dios TaeHyung, controlate -sacudí la cabeza- esto esta mal, esta muy mal.

Podría simplemente engañarme y decirme a mi mismo "es una especie de taquicardia, Tae, algo anda mal en ti, visita a un Doctor". Pretender que esto no pasó, pretender que no me di cuenta de los sentimientos que estaban creciendo en mi interior.

Sentimientos por Noona. Eso no era todo, Noona tenía novio y su novio es uno de mis mejores amigo de la vida.

- Ya sé -mi mente se iluminó- alcohol, necesito un poco de alcochol.

Generalmente al beber alcohol, mi cuerpo se relaja y de un momento a otro, el sueño se apodera de mi.

- Necesito algo fuerte, necesito dormir y olvidarme de esto.

Hice una breve parada al supermercado. Tome una canastilla y me dirigí directo al pasillo de bebidas alcohólicas.

Tome 6 botellas de soju, definitivamente no me las terminaría, o tal ves sí. Las coloque de una en una en la canastilla.

- Claro que no -me respondí el voz alta y me quede observando las botellas en la canasta por unos segundos-.

- Problemas de amor ¿no? -dijo un chico que se encontraba a un lado de mi, no me percate de su llegada- te entiendo -comento mientras tomaba 4 botellas de soju y las colocaba en su canasta-.

- ¿Qué? -respondí y negue con la cabeza- no es eso -solté una risilla nerviosa-.

- No tenemos por que sentirnos avergonzados, nosotros no tenemos poder sobre nuestros necios corazones, somos solo víctimas en esto ¿no crees? -dió una gran suspiro. Al parecer el chico pasaba por algo similar-.

No respondí a su pregunta, agache un poco la mirada.

El extraño a mi lado siguió su camino, al pasar junto a mi, me dió una pequeña palmada en la espalda.

- ¡Ánimo! Por hoy solo embriaguemonos y vayamos a dormir.

Le dedique una sonrisa triste y asentí.

Me dirigí a la caja a pagar, la cajera al ver mis productos me ofreció un producto para la resaca.

- No, gracias, no lo merezco -respondí-.

La cajera se que quedo viendo extraño. Reflexioné por un segundo.

- Mejor si, deme 2, por favor.

Camine hacia la puerta y justo antes de salir escuche como la cajera decía.

- Hay estos chicos de hoy en día, tan guapos y tan depresivos.

Al llegar a casa, tome una ducha con agua caliente. Me encontraba lavando mi cabello, cuando un poco de espuma de shampoo recorrió mi frente y entro en mi ojo derecho. El ardor se apodero de mi ojo y lo enjuague.

- Mal augurio.

Terminé de ducharme. Al ver mi rostro en el espejo, mi ojo estaba irritado, con un poco enrojecimiento.

Me puse una pijama ligera y me encaminé a la cocina. Tome dos botellas, dejé en el refrigerador las 4 restantes y caminé a la sala. Tome el control de la televisión y la encendí.

Abrí una de las botellas y le di un gran trago, mientras cambiaba los canales de la televisión.

- ¡Ah ktss! -hice una mueca- muy bueno, muy bueno.