De opción múltiple

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Un mes y medio después.

- Hoy fue un gran día -Jin suspiró- en el trabajo y en la escuela fue un gran día.

Estábamos en la banca, nuestra banca, tomando el aire y bebiendo un café, un viernes por la noche.

- Y se pone aún mejor -estábamos abrazados, el me sostenía por un costado-.

- ¿Por qué? ¿Qué sucedió? -estaba curiosa y realmente me fascinaba escuchar a Jin-.

- No es que sucedió -veía hacia arriba, hacia los árboles, a la Luna y las estrellas, la imagen de ellas filtrada a través de las hojas- es: que esta sucediendo.

Me soltó y se paró de mi lado, camino y rodeo la banca, hasta quedar justo detrás de mi. Se agachó y me abrazó desde atrás. Tenía su rostro justo a un lado del mío. Su aliento cálido.

- Estoy aquí, vivo, con la persona que amo, en mi lugar favorito, hay estrellas en el cielo y la Luna resplandece, los árboles nos rodean, el viento sopla y hace que tu hermoso cabello se mueva, te estoy abrazando, nuestros corazones laten, hay aire en nuestros pulmones... ¿Qué más le puedo pedir a la vida? todo esto es tan perfecto.

Gire mi rostro y el también lo hizo.

- Bésame -le pedí y toque su rostro-.

- Lo iba a hacer aunque no lo pudieras -me dedico una sonrisa traviesa-.

Un beso casto se convirtió en un largo beso. Bocas que no se quieren separar la una de la otra.

Jin en un momento me abrazó con más fuerza, tenía sus brazos rodeando mi abdomen, justo debajo de mi pecho.
Poco a poco me comenzó a jalar hacia atrás, hasta que me hubo bajado de la banca. Se separó un instante y me giró hacia el.

- Vamos -su voz ronca- vamos a un lugar más escondido -sugirió, sus ojos se veían más oscuros-.

<<Que tentador>>

Lo tome por la mano y lo jale hasta llegar a un lugar seguro de vistas curiosas. Detrás de un gran árbol. Escogí en más ancho de tronco. Mi respiración estaba agitada, la de el también. Ya antes nos habíamos ocultado detrás de árboles grandes.

- ¿Aquí esta bie... -no me dio tiempo de terminar la pregunta-.

Antes de siquiera reaccionar, mi cuerpo ya se encontraba atrapado entre el árbol y Jin. Jin subió una de sus manos y la puso detrás de mi cabeza, para evitar que me golpeara en el. Mi cabeza daba vueltas y el beso aumentaba de intensidad y deseo. Sin pensarlo mis manos abrieron la chamarra de Jin, se metieron dentro de su playera, descendieron por su cintura y se metieron para acariciar la piel de su espalda, mi tacto frío hizo que Jin se estremeciera un poco, su otra mano se encontraba acariciando la piel sobre mi columna con sus dedos.

Lentamente Jin fue bajando el ritmo, pasando de mis labios a mi cuello, y de regreso.

Al separar sus labios por completo, me abrazó con fuerza.

- Esto es muy peligroso -con esa voz varonil y sus ojos negros-.

Baje mis manos lentamente de su espalda y con ellas lo tome por los jeans para acercarlo más a mi. En un modo travieso porque quería sentirlo contra mi.

- Quédate en mi casa hoy -lo bese lentamente, hice una pausa- mañana no hay trabajo ni escuela -le susurre al oído a la vez que regresaba a sus labios-.

Me detuve y con una de mis manos comencé a acomodar su cabello.

- Pero no insistas -bromeó Jin- corramos hacia tu casa -alzó un dedo al cielo- ahora mismo -hizo una pausa- mejor caminemos rápido, correr se ve muy sospechoso. Vamos, no hay tiempo que perder.

Amor acosador [Jin (BTS) y Tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora