Salgo de baño y esta escribiendo en su libreta como siempre.
- ¿porque sonríes?
- sonrió? - no me había percatado que sonrió
- si sonríes
- me acuerdo de nuestro beso en la colina
- nuestro primer beso?
-si, - para ella ese fue nuestro primer beso, fue mejor asi.
Nuestras noches siguen igual de apasionadas eh intentado terminar fuera de ella pero siempre fallo.
Los días pasan entre ensayos, mi nueva vida de casado casi nos mudamos y llego la señora Elroy, no ha puesto un pie en el departamento pero Candy va todos los días a su mansion y un chófer la regresa al departamento, hoy me toca ir nos invito a cenar.
Llego y todo la velada transcurre en normalidad, claro que cuando Candy va al baño el ambiente se vuelve pesado y la señora es igual de directa que el Duque me desespera un poco.
- me dice Candy que pronto se cambiaran a su nueva casa.
- asi es
- podrian quedarse aqui mientras tanto.
- nos mudamos en pocos días, agradezco su ofrecimiento
-asi estaría mas cómoda Candy
- en el departamento también esta cómoda
Clava su mirada en mi.
- espero que este tratando como se debe a Candy y la acompañe a sus terapias
- le doy un buen trato a mi esposa Señora Elroy.
El dia que nos cambiamos de casa, parecía ama y señora dirigiendo a todo el mundo, no deja que Candy haga nada, aunque la pecosa es activa, veo como sede ante su tia en muchas ocasiones eh podido ver el lazo del que me hablo Albert, también Candy me ha hablado de como ha sido con ella desde que abrio los ojos después del accidente, siempre estaba cuidándola, no se movia de un sofá hasta que era la noche y tenía que irse a, dormir, le dio de comer en la boca como niña pequeña, estuvo con ella en sus citas médicas paso todos los días platicando todo lo que sabia de los años que Candy no recordaba y como se volvieron cercanas, solo por el cariño que sé tienen controlo mis respuestas ante la señora Elroy.
Cuando se marcha de NY la señora Elroy veo que mi pecosa queda, afectada por su partida se que se esta haciendo la fuerte, pero veo en sus ojos que esta triste, la abrazo por atrás y le doy un beso en el hombro,- cuando pueda te llevare a que la visites y también a tus madres.
-si gracias
Ya no pudo controlar sus lagrimas, beso su rostro probando su cada una de sus lágrimas, me da pesar de que pase tanto tiempo sola, Eleanor esta de gira y ella es nueva en la ciudad.
- me voy se me hace tarde, el castaño se acerca y le da beso a su pecosa.
- suerte, cuídate mucho.
Apesar de que tenían servidumbre y platicaba con ellos, la pecosa se sentía un tanto perdida en unos meses todo cambió de Chicago a NY.
Caminó hacia la terraza a paso lento con la ayuda de sus muletas se sentó y abrio su libreta que nunca dejaba fue a la primer hoja y vio un dibujo de unos ojos azul zafiro con vetas verdes cerró los ojos y se sumergió en sus recuerdos.
INICIÓ DEL RECUERDOS
Le dolia todo el cuerpo cuando pudo abrir bien sus ojos se encontraba en un bello cuarto, que no reconoció una angustia empezó aparecer en su pecho, cuando giro la cara se encontró a la señora Elroy con cara de preocupación, todo sonaba tan raro, ella habia sido adoptada por el señor William Albert Ardlay y era el mismo Albert que la habia salvado de ahogarse, sus últimos recuerdos eran cuando trabajo con los Legan, Anthony y Stear se habían muerto, Archie estaba casado con su hermana Annie. Le contaban lo que había sido de su vida con el afán de que empezada a recordar pero nada.
Cuando se miro espejo no podia creer lo que veia, ya no era una niña, era una mujer sus facciones no habían cambiado, pero si su cuerpo,seguía siendo atolondrada pero ya pensaba igual que en sus últimos recuerdos, tambien descubrió el conocimiento que tenía en medicina sin recordar las clases que tuvo en enfermería, sabía un poco de Frances y tocaba piano, de este si tenia un recuerdo veian sus manos en las teclas y veía otras dedos delgados manos grandes.
La tía abuela Elroy le regalo una libreta para que anotara algún recuerdo o algo importante de lo que ellos le platicaran, todo con la finalidad de ayudarla a que su memoria regrese.
Ella empezó a dibujar esos ojos que aparecían en sus sueños, aveces tristes rodeados de niebla, aveces enojados, divertidos, calmados, no podía dejar de pensar a quien le pertenecían, cada mañana al abrir los ojos su mente traía esa visión y un pinchazo en su corazón sentia no entendía.
Conocío a Paty una compañera del colegio muy amable se sintió comoda y pudo entablar una amistad con ellas.
Cada dia se sentia mejor y se desesperaba estar sentada en la silla ruedas. Sus madres fueron de visita pocos días no podían descuidar a los niños, la tía abuela era muy buena con ella, sentía el cariño que le transmitía, para ella fue fácil encariñarse con la anciana. Y la extraño cuando se marchó a Florida.
Un dia un hombre solicitó su entrevistarse con ella ya que no se encontraba Albert, cuando entró al salón vio a un hombre muy alto, cabello castaño lo llevaba corto, hombros anchos y cuando volteo a verla sintió una extraña sensación en todo su cuerpo, se le hacia conocido pero no podía decir si realmente lo conocía. Cuando lo vi caminar hacia ella pudo distinguir sus facciones era un hombre muy atractivo, tenia pestañas tupidas, nariz recta, labios carnosos, barba partida y sus ojos se parecían a los que tantas veces dibujo en su libreta, tenía que verlo de mas cerca para ver si eran los mismos.
Dios cuando el agacho los pude ver eran los mismos mi corazón late con fuerza me siento nerviosa estar frente a el, pero me habla de Candy parece que me conoce, su voz es grave pero se volvió dulce cuando me pregunta que me paso. Si nos conocemos dice que desde el colegio.
Llega el señor Albert siento un poco apoyo, estar a solas con el me pone nerviosa no logro acomodar mis ideas tiene una mirada muy penetrante. Tengo que controlarme cuando dicen que se quedará aqui encuentro el pretexto perfecto para escapar.
- ire a pedir que bajen su equipaje y preparen su habitación ¿esta bien bien señor Albert?
- Candy te eh dicho que me digas Bert
- perdón señor Bert
Salimos de la estancia y dirijo por un pasillo, mi corazón sigue latiendo fuerte como si fuera a salirse de mi pecho, les digo que yo puedo ir sola.
- Candy es por el otro pasillo - me dice Albert
- ah perdon me equivoque - que pena, espero que no hayan notado mi perturbación, Terry me pone muy nerviosa.
Cuándo regreso con ellos estan en el estudio, creo que ya estoy mas tranquila, el señor Albert me pide que lo lleve al jardín, bueno el me lleva, empuja mi silla de ruedas,empezamos ha hablar de las flores de Anthony, de Stear. Pero cuando estamos en la fuente empieza ha hablar de mis pecas y me dice unos apodos que el solía decirme, no me gustan, pero el se divierte a mis costillas, al principio me empieza a molestar, pero sus ojos se ven alegres y si risa me cautiva, quiero que me cuente todo lo que el sabe de mi o lo que hemos vividos juntos, tendré que controlar mis emociones por que no puedo dejar de ver sus ojos y apesar de ponerme en este estado quiero compartir más tiempo con el.
CONTINUARÁ...
ESPERO QUE LES ESTE GUSTANDO NO OLVIDEN VOTAR 😘😘😘
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Recuerda
FanfictionYa pasaron 4 años de la triste separación que tuvieron en las escaleras, ahora Terry fue obligado a casarse por presión y para no que su esposa sea señalada. Esta historia es de Terry y Candy