"Mi Gran Historia De Amor" (Terminado)

Invitada

Victor

-¿Y?, ¿cual será el recorrido de hoy señor guía turístico?

Sonrio. -Dimelo tú, ¿quieres ir a algún lugar?

-La verdad quería recorrer el centro de la ciudad, ese día solo recorrí el bazar y era por estar perdida

-Entonces no cuenta. —Le digo

-Exacto, ¿vamos?.

Asiento, comenzamos a caminar para ir hasta el bazar.

-Hay muchas tiendas.

-Demasiadas.

Ve alrededor.

-Aquel día creí que estarías en una tienda de ropa.

-Pues..no te alejaste mucho, es algo que habría hecho.

Sonrio. -¿No tuviste problemas con el hotel?

-La verdad como había dicho es algo complicado, tenía pensado irme mañana pero debido a el problema con la reservación debo irme esta noche.

-¿Que?. —Frunzo el ceño..— Pero puedo solucionarlo

-Lo dudo, ya te había comentado que había pagado por adelantado pero como nose con exactitud la moneda de este país pagué solo por hoy y no vale la pena pagar solo por hasta mañana.

-Si..en cuanto a eso. —Bajo la mirada.

-¿Pasó algo?

-Quería pedirte algo,..más bien es un trato.

-¿a si? ¿Y cual es ese trato?

-Se que debes irte pero..quería decir..

-¿Si?.

-Quería.., quería pedirte si podrías quedarte unos días más.

Frunce el ceño -¿Para que?

-Bueno. —Bajo la mirada.— Piensalo..tendríamos más tiempo y así.. recorreriamos la ciudad además de..divertirnos

-Mm..suena prometedor, una propuesta interesante.

-¿Lo harás?

-..Me encantaría..pero ya te dije mi problema, es como si no escucharas.

-Eso no es ningún problema

Alza una ceja.

-Puedes quedarte conmigo.

-¿Contigo?, ¿donde?

-En mi casa.

Alza las cejas sorprendida. -Vaya.., pues es algo..raro

-No lo es, debo atenderte como atendería a cualquier amigo, después de todo soy tu guía turístico ¿no?.

Sonrie. -Claro,..amigo. —Dice divertida.

Sonrio. -Esta hecho entonces.

Recorrimos las tiendas, estaba impresionada con la ropa del lugar.

Me llevaba de un puesto a otro emocionada

-Oh, ¡mira!.

Señala la pequeña escultura de madera.

-Son búhos, ¿te gustan?

-Pues es cosa de ver sus detalles, están hermosos, además mira su adorno.

-¿Cuanto?. —Le digo al vendedor.

-cincuenta

-Demelo porfavor.

-¿Estas loco?, no tienes que hacerlo.