DOS.

2.4K 335 17
                                    

Irina miró al cielo buscando ayuda de una fuerza divina que nunca aparecerá

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Irina miró al cielo buscando ayuda de una fuerza divina que nunca aparecerá. Retuvo las lágrimas mientras cerraba los ojos y los apretaba al igual que cernía sus manos sobre las cuchillas. Podía sentir la brisa bañar su rostro y luego la ventisca de aire caliente. Al abrir sus cuencas percibió la cruda realidad. Fue testigo de todo el caos que habían causado. ¿Es esto lo que realmente quería? Se preguntó mientras examinó los restos de la humanidad. No, definitivamente no es lo que ella deseaba, pero es demasiado tarde para dar marcha atrás. Cuando lo buscó ya no estaba a su lado, solo encontró sangre en sus manos y un enorme vacío en su pecho. ¡Vuelve, vuelve, vuelve! Intentó gritar una y otra vez, pero no hubo manera que pudiera hacerlo. Su voz fue débil, se quedó atorada en su garganta y solo optó por tirarse al suelo a llorar antes de aceptar lo que había sucedido.

・.━━━━━━━━━━━━━━━━━━━━.・


Los huesos de sus dedos crugieron mientras se preparaba para realizar la próxima tarea. Miró a cada uno de sus compañeros, quienes apartaron la mirada de inmediato. Gruñó demostrando su molestia. Siempre era lo mismo, podía sentir sus ojos curiosos sobre ella, podía escuchar los susurros rondando cerca de ella, incluso había sido llamada "bestia salvaje", pero cuando los enfrentaba, los cobardes apartaban la vista y huían con miedo.

Irina miró de reojo a su compañero de la izquierda. Ella estaba por terminar de armar aquel rifle que le dieron, pero Zeke parecía perdido mirando las piezas con visible confusión. Todos los ojos estaban puestos en él presionándolo y poniéndolo más nervioso de lo que ya estaba.

La pelinegra rodó los ojos con cansancio, verlo fracasar una y otra vez se volvía tedioso. Además, no disfrutaba de la humillación ajena, la aborrecía porque ella podía vivirla a diario. Nadie merecía sufrir algo así, su sentido de empatía le impidió no ayudarlo. Y tras meditarlo por breves segundos, se aclaró la garganta atrayendo su atención. Cuando estuvo segura desarmó la escopeta con mucha agilidad, sorprendiendo al rubio, quien extendió sus ojos.

— Sígueme. —susurró demasiado bajo pasando desaparecida a los oídos de Magath. Tomó un fuerte respiro y con mucha paciencia empezó de nuevo mostrándole como debía hacerlo.

Zeke era muy inteligente y comprendía las cosas de inmediato. Absorbió toda la información siguiendo paso a paso las maniobras que realizaba la pelinegra. Ella era de pocas palabras, nunca la había visto interactuar con los demás y era comprensible, también era víctima de la crueldad de los demás niños.

Podía compararla con él, pero sería un insulto para ella. Irina destacaba entre los demás. Era un brillante diamante que no necesita pulirse, nació con el don de sobresalir del resto. Zeke no podía decir lo mismo de él, su única virtud era tener sangre real, pero no contaba mientras lo mantuviera en secreto. Podía ver como todos los niños mostraban un buen rendimiento y se esforzaban para convertirse en guerreros y ciudadanos honorables, pero parecía ser el único que no daba la talla.

𝐖𝐀𝐑𝐑𝐈𝐎𝐑𝐒 ┇ ❛𝑍𝑒𝑘𝑒 𝐽𝑎𝑒𝑔𝑒𝑟; 𝐿𝑒𝑣𝑖 𝐴𝑐𝑘𝑒𝑟𝑚𝑎𝑛 ❜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora