BloodMoon (Twice Au)

𝕹𝖊𝖜 𝕯𝖆𝖜𝖓

—𝕯𝖆𝖍𝖞𝖚𝖓—

Han tenido que pasar demasiadas cosas desde que llegué a este mundo aparentemente diferente al que pertenezco, momentos y sucesos que me hicieron sentir pequeña e indefensa, con el pasar del tiempo fui capaz de controlar mi miedo ¿El problema? Cuando entré a este plano eso regresó

¿Era este el mundo en el que vivía? ¿Por qué apenas habían plantas? Todo eran enormes edificios con ventanas, tragué saliva, regresando mi vista a mi misma, que entraba a una casa

Si estos eran mis recuerdos ocultos, entonces podría saber todo sobre mi pasado. Según Jennie eso despertaría en mi nuevos poderes, me limité a seguir a la Dahyun rubia y deprimida que abría la puerta

Mis pies se elevaron del suelo por un par de centimetros, casi como si yo fuese un fantasma, me miré las manos, todo el cuerpo, tenebrosa, pero dispuesta a descubrir quien fui

Ella no se dio cuenta de mi presencia, entré a su aparente casa, todo era un desastre incluyendome, soltó su mochila en el piso y suspiró. El sitio era grande, no vivía sola

—Hey—Susurré en su oído, pero no respondió, no podía escucharme, cayó en su cama boca abajo—¡Tu!—

Lloraba, sea lo que sea que me hizo morir, este parecía ser el comienzo de mis problemas. Por el momento solo me quedé viendo su cuerpo, aun no se veía tan desarrollada como lo soy ¿Cuánto tiempo sufrí de esa manera?

Demasiado diría, el ambiente empezó a cambiar, la cama desapareció y con eso la habitación, ahora estaba en la calle caminando, con el mismo rostro de depresión, hasta que alguien desconocido para mi apareció

Era casi como ver a otra persona, mi otra yo sonrió con mucha amplitud y alegría al verla

—Kim ¿Qué haces por aquí?—Le preguntó la persona

—Ah yo...yo iba a...—Tartamudeó, metiendo sus manos en los bolsillos

—¿Es por aquí por donde vas todos los días que te escapas de las clases?—

—¡No me escapo! Mis padres me han inscrito en artes marciales y ahora este es mi nuevo horario—

—¡De verdad que haces muchas cosas!—

—A ellos no les parecen suficientes...—Respondió bajando la mirada

—¿Y si no asistes qué?—

—Por favor, no digas tonterías de ese estilo. Nos veremos en clases—Fue entonces que se despidió y siguió de largo, continué persiguiendola sin que pudiera verme

Escondida en una esquina sacó un pequeño envase blanco, al principio se me hizo dificil saber de que se trataban esas esferas blancas que me metía a la boca, despues me di cuenta de que luego de tomarlas, estaba mucho mas tranquila y relajada, como nueva

Pude ver mi día a día en estas epocas con extremo detalle, por las mañanas asistía a un dojo de artes marciales, luego al llegar a casa recibía clases privadas, habían días que asistía a otras clases como catecismo, de idioma tailandés, variantes del chino, japonés, nunca había descanso, terminaba una actividad y automaticamente mis padres me llevaban a otra, mi rostro desesperado y estresado lo decía todo, yo no quería estar en esos sitios

¡Lo recordaba! Esos idiomas los hablaba antes de si quiera saberlos a excepción del japonés, el catecismo, recuerdo haberle dicho a Sana haber escuchado de un tal Jesucristo, una vez vi eso, me di cuenta de las razones por lo que recordaba cosas tan especificas

¿Habían momentos felices o libres? Los podría contar con los dedos si no incluyera los descansos de una hora diarios antes de continuar con mi "formación", que se acompañaba de constantes colapsos e intentos de acabar con mi vida