11. Mi Suerte La Use En Encontrarte A Tí.

99 13 0
                                    

🎶🎶🎵🎶🎵🎶🎶🎵🎶

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

🎶🎶🎵🎶🎵🎶🎶🎵🎶

Nota: La historia a continuación contiene escenas de carácter erotico, sexual o +18, si no cuentas con la edad suficiente, puedes obviar la mayor parte del capítulo, hasta después de la segunda imagen; donde puedes retomar la historia con tranquilidad.
Gracias por leer🥰

 🎶🎶🎵🎶🎶🎵🎶🎶🎵

Los vínculos de amor y atracción entre esta pareja se hacían cada vez más evidentes con el paso de cada día. 

Las noches se hacían cada vez más frías, pero el calor que sus cuerpos emanaban era más que suficiente para cambiar la temperatura de la habitación. 

El explorar esta nueva tensión, que de nuevo no tenía; nada pues desde aquella tarde… desde hace mucho antes existía; nunca fue el tema principal de explotar para este lindo romance. 

Evangeline, lo sentía; cada vez era más difícil estar junto a Villa, sin imaginar que la situación terminaba con alguna escena pasada de tono. 

Pero, ¿cómo hacerlo? ¿cómo evitar la necesidad de derretirse entre sus labios, cómo guardar la compostura cada que, él humedecía sus labios?, cuando incluso hace caras raras al no comprender algo con facilidad, la forma con la que con algo de nerviosismo juega con su sedosa cabellera, cuando se achinan sus ojos al sonreír. 

Cualquier detalle tonto a simple vista era una invitación para hacer volar su imaginación. 

Para Evangie, era algo visual. Para Villa, no lo era. 

A él le volvía loco su tan particular y dulce olor, su tono de su voz, rozar su piel, sentir su calor, su presencia también enervaba cada impulso a resistirse y de alguna forma, la cercanía a la chica y el tiempo lo invitaban a pecar. 

Aunque, sentía miedo, sentía que con la experiencia que tuviera en llevar a la acción sus deseos, no quería decepcionarla, temía no poder complacerla, no sería la primera vez pero se sentiría como tal, amarla sin tener visibilidad. 

Lo cierto es que para ella eso era lo que menos le preocupaba, de hecho le entusiasmaba el poder explorar las mieles de su gran amor con el amor de su vida, Villa. Sentimiento más que mutuo. 

El poder resistir ante sus propios deseos y necesidades no era una situación que podrían manejar por más tiempo sin que se saliera de entre sus manos. 

Ese momento en el cual siguieran solamente lo que dictaba su corazón sin hacerle caso a la razón llegó, en otra de esas frías noches , una en la cual tenían la casa sola, es decir sin interrupción alguna. 

Aquellos besos que durante el día eran tiernos, lentos y muy sentidos, ahora con la luna, se abrían paso aquellos besos húmedos, desesperados, intensos.

Would You Be My Eyes? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora