Capítulo 22: Una dolorosa verdad - Segunda Parte
-Konohagakure no Sato 07:13 AM-
'Mmmm… estas almohadas… son de lo mejor…' -pensaba un adormilado Uzumaki que acomodaba su cabeza entre las cálidas almohadas de su cama- 'son tan suaves… y blandas… no quiero levantarme por nada en el mundo…'
"… Despierta de una vez, bestia" -dijo una voz que arruino el descanso del rubio-.
"… Mmmm… cinco minutos más…" -decía Naruto que no tenía ganas de levantarse, y acomodo mejor su cabeza entre sus almohadas-.
"Vamos, tengo hambre y no quiero esperar todo el día" -se quejó el mismo dueño de esa voz, haciendo que el rubio suelte un gruñido-.
"No molestes, voz extraña… solo quiero seguir durmiendo" -se quejó Naruto que solo quería seguir durmiendo-.
"Pues vaya que estas cómodo durmiendo encima de Alpha" -dijo la voz para que el rubio analice bien lo que escucho-.
"¿Qué dijiste?" -Naruto abrió sus ojos de forma pesadas, notando que un par de brazos rodeaban su cabeza que se encontraba entremedio de lo que no eran sus "almohadas"-.
Apenas comenzaba el día y Naruto Uzumaki despertó con una gran sorpresa al ver que dormía encima de su novia Ikaros, quien parecía no molestarle. En eso el rubio se sonrojo de a golpe que aquellas "almohadas" que tanto disfrutaba era el busto de la Angeloid, incluso una de sus manos tenia agarrado un seno.
"…" -Naruto no sabía que decir al respecto, ni menos al ver que tocaba uno de los pechos de su novia que dormía muy tranquila-.
"Veo que al fin despertaste, por un momento pensé que te la pasarías todo el día durmiendo encima de Alpha" -menciono la molesta voz que en realidad se trata de Nymph cruzada de brazos- "no solo eres una bestia, sino un pervertido que manosea a Alpha mientras duerme" -al decir eso, Naruto intento moverse del cuerpo de su novia, pero la enorme diferencia de fuerza de su novia el impedía que se despegara-.
"C-Cierra la boca enana, solo… solo busca algo que comer mientras yo salgo de esto" -decía Naruto intentando zafarse de los brazos de Ikaros que lo apegaban a sus pechos- "¡I-I-Ikaros-chan, e-e-este no es el momento…!"
"Masutā…" -decía la dormida Angeloid abrazando con cariño la cabeza de su amo, haciendo que este se quede entre sus pechos. Nymph vio la escena y soltó un suspiro sabiendo que Alpha aún no despierta-.
"Estaré esperando en la cocina a que ella despierte" -dijo la peliazul retirándose de la habitación de la pareja-.
"¡O-Oye Nymph, no te vayas! ¡Necesito que me des una ma-MMHH!" -Naruto no pudo continuar hablando cuando su rostro quedo atrapado en el busto de su novia-.
"Masutā…" -decía Ikaros que seguía abrazando la cabeza de un rojizo Uzumaki-.
'¡Maldición! ¡Por qué Ikaros-chan es tan fuerte y a la vez tan linda!' -pensaba el rubio que ya no sabía si soltarse de su "prisión", o simplemente de disfrutar del momento- 'bueno… no estoy en una misión, y Kāsan nos dio unos días libres… así que no estaría mal si…' -pensó bien su situación en la que se encontraba-.
"¡Así se habla Gaki, por fin te estas volviendo un hombre!" -hablo Kyūbi para que el rubio se preocupe- "¡por fin estas madurando, ahora queda que tomes el cargo y marques a tu querida novia como tu hembra!"
(¡Por qué tenías que despertar en este momento! ¡Mejor vuelve a dormir, bola de pelos!) -respondió el Uzumaki muy cabreado al escuchar las carcajadas de su Bijū-.