Incipiente: es la primera etapa del fuego, son las primeras chipas, de las cuales no se sabe la magnitud del fuego que generarán.
Una historia tan real como tú ♡
*Contiene escenas y descripciones sólo para adultos*
❤Gracias por estar aquí
*EN EDICIÓ...
Me sentía una tonta pero las lágrimas comenzaron a salirse de mis ojos. Era de madrugada y todo estaba sereno. Volví a mi departamento, nuevamente sola.
El maullido de Copito me hizo arrepentirme de mis pensamientos.
Me llegó un whatsapp de Abi.
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Sonreí. Ahora que vivía enfrente de la casa de Abi nada escapaba de la vista de mi amiga pero me sentía a gusto estando cerca de ella para ayudarla.
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Mi amiga se cruzó en bata y en pantuflas como si nada.
Me dio un abrazo del que no me quise soltar. Y comencé a llorar. No quería hacerlo, pero mi corazón lloraba por Aidan.
—Amy... —Mi amiga me miraba como si sintiera mi dolor.
—No pude decirle. No pude decirle que estoy enamorada de él.
—Pero era sencillo! Es repetir lo que me estás diciendo básicamente, tonta. —Abi me miraba y reí entre lágrimas.
—Pero él me preguntó si lo que nos unía era el dinero y recordé lo que me dijo cuando nos conocimos.
—Escucha el va a viajar no es así? Hagamos una cosa. Cuando vuelva lo buscas y le dices: Aidan, estoy enamorada de ti. Y ahi, bueno, que sea lo que Dios quiera.
—Tienes razón.
—Claro que la tengo, mi cerebro esta súper desarrollado por el embarazo.
La solución a mi problema era sencilla. Era tan algo sencillo como tomar coraje. Mi cabeza ahora relajada se permitió dormir mientras mirabamos televisión con mi amiga y mi Copito.
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