—Abran sus libros por la página ciento treinta cuatro
Abrí la puerta de un portazo y entré como si mi vida colgara de un hilo. Llegar tarde no me ayudaba a mejorar mis notas.
—Aquí estoy, ¿me echaban de menos? —sonreí, sentándome en mi silla de siempre.
Mis amigos soltaron unas risas mientras yo intentaba hacer ver que había llegado puntual, era culpa de la profesora que no se había dado cuenta de mi presencia.
—Buen intento señorito Till —me pilló—a qué se debe su falta de puntualidad, sea sincero
Umm.. ¿sincero?
El despertador sonó a las 7 a.m. pero yo no lo escuché porque...
Me he despertado en medio del jardín, con una resaca memorable, unas bragas en la cabeza, una mancha de ponche en todo mi traje y una nota enganchada en el culo donde ponía:
Llámame,
besos David.
¿Ahora era homosexual?
Demasiados problemas como para llegar temprano al instituto.
Hace falta tener en cuenta el pequeño detalle de que mi casa parecía un zoo esta mañana y que mis padres me iban a matar cuando viesen ese desastre. Los criados tendrían que limpiarlo, y esperaba que fuera pronto, MUY PRONTO.
— Estoy esperando una respuesta —insistió
—Uhm.. mi despertador no sonó—sonreí de oreja a oreja.
"oh.. me derrito con su sonrisa" escuché un comentario de una de las chicas del fondo.
La odiosa de Claiff me miró con cara de desaprobación y siguió impartiendo clase.
Buf, me salvé.
Me giré encontrándome a Mel y a Sara sentadas detrás de mí. Yo, naturalmente, me sentaba con Manu.
—¿Alguien sabe por qué me he levantado con unas bragas en la cabeza? —recosté la cabeza en mis manos.
—Ni idea—Mel rio entre dientes—Manu y yo nos fuimos a su casa.
Lancé una mirada a Manu el cual bajó la cabeza e intentó mirar hacia otro lado.
Este chico ya no me contaba nada.
—Y tu Sara, ¿sabes algo? —pregunté.
Lo último que recordaba era estar con Sara besándonos en el sofá.
Sara no contestó, ni me miró.
Oh no.
Conocía muy bien esa reacción.
—Tu.. y... yo.. ¿hemos..?
—NO POR DIOS— Sara se levantó de la silla gritando.
—Veo que les interesa muchísimo la electrólisis—comentó la odiosa—hagan el favor de callar.
—Vale, vale.. —suspiré—no hay quien entienda a las mujeres, un día quieren una cosa y al otro quieren lo contrario—refunfuñé.
—¿Enserio no te acuerdas de nada? —hice que no con la cabeza— ¿Y te has despertado con unas bragas en la cabeza? —Manu se rió.
—Y eso no es lo peor— suspiré.
—Oh por favor, cuéntame más—Manu parecía divertido.
Le empujé la cara con mi mano como diciendo "ni lo sueñes".
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Alerta Empollona
FanfictionEntrar en la universidad de sus sueños es todo lo que le importa a Lucas Till y está dispuesto a hacer lo que haga falta para conseguirlo. ¿Aunque tenga que mentir? Sí ¿Aunque tenga que sufrir y esforzarse? Sí ¿Aunque se caiga 900 veces y se tenga...