Capitulo 1

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Estaba saliendo apenas al descanso, tenía un gran desorden en mi lugar, asi que tardé en salir y Karla no me quiso esperar. Al salir, noté un gran escándalo, fui corriendo hacia donde veían todos y allí estaba ella, siendo molestada por alguien a quien nunca le dirigí la palabra por malos presentimientos. Supe que su nombre era Taino, no dudé en ponerme frente a Karla y comenzar a intimidar a aquel chico del sexto semestre. El sólo se burlaba y hacía sentir peor a quien trataba de proteger. Alcanzó mi límite cuando vi que mi amiga ya no aguantó y soltó un gran sollozo que solo me hizo tener ganas de matar a aquel chico, el cual terminé viendo como a una presa. Le di una última oportunidad, diciéndole que se calmara y dejara de molestar a mi amiga con su familia, pues no sé cómo llegó a sus oidos el estado de salud de Clara, la mamá de aquella agradable persona que no pudo soportar mas los estúpidos comentarios de Taino. El hizo caso omiso y la sed de sangre llegó a mí. Fui corriendo hacía el con una mirada que lo atemorizó y con un puño cargado para herirlo. Al escuchar ese grito de dolor, me dieron ganas de continuar. Había enloquecido. En mis pensamientos solo estaba una oración que resonaba en eco infinito gritando "¡Mas! ¡Que sufra mas!" esas palabras me controlaban, por mas que quisiera determe, no logré hacerlo. Ahora mi cuerpo actuaba por si mismo. Cuando finalmente sentí que me detenía, recuperé el control de mi cuerpo. La boca me sabía a sangre y no sabía la razón, luego volteé al piso y ahi lo vi. Tirado y sin rastro de vida. Mi primera acción, fue gritar del susto, no supe lo que hice y ver que había matado a alguien era preocupante. Me había olvidado de aquella chica de pelo castaño en esos momentos hasta que trató de comenzar un diálogo conmigo.
-Yadi... estás... ¿Bien?- Me preguntó Karla, aparentaba tener preocupación por mí, ella nunca supo ocultar el como se sentía.
-Si... eso creo... ¡Espera! Acaso... ¿No lo ves? ¿No lo viste? ¿Que... esta sucediendo...?-Pregunté algo asustada por lo que estaba pasando, no me creía lo que estaba sucediendo.
-¿De... que estas hablando...? Además, ¿Por qué estaba llorando hace un momento? y... ¿Sucede algo? ¿Por qué esa expresión de asombro y susto?-Me preguntó Karla aun con su cara de preocupación por mí.
-Acaso... ¿No lo ves? Dime... ¿Acaso no ves a... Taino? ¿Acaso no ves las manchas de sangre esparcidas por todo mi cuerpo en piel y ropa? ¿Que... esta ocurriendo... aquí?- Dije mientras comencé a asustarme, no comprendía lo que estaba sucediendo y eso me asustó demasiado.
-¿Q-qué estas... diciendo? ¿Yadi? ¿Te encuentras bien? ¿Ya...di? ¡Responde! ¡Yadi!- Pude notar su preocupación pero al tener líos interiores, algo no me permitía responder la mentira "estoy bien" incluso no podía responder nada o hacer algún movimiento. Escuché el timbre que indicaba el fin del descanso e involuntariamente me fui al salón seguida de mi amiga.

El caso de una asesina desconocidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora