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BRUNO

Pasar toda la tarde con Nia fue lo que hizo de mi domingo más pasable y menos solitario. Cada beso, cada momento juntos me llena el alma. Como ella se preocupa por mí, como me demuestra cuanto me quiere me hace tan bien y tan feliz. Me gusta tanto, quiero tenerla siempre junto a mí y muy cerca mío. Esas dos oportunidades en que fuimos un poco más allá me hicieron darme cuenta que de verdad me encanta y estoy tan enamorado de ella que podría esperarla toda la vida, aunque espero que no sea tan así.
Luego de dejarla en su casa robándole un último beso conduzco de vuelta al depa. Llego, guardo la moto y los cascos. Subo el ascensor y al entrar en casa allí están mis roomies y Cristina.
- Buenas- digo
- ¿Qué tal bro?- pregunta Joaco
-Todo normal- respondo
- Marina me contó, ¿fue muy mal?-
- Ni entre que ya me quería ir y Nieves también. La verdad que ya estoy harto de esa situación-
- Lo entiendo pero debes resistir, ser fuerte y obvio jamás rebajarte a su nivel- aconseja mi mejor amigo
- Sí, bueno por lo menos después vino alguien a alegrar mi día- digo sonriendo bobamente y pensando en Nia
- Veo que no pierdes tiempo con Nia, me alegro por ambos- dice Martín
- Al final no era tan complicada la mina- habla Cristina
- No le llames así- digo y empiezo a molestarme. Respiro para calmarme- Iré al cuarto, ¿pedimos algo para cenar?-
- Sí, no tengo ganas de cocinar- dice Martín
- Ni yo- agrega Joa
- Ni piensen en que yo haré algo, además ni creo que me quede a cenar. Viven a carbohidratos y grasa, iu- dice Cristina, que fastidio esta chica
- Me da igual lo que pienses- digo y me voy a mi cuarto.
Leo un buen rato hasta que los chicos me llaman para cenar, pidieron hamburguesas y papas fritas. Cristina como era de suponer se va ni bien empezamos a comer. Ignora a Joa y a mí y besa a su novio. Él la acompaña a la puerta y luego vuelve a entrar y come con nosotros.
- Martín- habla Joa
- ¿Si?- responde él
- ¿Estás seguro de lo que haces con esta chica?- pregunta
- No lo sé pero ya no puedo dar marcha atrás-
- Deberías poder, no puedes obligarte a sentir algo que no- digo y él asiente
Comemos sin decir nada más, lavo los platos y me voy al cuarto. Busco un boxer para ponerme luego de ducharme. Lo hago y me pongo una remera. Al acostarme y meterme en la cama, en la almohada hay un leve olor al perfume de Nia. Lo respiro y pienso en ella, leo un poco más hasta que me da sueño.
Antes de dormir le mando un mensaje de Buenas noches, no espero que responda porque es algo tarde. Cierro los ojos y me duermo soñando con esos dulces labios y esos ojos verdes brillantes que me enloquecen.

Al otro día

Me despierto, me cambio y armo mi mochila para el día de hoy. Recuerdo que debo ir más temprano porque hoy estoy como ayudante de catedra en la materia de Alicia, la madre de Nia.
Desayuno rápido y bajo. Saco la moto, me pongo el casco y arranco. Conduzco hasta la uni y voy al aula donde trabajo. Los de 3ro los lunes no tenemos clase a esta hora y me favoreció el poder aceptar la ayudantía. Dejo las cosas en una de las sillas del escritorio y me doy cuenta que al fondo del aula hay alguien leyendo.
Reconozco el libro que le regale a Nia y su cabello está atado en un rodete, algo muy particular en ella. Me acerco, ella escucha pasos y se aferra al libro asustada. Llego a ella y bajo el libro como en nuestro segundo encuentro. Sonríe al verme, pone un marca páginas en el libro y lo cierra.
- Me asustaste Bru- dice mirándome
- Perdón, no fue mi intención. ¿No me vas a dar un beso de bienvenida?- digo
- No sé si te lo mereces- dice y yo no espero más para unir nuestros labios en un beso tierno y bastante largo que ella sigue complacida. Paramos por aire- Eres tremendo- dice y me da un corto beso
- Te extrañe-
- Yo también- dice y me da un pico que yo alargo un poco. Paramos por la tos falsa de alguien
- Ejem permiso- dice alguien detrás mío. Es Alejandro, Nia toma mi mano y está temblando. No suelto su mano, me achico un poco acercándome más a ella y dejando pasar al idiota que hace llorar a mi ojitos verdes
- Todo está bien- digo cuando ya Alejandro se sienta a dos bancos de Nia. Ella respira- Ya ojitos verdes, estoy aquí- digo, beso su frente, su nariz y por último le doy un pequeño beso
- Gracias Bru, te quiero- dice
- También te quiero, debe estar por llegar tu madre- digo al ver que el aula se está llenando- Iré al frente pero estaré atento a vos- le doy un pico
- Gracias, de verdad. Gracias por ser así Bru- dice y me da un beso corto y tierno. Se separa y sonríe- Ve- dice brindándome una sonrisa
Camino hacia el frente y justo llega Alicia, me mira de una forma rara pero no le doy importancia.
La clase comienza, Alicia explica el tema mientras yo hago algunas anotaciones en el pizarrón lo que no me permite fijarme en Nia.
Luego de dos horas, la clase termina y Alicia se va.
Voy hacia Nia, ella sonríe al verme y se levanta para darme un pico.
- Te aseguro que querría quedarme aquí besándote pero debo ir a clases. ¿Te veo en el almuerzo?-
- Sí, ve- dice, le doy un beso corto y salgo del aula.
Camino a mi aula y me siento en uno de los bancos del medio. El profesor llega y la clase comienza, presto atención lo más posible pero noto que alguien me mira. Doy la vuelta y es Antonia. La ignoro porque lo que hizo no se lo voy a perdonar jamás, no pensé que ella me traicionaría así por despecho.
Termina la clase y antes que pueda irme se pone frente a mí, la alejo con suavidad para no parecer brusco o violento.
- ¿Por qué ya ni me hablas?-
- Sabes bien porque- digo
- Bruni, vos y yo, o sea yo sé que está esa chica pero ambos sabemos que yo soy...-
- No, no hay ambos entre nosotros y mucho menos desde que le dijiste mi secreto a Alejandro-
- Te hacia un favor, esa chica no es para ti. Es una mentirosa, amargada y antisocial-
- No hables así de ella, no la conoces. Ella es maravillosa y te guste o no ella es a quien quiero ahora y en un futuro ya sea cercano o lejano. Me voy- respondo y salgo del aula.
Voy al comedor, saludo a mis amigos para luego ir en busca de Nia y pasar mi almuerzo con ella.
La encuentro junto a Miranda, abrazo por atrás a mi oji verde y sé que está sonriendo.
- Veo que ustedes dos van muy bien- dice Miranda- No quiero ser la tercera rueda así que...-
- No Miri, quédate- le pide Nia
- Está bien-
- Prometemos no ser muy cariñosos y cursis- digo y Miranda ríe
- Eso jamás lo lograrás con Nia- dice y vamos a una mesa luego de comprar unos menús de pastel en fuente.
Me siento al lado de Nia y Miranda frente nuestro, ella mira hacia el costado. Por ahí está la mesa donde están mis amigos y Cristina
- No es gran cosa, ya vas a ver que pronto va a estar a tus pies- digo y Miranda me mira raro- Martín-
- No estaba, okey sí. No creo, se ve tan feliz con esa chica-
- No todo es lo que parece- digo y ahora Nia me mira raro- Vivo con él, sé cosas y además Cristina no me cae muy bien que digamos. A ninguno- digo
- Eres un chismoso- me reta Nia riendo
- No, sólo me interesa la felicidad de mis amigos y no creo que la de Martín esté con esa chica-
- Ya pero tampoco ilusiones a mi amiga que después duele cuando caes- dice y Miranda la mira mal
- Nia vos no crees que se pueda enamorar de mí, que pueda ser feliz conmigo- dice y noto que se está aguantando las lágrimas- Que gran amiga- dice y sale corriendo
- Miri, Miranda- grita Nia pero ella no se da vuelta, Martín la escucha y mira hacia el lado que se fue Miranda- Debo ir a buscarla, te veo luego- dice Nia, me da un pico y se va detrás de su amiga. Termino mi almuerzo y voy a la mesa con mis amigos a charlar un poco.
- ¿Por qué salió corriendo Miri?- pregunta Marina
- Porque, dije algo, Nia dijo algo y a Miri no le gusto y bueno- digo sin nombrar que de lo que hablamos era de Martín porque él y su novia están en la mesa
- Okey, algo entendí- dice Marina interpretando muy bien lo que dije y también lo que no
- Ya deberíamos ir a clase amor- dice Joaquín a su novia. Ella asiente, se levantan, Joa me saluda con un puño y Marina me abraza. Caminan hacia su pabellón y yo me quedo con la otra parejita. Veo la hora y por suerte ya es momento de ir a clases y voy. Espero que todo esté tranquilo y que Antonia deje de molestar. Me preocupa Miranda y como Nia trato el tema de Martín, tengo miedo de que piense lo mismo de mí y si llego a decepcionarla y le hago daño literal me muero. No soportaría ser el culpable de sus lágrimas.
Llega el profe y presto atención a la clase.

Nuevo cap
Nuestra Miri está tristona
Bru y Nia son cutes ¿no?
Bye
Pau😘😘😘

Ojitos verdes- Serie- EncuentrameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora