𝐓𝐚𝐤𝐞 𝐦𝐞 𝐡𝐨𝐦𝐞 *𝐇𝐚𝐫𝐫𝐲 𝐏𝐨𝐭𝐭𝐞𝐫 𝐀𝐔*

11

Astoria

Es lunes y ella entra, como casi cada día, veinte minutos antes de lo habitual en los demás estudiantes; de igual forma camina con sigilo al auditorio y sube a la cabina de sonido, espera ver a Draco ahí y cuando no lo ve supone que se le hizo tarde como siempre. Bufa algo fastidiada y se apoya parada en el escritorio.

— Por fin — suelta cuando escucha la perilla de la puerta moverse, sin embargo, quien se aparece ahí no es Draco, es Ginny Weasley y sonríe de forma poco amigable.

— Hola — comenta seca, Astoria examina cada movimiento de la chica; el lenguaje corporal puede revelar muchas cosas y ella solo sabe que Ginny no viene a tener una conversación amistosa. De pronto algo hace click en su cabeza y el miedo la invade.

— ¿Qué rayos? — Pregunta con preocupación, si Draco se aparece por ahí en ese momento se les acabó todo; una cosa es que lo sepan Ron y Harry, pero si Ginny, quien claramente ya lo sabe, los atrapa será el fin.

— Convencí al entrenador de que los chicos necesitaban una práctica extra hoy, así que los citó en el único horario libre — Ginny se ve las uñas con desinterés y luego la observa a ella — Pero tu luces decepcionada, ¿Qué ocurre Tori? ¿No somos amigas? A mí también me gusta llegar antes a clases — habla con cierto cinismo que a Astoria no le pasa desapercibido.

— No, no somos amigas — responde seria — Me lo dejaste en claro un montón de veces, me sorprende que no las recuerdes — admite con cierto recelo y la pelirroja asiente.

— Cierto, la verdad no me arrepiento — sonríe — Pero ahora no vengo a hablar de tus traumas, vengo a hablar de ti y Malfoy.

— ¿Qué quieres, Weasley? — Le pregunta molesta, sabe que no le conviene jugar con fuego de esa forma, pero no tiene opciones. No va a mostrarse débil frente a Ginny — Estoy ocupada.

— ¿Así le dicen ahora? — ríe y la observa por un momento, la pelirroja le da una de esas miradas como de lastima — Astoria, eres bonita ¿sabes? Mucho — asiente Ginny — No necesitas ser el secreto de ningún chico, ni competir con otras chicas por ser mejor. Hermione no lo quiere ni la mitad de lo que tú, pero por algún motivo está con el — empieza a explicar, pero ella no quiere escuchar nada de eso, es ridículo.

— No me hables como si fueras mi amiga — corta — No me hables como si tu y tu sequito de idiotas no me hubieran molestado por años burlándose y lanzándome sus estúpidas sodas — está muy tensa y se siente molesta, ¿Quién rayos se cree ella como para estar dándole consejos?

— No soy quien era hace meses — admite la contraria — He crecido, de eso se trata la adolescencia, genio — dice con sarcasmo y toma aire — El punto es que necesito que me ayudes a ayudarte.

— No necesito tu ayuda — espeta, pero Ginny le pone la palma de la mano frente a la cara para que guarde silencio.

— Créeme que si porque no tienes idea de lo que planeo hacer si no me escuchas — sisea — Trato de darte opciones, se va a saber Astoria, espero que por ti porque si no va a ir por mi cuenta. Creo en la justicia y lo que haces no está bien, así que te doy una semana para que tomes tu decisión y por favor que sea rápido — asiente con altivez, aquello logra preocupar a la chica, pero no lo suficiente porque se piensa una y otra vez qué tanto vale la pena el riesgo; no le responde nada a Ginny, deja que se vaya y la deje sola, necesita estar sola para analizar cada una de las posibilidades que tiene y realmente por un momento le parece sensato confesar lo que ha venido haciendo con Draco desde hace meses.