El séptimo hombre, el destello amarillo

Capitulo 10

desesperacion.

Todos los jugadores de Seirin se fueron dejando al rubio solo, naruto se fue a un lugar ya conocido, en ese lugar se encontró con Ryoko.

Al día siguiente.

Naruto, es tal y como lo dijiste. Aomine Daiki se prepara para enfrentarte en el próximo juego.

Supuse que era algo que tenia que suceder, no lo he visto en demasiado tiempo.

Que piensas hacer? Debes estar preparado ya que ese hombre no será nada fácil de lidiar.

Lo se, por el momento tendré que entrenar

Te encuentras bien? - pregunto preocupada la rubia.

No es nada, solo recordé cosas del pasado. Hay veces en el que me siento confundido sobre quien soy, pero pronto se que esto se detendrá, por el momento es mejor concentrarme en el juego. Me apoyaras? - pregunto el rubio mientras una ligera sonrisa aparecía en su rostro. La chica se sonrojo ligeramente y asintió a sus palabras.

Sabes que nunca me lo perdería. - la chica soltó una palmada en la espalda del rubio quien gimió del dolor.

Eso duele Ryoko-chan.

Eso te pasa por ser tan débil. La próxima vez que te gane en un partido tendrías una cena conmigo. - un ligero nerviosismo se presento en el rostro de la rubia, naruto no entendió el cambio repentino, ¿acaso ya no le bastaba con invitarle comida cuando estaban en su casa?

Eres tan lento, a veces me pregunto si conseguirás novia. - el rubio se ofendió y reclamo.

Entonces en caso de que me quede solo, entonces te tendré conmigo para siempre. - las mejillas de la rubia se sonrojaron de un rojo intenso, ella pensó que eso era una propuesta de matrimonio, sin embargo, lo que naruto quiso decir es que si el quedaba solo, naruto iba a quedar con ella para que ella compartiera su mismo destino impidiendo que tuviera novio.

Eres un tonto. Es mejor que nos vayamos a la cancha de entrenamiento, lo chicos nos deben de estar esperando.

Naruto asintió y ambos se fueron hacia donde se encontraban los demás.

En la piscina de la escuela.

El rubio se cambio para entrenar dejandose solamente un bóxer naranja, Riko se sorprendió tanto que su silbato cayo, sus ojos se volvieron estrellitas y apareció enfrente de naruto.

Tu ropa no dejaba ver bien, pero tu cuerpo esta mejor de lo que vi antes, puedo golpearte?

Una gota de sudor apareció en su cabeza.

No se emocione entrenadora. Recuerde que si Ryoko regresa no puedo garantizar nada. - dijo el capitán que se encontraba en la piscina.

Ehh, solo es un golpe. Puedo naruto?

El rubio asintió, la chica golpeo su abdomen y una sonrisa de satisfacción impregnó su rostro, ahora que ya había deshecho su curiosidad mando al rubio a la piscina.

En los vestidores.

¿Quién eres tu? - pregunto la rubia.

Soy Momoi. Tengo a alguien conocido en este lugar.

Ya veo. Me llamo Ryoko, estamos de la misma manera, teniendo en cuanta a los jugadores los únicos que destacan serian Kuroko y Kagami, ¿es alguno de ellos?

No lo es, pero pronto lo descubrirás. - por alguna razón esa sonrisa sínica no le gustaba.

Entiendo.