Sunflower [En Corrección]

Capítulo 27

Gulf perdonó fácil a sus amigos por dejarlo sólo con Mew en el directo. Entendía que ellos querían que se reconciliara con su pareja.

También lo entendía a él. Era probable que se reencontrara con la persona a la que le hizo un pacto kármico en su vida pasada, sabe el impacto que pudo tener y su fortaleza por seguir con él demostraba que en verdad lo amaba más allá de sus lazos.

"No puede ser, me estoy volviendo supersticioso. Bien dicen que el que con lobos anda, a aullar se enseña.
Se me están pegando ideas de mi sol"

Pero de alguna forma, le daba curiosidad cuánto podrían parecerse en el futuro.

Cambiando de tema.

No pudieron verse en un gran tiempo debido a las normas sanitarias contra el covid.

En los dos meses que duró su confinamiento, se la pasaron hablando por mensaje y por videollamada, a veces hacían lives en IG para convivir con las fans y pasar un buen rato.

Comían juntos, dormían juntos, veían películas juntos, se bañaban juntos y otras cosas más personales juntos. Todo a través de una pantalla.

Kana comenzaba a echar de menos el calor de Mew. ¿Quién lo diría? Pasó de ser una persona que no le gustaba el contacto físico a una que anhelaba un abrazo, un mimo, un beso en la mejilla de su P' favorito.

Entendió lo fuertes que eran Krist y Singto.
Desde hace varios años han tenido que amarse a la distancia; incluso sus horarios no eran compatibles.
Cuando despertaba Singto, el día de Krist concluía.

Casi nunca tenían tiempo para hablar debido al desgaste en su trabajo.

Aunque en la cuarentena su situación cambió; podían turnarse para desvelarse con el otro.
A Krist le parecía romántico el poderse conectar justo entre el día y la noche, una hora mágica, las puestas de Sol.

Éste último se preocupaba por su Singtuang, veía en las noticias que poco a poco los casos mortales en Estados Unidos subían aún más que en Tailandia.

—P'Sing cuidate por favor. No salgas de casa, no importa qué. No quiero que te pase nada malo —en ese momento se encontraba acostado en su cama mirando por la ventana al astro rey que se dirigía a su amado

—No temas Kit, todos mis proyectos están cancelados hasta que sea seguro. No me arriesgaría —él estaba en el escritorio de su casa. Le dedicó una sonrisa tierna, la sonrisa que le pertenecía a su querido Nong

De igual manera; Kana envidió a Lin y Sun.
Ellas vivían secretamente en la misma casa.

Seguro en ese momento estaban cocinando juntas y abrazadas; o quizá viendo The Gifted.
Lo más probable es que estuvieran haciendo suya a la otra.

No tenían miedo de ser demasiado obvias, o tal vez sabían que era menos sospechoso mostrarse cariño entre mujeres que entre hombres.

Pobre Kanawut, sin darse cuenta estaba sometido a esconder su amor por culpa de los prejuicios. Pero ni modo, era un precio que estaba dispuesto a pagar si se trataba de su Mew.
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Probablemente los que la tuvieron más fácil fueron Talay, Mike y Mild.

Talay porque pudo ser feliz aventándose un maratón de las series de Batman o jugando online mientras grababa directos en la madrugada en compañía de sus fans a los que se mostraba como una persona común, que es fanboy y gamer.

Mike porque seguramente se entretenía con la nueva aplicación "Tik tok" y traduciendo los comentarios de los latinos  -porque era de lo que más tenía- en donde le decían que le pagaban el boleto y lo adoptaban. Una oferta tentadora pero imposible lamentablemente.

Mild... porque es Mild. ¿Quién se aburriría estando cerca de él? Ni siquiera él mismo puede.
Siempre es el alma de la fiesta.

—Tua-eng, ¿en qué piensas? —la dulce voz del amor de su vida lo sacó de sus pensamientos —pareces distraído

—En nada importante, solo en que —apoyó su cabeza contra la almohada que estaba abrazando —Te extraño demasiado. Tanto que podría comerme un kilo de fresa si me lo pidieras

Suppasit quien no estaba tan acostumbrado a las muestras de afecto de su querido tímido, no pudo evitar sonreír ampliamente muerto de ternura —Si quieres te compro fresas por Internet

Kana respondió con una sonrisita tonta —No jeje. Mejor vámonos de vacaciones —apoyó el codo en la cama y a su vez su cabeza en su mano

—Pero amor, estámos en cuarenta; todos los centros turísticos andan cerrados

—¿Quién dijo que sería en la Tierra? —lo miró con ojos dulces

Mew presintió que una conversación profunda y sin sentido comenzaría su lindo niño —¿A dónde vamos?

—A Plutón —hasta parecía emocionado con la idea

—Pero Plutón es muy frío, está lejos del Sol

—Podemos utilizarlo como excusa para abrazarnos todo el tiempo

—Oiii, ahora eres tú el que quiere abrazar —tomó un sorbo a su oishi lemon —También es muy pequeño, ¿cabemos los dos?

—Así no estaríamos separados el uno del otro. Si nos hacemos bolita si cabemos. Además es muy tranquilo, eso da privacidad —dió un bocado al congee que le preparó mae

—Me convenciste, vamos a Plutón. Necesitamos comprar trajes espaciales y una nave —miró al techo para idear un plan

—Podemos llamar a los extraterrestres para que nos lleven, el traje se lo pedimos a la NASA —su semblante no era risueño, estaba hablando enserio

—Mejor le pedimos a Tony Stark que nos construya los trajes y a Superman que nos lleve

—Lo de Superman me parece bien, pero lo de pedirle algo a Iron Man nos saldrá caro

—Pero será de buena calidad —argumentó

—P', es mejor si lo pedimos a la NASA —parecía que se iba a enojar

—Está bien, los trajes de la NASA y nos llevará Superman —el mayor se rindió

Gulf festejó su victoria —¡Siii!

—Gulf. ¿Ya te dije que te amo?

Sus palabras lo tomaron por sorpresa, respondió con una pequeña sonrisa y las mejillas medio rojas

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😘