Ven al bar

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Es la una de la mañana pero técnicamente ya cuenta como el día siguiente jiji.

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Por obra de un impulso me quité la chaqueta y la puse sobre sus hombros para luego rodearla con mi brazo, una parte de mí quería reconfortarla.

Ella recargó su cabeza en mi pecho.

- Quiero que sepa que lo sé, pero no pienso obligarlo a hablar de lo que siente hasta que usted esté listo.

Comprendí en seguida, sentí algo cálido en mi pecho, fui descubierto en mis sentimientos pero no sentía pánico, estaba tranquilo.

Al cumplirse la hora salí de ahí con miedo de que alguien más quisiera estar con ella en serio, que deseara el servicio completo y ella no pudiera negarse pero no podía quedarme toda la noche a vigilarla.

Al volver con Hizashi él ya se estaba callendo de borracho.

Pagué todo lo que pidió y me lo llevé a rastras bajo la mirada indiscreta de esa mujer peliroja.

***

Al llegar a casa me tiré en la cama mirando al techo sin saber qué pensar.

Percibía su aroma impregnado en mi chaqueta.

Tuve una noche de descanso bastante reparador.

A la mañana siguiente me desperté sobre el medio día, me sentía como si hubiera dormido todas las horas que me faltaban.

Me levanté perezosamente y me preparé un café antes de salir a hacer la compra.

Me di un baño, me vestí para salir y fui al súper más cercano.

Estaba tomando la leche de los refrigeradores cuando me percaté de una familia que se encontraba en el pasillo de los cereales detrás de mí.

Eran Los dos padres y una jovencita con un niño, de un año quizá, en brazos, T/N.

Ella se dió cuenta de que estaba ahí y desvió la mirada pero sus padres lo notaron así que preguntaron, decidí acercarme ya que parecían decididos a venir ellos.

- Buenas tardes.- Dije.

- ¿Ya nos vas a decir quién es?- Preguntó su padre.

- Soy su profesor. Aizawa Shouta.- Hice una reverencia.- ¿Cómo estás T/N?

- Bien.- Respondió un poco más tranquila.- Le presento a mis padres.

Ellos saludaron.

- ¿Usted es el profesor asignado de su grupo?

Asentí.

- Gracias por ser tan comprensivo con lo del trabajo de la niña.- dijo la madre.- Recientemente tuvimos a su hermanito y las cosas se complicaron pero gracias a que ella nos apoya mucho hemos podido salir adelante.

Me sentía algo confundido así que T/N habló.

- Se refieren a que me da plazo extra para entregar las tareas y así yo pueda dormir un poco por la tarde ya que trabajo de noche en el lugar donde usted me recomendó.- Carraspeó.

- Ah, eso sí. No es nada.

- Su amigo fue muy amable en darle el puesto.- Dijo el padre.- a pesar de tener otros candidatos.

- Sí.- Me rasqué la nuca.- Y aún así su hija no me falla con una sola tarea.

- Estamos muy orgullosos de ella.

- Sí, me imagino... Bueno si me disculpan, debo retirarme.

Me despedí con otra reverencia y fui a pagar.