Entré a oficina del director luego de tocar y me senté frente a su escritorio.
- Dime Eraser ¿En qué puedo ayudarte?
- Es un asunto que necesito que se maneje con suma discreción.- Le pedí, él asintió.- Una de mis alumnas, T/N, está pasando junto con su familia por una situación económica algo complicada por lo que tiene que trabajar, ayer en su trabajo tuvo un enfrentamiento con una compañera del trabajo que usó su quirk en ella por lo que fue a parar al hospital. Yo estaba haciendo mi patrulla cerca así que interviene en el conflicto y era evidente que no podría asistir a clases hoy. Quiero un justificante para ella. Ésto es lo que me dió del hospital para justificar su falta.
- No entiendo para qué tanto misterio si es sólo eso.
- Sus padres no saben que estuvo en el hospital, creen que se quedó a cubrir horas extra en el trabajo, ella es mayor de edad y prefirió no preocuparlos.- Dije.- Por favor evite a toda costa mencionarles algo, no somos nadie para intervenir en esa decisión sea buena o mala.
- En eso tienes razón.- Suspiró revisando los papeles del hospital.- Todo parece en orden, justificaré su falta y podrá entregar sus tareas y trabajos el día de mañana.
- Gracias señor.
- Y Eraser...
- ¿Sí?
- Lo dejaré pasar porque la señorita pasa por una situación especialmente difícil pero quién debe pedirle discreción al otro soy yo, sabes que es inaceptable para la academia que una alumna trabaje en un lugar como ese.
- ¿Cómo lo...
- Los detalles de sus lesiones concuerdan con los sucesos relatados en el noticiero esta mañana. Pero haré como que no ví nada.
Asentí silenciosamente y me fuí.
Pasé la tarde en mi casa durmiendo para poder estar despierto por la noche.
A eso de las siete le envié un mensaje a T/N
Espero que no te moleste pero obtuve tu número de tu teléfono, paso por tí dentro de 30 min.
No hay problema, lo espero.
Conduje hasta su casa y me detuve a una cuadra.
Estoy afuera junto al árbol de Momiji.
No tardó en aparecerse por la puerta cargando su maleta probablemente para disimular con sus padres.
Corrió hacia el auto, metió todo al asiento trasero y se subió en el asiento del copiloto.
- Hola.- Saludó con un ligero sonrojo.
- Buenas noches.- Respondí tranquilamente.- ¿Te sientes mejor?
- Sí, se lo agradezco.
- No hay de qué.- Le dije arrancando el auto.- Espero que no te moleste hacer un viaje largo, iremos algo lejos para poder cenar tranquilamente sin ser reconocidos por nadie.
- Me parece bien.- Dijo ella.- No quisiera que se meta en problemas por mí.
Su aroma parecía aún más intenso que de costumbre, tal vez porque lo había estado acumulando la noche de ayer, ahora al liberarlo debe estar más concentrado, es agradable.
Conduje por al rededor de una hora.
Llegamos a la ciudad vecina a un restaurante muy bueno que conocí durante una misión hace un tiempo.
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Ven al bar
FanfictionT/N es una alumna un tanto especial... No socializa mucho pero su conducta y desempeño son ejemplares. Llegó en primer año con una luz en los ojos que poco a poco se fue apagando, supe que había problemas en su casa y que estaba siendo muy difícil p...