XI.

155 23 8
                                    

Conforme iba pasando sus dedos por el cabello llameante de Anne, se sentía más y más feliz. La pelirroja disfrutaba de sus caricias, mientras sus ojos celestes se abrían y cerraban.

Ella posicionó sus manos en su pecho, estaba acariciandolo y se puso de puntillas para alcanzar a besarlo, sus labios al conectarse empezaron en un baile acompasado, hasta que como siempre, Gilbert lo embargo el sentimiento de querer más, no estar satisfecho con eso, así que retiró sus manos de su cabello pelirrojo, para agarrarla por detrás de las rodillas y cargarla, sentirla más cerca.

Empezó a caminar hasta que empotró su cuerpo entre él y la pared, se separó de sus labios, para bajar sus besos al cuello de Anne.

一Gilbert.一 jadeó, fue música para sus oídos, su suave voz había salido distorsionada. Lo cual hizo que la situación que tenía abajo en sus pantalones incrementara.

Todo a su alrededor se apagó y despertó.

Se sentó en su cama.

一¿Pasa algo?一 preguntó la suave voz de Anne en la oscuridad de su cuarto.

Gilbert asintió con su cabeza jadeando.

一Sí, no te preocupes, estoy bien.

一¿Tuviste un mal sueño? Pensé que estabas soñando algo agradable.一 le volvió hablar la voz de Anne más de cerca.

Sintió las manos de ella acariciando su espalda, dándole ánimos.

一Fue más que agradable, en realidad.一 le respondió sintiendo un escalofrío recorrer su espalda.

一¿Y cuál es problema?

Gilbert soltó un suspiro cansado, y la miro a esos ojos celestes que lo traían loco, se relamió los labios, porque hasta ese momento sintió que estaban secos.

一Que no es real.

Anne hizo una mueca, apretando sus labios, que parecía estar pensando.

一¿Quieres que te ayude?

"¡Sí!" gritó en su cabeza, pero en el exterior estaba atónito, cerró sus ojos para conectar la respuesta correcta en su cabeza.

一No.一 respondió cuando la encontró.一 Es solo, esto es normal, lo sueños solo son manifestaciones de lo que deseamos en la vida real.

一Okay.一 fue lo único pudo decir Anne, se acercó peligrosamente a su cara.

一¿Qué estás haciendo?

La pelirroja estaba cerca de él, su aliento chocaba con su aliento. Sus labios peligrosamente cerca

一La gente da de estos para hacer sentir bien a las personas, me lo explicó Deli.一 explicó rápidamente, para posteriormente chocar sus bocas.

Los labios de ella eran inexpertos, no se parecían nada a los de sus sueños.

Pero le gustó. Le gustó saber que lo estaba besando, y le causó ternura el saber que era para hacerlo sentir mejor. Pero dentro de él, en su pecho se sintió culpable, si tan solo supiera lo que hacían en sus sueños.

Anne se separó y lo miró con aquellos ojos celestes, que tanto le encantaban.

一¿Funcionó?一 preguntó. Alejándose de su cuerpo, lo cual agradeció mentalmente.

Él solo asintió, por alguna extraña razón se quedó sin palabras.

一Que maravilloso.

一Sin duda alguna.一 le dijo cuando por fin encontró su voz. Necesitaba un té para calmarse.一 ¿Quieres un té?一 le preguntó amablemente al levantarse.

一Sí.一 respondió Anne.

Gilbert en la oscuridad por inercia extendió en la oscuridad su mano a Anne, la cual estaba a punto de retirar pero Anne la agarró.

Bajaron así hasta la cocina, al prender la luz, Gilbert miró a la pelirroja sentarse a la mesa de la cocina, mientras tarareaba. No podía pensar en alguna canción que se pareciera a esa, parecía tan suave como ella, era una melodía clara y... angelical.

Al calentar el agua se sentía menos angustiado. Había mirado en el reloj del microondas que eran las 4:25 de la mañana.

Se acercó ya cuando la tetera tenía el agua hirviendo, previamente había sacado las tazas y las había colocado en la mesa.

Un momento estaba sirviendo la siguiente taza y en la segunda en un descuido tiró agua hirviendo en su mano. Sintió como la piel le escocía, y también miró como por esa simple acción se había provocado una quemadura de tercer grado.

Instintivamente dejó caer la tetera en la mesa. Sintiendo el dolor agudo, se acercó rápidamente al lavavajillas, estaba actuando automáticamente. Pero podía escuchar cómo Anne había dejado de tararear y estaba en su espalda.

一Está bien, querida.一 se escuchó a él mismo calmarla.一 Solo tengo que poner esto en agua fría.

Abrió la llave del agua fría. Y colocó su mano bajo del chorro. Anne estaba justo a un lado de él. Mirándolo.

一Eso no se mira bien.一 observó Anne en voz alta, se le escuchaba preocupada.

一Pero lo estará.一 le respondió él.

Lo siguiente también lo impactó. Anne tomó su antebrazo, el que tenía la mano herida, él la miró confundido a sus ojos. Los cuáles eran celestes pero estaban brillantes, como si su iris fuera líquido vibrante, moviéndose, el dolor le estaba disminuyendo.

一Pero ¿qué...?一 murmuró mirando los ojos de Anne, no había una explicación lógica para eso. Se despegó de ellos jadeando y concentró su atención en su mano, que estaba mojándose, sin ninguna quemadura. 

Angel in the earth||Shirbert||Completa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora